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Alonso
Pérez: Equipo cubano no puede contra peloteros
de las Grandes Ligas
Amos en el terreno aficionado,
los cubanos encaran una peligrosa empresa ante
lo mejor del béisbol mundial
Ricardo López, Rumbo,
24 de enero de 2006.
A partir del 3 de marzo, cuando se ponga en marcha
el esperado, complicado e innovador Mundial de
Béisbol -Clásico Mundial es su nombre
oficial-, algunas inmensas incógnitas comenzarán
a ser despejadas. Una de esas grandes incógnitas
es el verdadero nivel que tiene el béisbol
de Cuba, aunque no profesional por mandato del
gobierno de la isla.
Cuba ha sido campeón mundial aficionado
25 veces y ganó la medalla de oro en tres
de las cuatro ocasiones que el béisbol
fue deporte oficial en Juegos Olímpicos.
El prestigio de la pelota cubana ha sido, pues,
ganado a pulso por su superioridad en torneos
internacionales, y con suma frecuencia hicieron
sentir a sus rivales -casi siempre peloteros jóvenes
y de poca experiencia- humillados.
Pero en el Mundial de marzo, los papeles podrían
invertirse.
Tras el permiso del gobierno de Estados Unidos
para que la representación cubana participe
en el torneo de las 16 mejores selecciones del
mundo, la realidad competitiva del que es el deporte
nacional de Cuba saltará a la vista.
"Su equipo no puede competir contra peloteros
de Grandes Ligas", aseveró Alonso
Pérez, presidente de la Federación
Mexicana de Béisbol, uno de los mayores
impulsores de torneos de béisbol a nivel
internacional.
"En los últimos cinco partidos contra
México, les ganamos tres, y sin ligamayoristas...
De la segunda ronda, no pasan", vaticinó
Pérez.
El Clásico Mundial marcará un parteaguas
para el béisbol y, ciertamente, lo hará
para el béisbol de Cuba, país que
extrañamente aún no se ha pronunciado
sobre el permiso recibido para jugar el torneo.
Los rosters finales de los equipos, con 30 jugadores,
deberán entregarse pocos días antes
del evento y en Cuba deben estar rompiéndose
la cabeza para llevar su mejor equipo.
Los días de gloria de Omar Linares u Orestes
Kindelán son historia... no hablemos del
'Duque' Hernández ni de José Contreras.
Habrá que esperar a ver la lista cubana,
pero el peligro del desprestigio es latente, por
no decir inminente.
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