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Hilda
Molina le pidió a Kirchner que no la abandone
en Cuba
La prestigiosa neurocirujana
le envió una carta al Presidente para que
le conceda una entrevista en caso de que vaya
a su país
Infoabe,
Argentina, 26 de mayo de 2005.
(NA) - La médica disidente cubana Hilda
Molina le envió una carta al presidente
Néstor Kirchner, solicitándole que
le conceda una entrevista en caso de que vaya
a esa nación caribeña, para pedirle
que no la abandone y continúe con sus gestiones
tendientes a que se le permita viajar a la Argentina
a visitar a su hijo, su nuera y sus dos nietos.
Molina manifestó su decepción ante
la decisión de Kirchner de no viajar a
Cuba, pues consideró que "tal vez
hubiera podido realizar alguna gestión
para que mis nietos no sigan sufriendo por esta
situación anormal que el gobierno cubano
les ha creado".
La médica reveló que la carta a
Kirchner la envió el 26 de abril pasado,
cuando todavía se contemplaba una visita
del presidente a Cuba, lo cual fue descartado
hace dos días por el canciller Rafael Bielsa,
argumentando razones de "agenda".
La mujer indicó que el embajador argentino,
Darío Alessandro, y el ministro consejero
Eduardo Gómez la visitan con frecuencia
a ella y a su anciana madre, quienes le aseguraron
que el Gobierno continúa realizando gestiones
ante las autoridades cubanas, "porque saben
que hay dos niños que ya están afectados
y sufriendo".
En tanto, afirmó que no mantiene contacto
con el gobierno cubano, ya que éste "no
entiende de diálogo con las personas que
no están de acuerdo con él".
En la carta enviada a Kirchner, Molina señaló:
"las persistentes y públicas violaciones
de los más elementales derechos de mis
nietecitos, dos inocentes niños argentinos,
les provocan un inmenso sufrimiento".
Agregó que "si esta triste realidad
se prolonga y ellos continúan creciendo
despojados de una relación normal con su
familia paterna, existe el peligro real de que
el desarrollo psicológico de ambos se afecte
significativamente".
Agradeció luego "desde lo más
profundo" del corazón la ayuda que
hasta ahora le ha dado el Gobierno, y concluyó
la misiva rogándole: "No nos abandone".
El hijo de Molina, también de profesión
médico, se radicó en Buenos Aires
hace once años luego de casarse con una
argentina, y tiene dos hijos nacidos aquí
que nunca conocieron personalmente a su abuela
y bisabuela, impedidas de salir de Cuba.
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