NOTICIAS
DE CUBA
El
Nuevo Herald
Un libro revela conexión cubana con
las drogas
Mercedes Francos / Efe, Madrid.
18 de enero de 2005.
Demostrar la relación de Cuba con las
redes del tráfico internacional de droga
es el objetivo de Conexión Habana, un libro
que los periodistas españoles Santiago
Botello y Mauricio Angulo presentaron ayer en
Madrid tras una investigación de la que,
según dicen, salieron "milagrosamente
vivos''.
Los dos periodistas vivieron una odisea de un
año, infiltrados en las mafias del narcotráfico
con cámara oculta, para demostrar que ''Cuba
no exporta droga, pero permite su tráfico'',
indicó Botello.
Cuba ocupa un lugar privilegiado en el mapa de
las rutas del narcotráfico y la mayor parte
de la cocaína procedente de Colombia y
Venezuela hace escala en la isla antes de partir
hacia Europa y Estados Unidos, explicó.
Angulo, por su parte, subrayó que "es
imposible que en un país donde todo está
controlado, se muevan cantidades de cocaína
tan importantes como las que movimos nosotros
sin que el gobierno o la policía estén
al tanto''.
''Al expresar a nuestros contactos el miedo que
nos producía estar negociando con una cantidad
tan importante de droga, en torno a los ocho kilos
de cocaína, ellos nos aseguraron que no
había ningún problema'', afirmó.
De todos estos contactos, ''al día de
hoy ninguno está en la cárcel'',
indicó Botello.
,Los dos periodistas viajaron juntos a la isla
una vez y Botello regresó solo después.
En la primera ocasión, viajaron como turistas
y realizaron todo el trabajo de infiltración,
dejándose ver en actividades como peleas
de gallos y contactando con los narcotraficantes
avalados por el jefe de una familia de narcos
españoles.
La intención del segundo viaje, en el
que Botello se identificó como periodista,
''era tener una versión del gobierno'',
para lo que hizo llegar a las autoridades de la
isla una cinta con las conclusiones obtenidas
en el primero.
''Lo único que conseguí fue estar
confinado en un hotel durante dos semanas, hasta
que un funcionario se presentó en mi habitación
y me amenazó en caso de que el reportaje
se emitiese o publicase'', explicó el periodista.
El libro, que sale a la venta hoy en España,
pone al descubierto una supuesta trama de espionaje
gubernamental a personajes famosos que han visitado
la isla, como Javier Bardem, Marujita Díaz,
Joaquín Sabina, Imanol Arias o Massiel.
Récord de detenciones de cubanos en
alta mar
Wilfredo Cancio Isla, El Nuevo
Herald. 17 de enero de 2005.
Los 1,498 cubanos capturados en el estrecho de
la Florida durante el 2004 constituyen la mayor
cifra de intercepciones de inmigrantes de la isla
en la última década, aunque las
dificultades para llegar a las costas estadounidenses
han generado nuevas rutas de fuga.
Desde la crisis de los balseros en 1994, cuando
las autoridades costeras interceptaron a más
de 37,000 cubanos para llevarlos a los campamentos
de refugiados en Guantánamo, no se reportaban
números tan elevados como los del año
anterior.
'Este es el resultado de un trabajo coordinado
entre varias agencias federales, que ahora 'tocamos'
la misma música'', comentó Luis
Díaz, portavoz del Servicio Guardacostas
en el distrito de Miami. "Definitivamente
estamos preparados como nunca antes en cuanto
a equipamiento tecnológico, personal e
información de inteligencia''.
El número de cubanos que logró
burlar los controles en alta mar --en embarcaciones
artesanales o lanchas de contrabandistas-- y pisar
territorio estadounidense también continuó
su tendencia decreciente el pasado año:
955 en comparación con los 1,072 del 2003.
La muralla creada contra el flujo migratorio
ilegal desde Cuba se fortificó básicamente
con las medidas de seguridad implementadas tras
los atentados terroristas del 11 de septiembre
del 2001. La preocupación por las fronteras
marítimas derivó en un aumento de
las embarcaciones y los agentes patrulleros, y
agilizó el programa nacional conocido como
Rescue 21, un sistema de comunicación que
facilita actuar con rapidez en los rescates y
la localización de objetivos.
Las prioridades de seguridad fronteriza en la
Florida se sustentan en que es el segundo estado
de la nación con mayor extensión
de territorio costero (1,800 millas) después
de Alaska, exponiéndolo a operaciones ilegales
de todo tipo por su posición geográfica.
Pero la relativa contención de entradas
por vía marítima desde el noroeste
cubano incentivó a potenciales inmigrantes
a buscar itinerarios alternativos, zarpando del
sur de la isla con destino a Centroamérica.
''La gente que han devuelto [a Cuba] y sabe que
la cosa está difícil por el norte,
está pensando en tirarse por Cienfuegos
o Santa Cruz del Sur, porque los guardafronteras
no patrullan la costa sur'', confesó Vladimir
Bestard, quien arribó en diciembre a West
Palm Beach luego de 13 intentos por escapar de
la isla y una repatriación desde Bahamas.
El insospechado ''canal del sur'' es cada vez
más frecuentado por cubanos sin recursos
financieros para pagar una operación de
contrabando humano, que cuesta en el rango de
los $10,000 por persona. La opción es entonces
cruzar el mar Caribe rumbo a Centroamérica,
asentarse temporalmente en un país de la
región e intentar luego el viaje final
a EEUU por tierra firme.
Las estadísticas del pasado año
sobre esta nueva ruta de la emigración
cubana son impactantes. Durante el 2004 más
de 400 cubanos llegaron a las Islas Caimán
y 259 lo hicieron a Honduras, según fuentes
de inmigración en esos países.
Generalmente, los cubanos utilizan las Islas
Caimán como punto para reabastecerse y
continuar viaje a países como Honduras
o Costa Rica, donde las autoridades les otorgan
permisos de permanencia temporal.
El arribo de cubanos a Islas Caimán y
Honduras se incrementó vertiginosamente
en el segundo semestre del año.
''El 90 por ciento de estas personas tiene como
objetivo llegar a EEUU, especialmente a Miami'',
señaló Carlos Sánchez, asesor
de la Dirección de Población y Política
Migratoria de Honduras. "Ellos consideran
que la ruta a Honduras es más corta y menos
peligrosa''.
Mientras, activistas comunitarios y abogados
de inmigración apuntan a otra avalancha
imparable que se multiplica por año: la
afluencia de cubanos hacia los puntos fronterizos
mexicanos para solicitar asilo político
en EEUU.
Aunque el Departamento de Seguridad Nacional
(DHS) en Washington no ofreció cifras totales
de cubanos refugiados a través de la frontera
mexicana en el 2004, los cálculos extraoficiales
sitúan entre 3,000 y 3,300 los que optan
anualmente por esta aventura migratoria, muchos
de ellos luego de viajar a México desde
Europa y Suramérica.
''Lo que resulta innegable es que la demanda
para salir de Cuba por cualquier vía no
ha cesado en los últimos años, porque
el gobierno cubano no ofrece respuestas a las
expectativas de sus ciudadanos, especialmente
de los jóvenes'', manifestó el politólogo
Damián Fernández, director del Centro
de Estudios Cubanos de la Universidad Internacional
de la Florida.
El académico consideró que persiste
''una ola migratoria silente de cubanos''. "Pero
nadie está interesado en discutir sobre
eso, pues implica un cuestionamiento de una política
migratoria fracasada que se mantiene intacta en
la agenda de esta administración''.
Además de las entradas ilegales, los acuerdos
migratorios firmados por Washington y La Habana,
en 1994, aseguran anualmente la inmigración
ordenada de unos 20,000 cubanos.
wcancio@herald.com
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