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DE CUBA
El
Nuevo Herald
Payá resta valor al cambio de Europa
Andrea Rodriguez / Associated
Press, La Habana. 5 de enero de 2005.
La lucha de los disidentes por cambiar el sistema
en Cuba es independiente del apoyo de otros países,
aseguró el opositor Oswaldo Payá,
y negó que un relajamiento de las sanciones
europeas para mejorar los nexos con el gobierno
isleño vaya a afectar su causa.
Payá, líder el Proyecto Varela
--una campaña de recolección de
firmas para convocar a un plebiscito-- no se mostró
preocupado por una propuesta de la Unión
Europea para dejar de convocar a los activistas
a sus recepciones a fin de mejorar sus vínculos
con la isla.
''La UE tomó la decisión de invitarnos
como expresión de solidaridad con el pueblo
de Cuba, como gesto de disgusto por la detención
de nuestros 75 hermanos'', recordó Payá
en entrevista con la AP.
El bloque sancionó a Cuba luego del encarcelamiento
de los disidentes en marzo del 2003 y comenzó
a invitar a los activistas a sus cócteles,
una práctica que irritó al gobierno
de Fidel Castro.
''Creo que en la UE existe la voluntad de contribuir...
para que se realicen los cambios hacia la democracia
(en Cuba)'', agregó Payá.
El lunes las autoridades cubanas reanudaron los
contactos oficiales --suspendidos como reacción--
con algunos países del bloque, tras la
propuesta de un comité del viejo continente
de suspender las invitaciones de disidentes.
''Nosotros hemos expresado claramente que los
cambios en Cuba dependen de nosotros, del pueblo
de Cuba, que son imparables'', dijo Payá
para quien la UE debería responder moralmente
por dejar de lado a los disidentes.
Según Payá, Cuba es firmante de
acuerdos internacionales en materia de derechos
humanos y las naciones deben velar por que los
cumpla.
''Nosotros somos también representantes
del pueblo cubano, no los únicos y la UE
comenzó a invitarnos ejerciendo su libertad.
No le pedimos que lo dejara de hacer, pero respetamos
esa libertad de invitarnos o no'', destacó
el activista.
Otros disidentes criticaron la política
de diálogo, cuyos lineamientos deberán
votarse en la UE este mes.
Cuba en el centro de la agenda de Martínez
Rui Ferreira / El Nuevo Herald,
Washington. 5 de enero de 2005.
Ahora que comienza una nueva etapa en su vida
política como senador federal por el partido
republicano, el cubanoamericano Mel Martínez
tiene bien claro cuáles son sus prioridades
para los próximos cuatro años.
''Voy educar a mis colegas en el Senado sobre
Cuba'', declaró Martínez en una
larga y fragmentada conversación con El
Nuevo Herald, que lo siguió ayer durante
varias horas mientras asumía sus nuevas
responsabilidades en el Capitolio.
Con relación a la isla, el nuevo senador
fue enfático. Agregó que no ve con
malos ojos el establecimiento de contactos ''pueblo
a pueblo'', pero no en los moldes en que se desarrollaron
durante la administración de Bill Clinton.
''Esos contactos deben ser mutuos, no una forma
encubierta de promover el turismo y los viajes
[de estadounidenses] a la isla; debe ser una forma
de llegar directamente a la sociedad civil, de
modo que podamos promover la democracia y llevar
la democracia a Cuba'', detalló.
En este sentido, Martínez se manifestó
por el envío de ayuda financiera y material
a la disidencia interna, pero añadió
que le gustaría que hubiera una contabilidad
de esos fondos mediante organizaciones "de
seriedad reconocida''.
''A través de la Iglesia Católica
y otras entidades similares, que pueden también
ser parte del exilio'', indicó.
Martínez también aseguró
que tiene como prioridad "crear los mecanismos
necesarios para que en el estado se dé
una respuesta adecuada a las tragedias que nos
toquen''.
Para ello, ''con la gran cantidad de problemas
que tenemos, voy a asegurarme de que recibiremos
los fondos [federales] que nos corresponden; debemos
proveer a la gente la vivienda que necesitan'',
afirmó el ex secretario de Viviendas.
Además, enfatizó, ''necesitamos
crecimiento económico y estoy comprometido
con ello. Eso no se logra sin ajustes en los gastos.
Sé que el presidente [George W. Bush] enviará
[al Capitolio] un presupuesto duro. Le echaré
un buen vistazo'', indicó Martínez,
dando a entender que sus lazos con el mandatario
no significan necesariamente que es incondicional
a la Casa Blanca.
La contención fiscal es, además,
un tema que roza otro al cual tiene en la mira:
la cuestión del Seguro Social.
En este aspecto, Martínez declaró
que la propuesta del presidente Bush debe ser
estudiada.
''Lo que no se puede hacer es no hacer nada.
Con la edad que yo tengo, no me gustaría
que me cambiaran los beneficios si me jubilo.
Por eso, a la gente que ya está en el sistema
se le debe mantener las cosas [beneficios]. Para
los que vengan después, se debe estudiar
nuevas circunstancias'', recalcó Martínez,
de 58 años.
La propuesta del mandatario creó un revuelo
ayer en Washington, cuando se supo que el partido
republicano estudia reformar el Seguro Social
disminuyendo los ingresos por jubilación
al privatizar todo el sistema.
''Insisto... eso no es así, nada está
decidido. Tenemos que estudiar, pero nadie será
perjudicado. Lo que no se puede hacer es cruzar
los brazos'', añadió.
Martínez manifestó que favorece
una reducción del presupuesto del Departamento
de Defensa. ''Hay dinero que se gasta donde no
se debe y después falta en otros lados'',
amplió sin precisar.
Donde sí fue preciso el senador es en
la cuestión de la guerra en Irak.
''Quiero saber cuál es la visión
que la administración tiene sobre un Irak
poselectoral, si las tropas van a tener un papel
secundario aunque cumplan y terminen su misión'',
acotó.
Martínez integra el poderoso Comité
de Relaciones Exteriores del Senado, además
del de Asuntos Bancarios; el de Asuntos de la
Tercera Edad y el de Energía.
''Son temas que se complementan. Con buena coordinación
se puede lograr mucho para los floridanos'', añadió.
rferreira@herald.com
Otra Letra del Año predice más
tragedias e invasiones militares
Associated Press, La Habana. 5
de enero de 2005.
Epidemias, intervenciones militares, impotencia
masculina y catástrofes caracterizarán
el 2005, pronosticaron sacerdotes de la santería
cubana, quienes habitualmente se reúnen
para dar a conocer sus predicciones.
Este enero, al menos dos grupos de babalaos (líderes
religiosos) dieron a conocer sus interpretaciones
de la ''Letra del año'', como se denomina
al signo que regirá los siguientes 12 meses.
Basada en cultos africanos traídos por
los esclavos, la santería mezcla además
ritos católicos y es el más popular
de los cultos aquí.
Según la Comisión organizadora
de ''La Letra'', una de las asociaciones de sacerdotes
cuyas profecías se dieron a conocer ayer,
las deidades regentes para el 2005 serán
''Changó'' (representante del rayo, la
justicia y la guerra) y ''Oyá'' (divinidad
de las tormentas y los vientos suaves).
Bajo el signo nombrado como ''Ofun Otura'' habrá
un incremento de las enfermedades contagiosas,
neuronales y la impotencia masculina.
Además se producirán epidemias,
alteraciones en las relaciones interpersonales,
tragedias entre vecinos e intervenciones militares.
Para salir adelante con bien será necesario,
aclaró ''La Letra'', mejorar los sistemas
hidráulicos y agrícolas, darse baños
de hierbas, consolidar el matrimonio y tener cuidado
con las personas a las cuales se les da albergue.
''Aspiramos a que el hombre sea mejor y mejore
su vida'', explicó Lázaro Cuesta,
el sacerdote a cargo de esta ''Letra'' y uno de
los más conocidos en Cuba.
El fin de semana, otro de los grupos de babalaos,
la Asociación Cultural Yoruba, dio a conocer
también sus predicciones. Para esta, las
deidades rectoras serán ''Obatalá''
(el padre de la tierra y los otros dioses) y ''Ochún''
(patrona de la fecundidad).
Según Cuesta, los signos de ambas ''Letras''
no son tan diferentes, pero sí suelen diferir
las interpretaciones que de ella hacen los babalaos.
Industriales a defender la cima
Agencia EFE, La Habana. 5 de enero
de 2005.
Industriales, actual campeón cubano, se
enfrentará hoy al modesto Matanzas, en
la reanudación de las eliminatorias de
la Serie Nacional de béisbol.
El elenco de la capital pasó las festividades
de fin de año en la cima de su grupo B
de la zona occidental del clásico cubano
de pelota, que expondrá ante el Matanzas,
que va igualado con Metropolitanos en el tercer
puesto de su grupo A.
El equipo campeón exponente, que dirige
el ex segunda base internacional Rey Vicente Anglada,
tiene un favorable balance de 25 triunfos y 12
reveses, separado a 1.5 juegos del Habana, ocupante
del segundo escaño.
Ahora el cuadro de Industriales se desplazará
hacia Matanzas, a unos 1,200 kilómetros
al este de La Habana, para enfrentar un doble
juego en la sede de sus rivales, considerado uno
de los más débiles de la presente
contienda, y que suma sólo 13 triunfos
y 23 derrotas.
La primera fecha de la reanudación de
las hostilidades de la contienda cubana presenta
también programas de doble juegos a partir
de las 5 p.m. entre Metropolitanos-La Habana,
Cienfuegos-Pinar del Río, Sancti Spíritus-Isla
de la Juventud,Holguín-Camaguey, Granma-Las
Tunas, Santiago de Cuba-Villa Clara y Guantánamo-Ciego
de Avila.
Las series previas que se inician hoy dan comienzo
al segundo tercio de la campaña, que sirve
a los peloteros cubanos de preparación
para el Campeonato Mundial, que se disputará
del 3 al 17 de septiembre en Holanda.
Las ciudades de Lameré, Amsterdam, Eindhoven,
Haarlem y Rotterdam son las sedes del Mundial,
donde Cuba sale con el favoritismo para refrendar
su título.
Mel Martínez hace historia
Rui Ferreira / El Nuevo Herald,
Washington. 5 de enero de 2005.
Mel Martínez hizo historia ayer al tomar
posesión de su escaño como el primer
senador cubanoamericano, y al imponer su lengua
natal en plena rotonda del Capitolio durante una
conferencia de prensa en español, idioma
al cual tuvieron que doblegarse hasta los más
experimentados reporteros anglos.
''No me iba a olvidar de mis raíces en
un momento así, ¿verdad?'', justificó
Martínez, desplegando una ligera emoción
que por momentos le cortó la voz.
Martínez enfatizó que sus prioridades
legislativas están en dar a la Florida
los recursos necesarios para su desarrollo.
''Quiero asegurar que vamos a recibir todos los
fondos federales a los cuales tenemos derecho,
que no nos quiten nada que necesitemos y, sobre
todo, que desarrollemos un programa de vivienda
decente que dé a los floridanos la casa
que merecen. Y vamos a trabajar entre los dos
partidos'', dijo Martínez.
Esa aseveración fue confirmada más
tarde por Bill Nelson, su homólogo demócrata
por la Florida, quien aseguró a El Nuevo
Herald que los dos van a tener una colaboración
''crítica'' en la solución de los
problemas del estado.
''Mel es un republicano moderado y yo un demócrata
moderado; además, somos muy amigos, amigos
personales. Con eso está todo explicado,
no habrá problemas'', dijo Nelson.
La emoción que Martínez desplegó
en la rotonda se incrementó momentos después
cuando se sentó a su nueva mesa, en el
amplio salón de sesiones del Senado, miró
detenidamente el mueble de madera pulida, le pasó
ligeramente la mano sobre la superficie y le dio
una palmadita.
''Vi que tenía allí incrustada
una pequeña placa de metal con mi nombre.
Elevé un pequeño rezo. Quise darle
las gracias a El por haber llegado aquí'',
recordaría luego.
Eran exactamente las 12:16:53 p.m. cuando Martínez,
con la mano derecha en alto, pronunció
''lo juro'' tras escuchar del vicepresidente,
Dick Cheney, el juramento en una ceremonia formal
que terminó con una ronda de aplausos.
Ayer también juró como senador
otro hispano, el demócrata Ken Salazar,
de Colorado, quien junto con Martínez son
los primeros latinos en llegar al Senado en 28
años.
Lo que sucedió después de la juramentación
de Martínez fue una sucesión de
hechos que lo colocaron de inmediato en la primera
plana de la política exterior estadounidense.
La asesora de seguridad nacional, Condoleezza
Rice, fue al Capitolio exclusivamente para verlo
después que se supiera que el senador sale
mañana hacia Israel para asistir como enviado
de Estados Unidos a la elección de la nueva
Alta Autoridad Palestina.
Rice no quiso revelar de qué hablaron,
pero Martínez admitió a El Nuevo
Herald que tocaron el tema del viaje a Israel,
las prioridades en política exterior, la
necesidad de traer el secretariado del Area del
Libre Comercio de las Américas a Miami,
y, naturalmente, el tema cubano.
''Insistimos en la necesidad de crear la plataforma
aérea para las trasmisiones a Cuba'', dijo.
Tras el juramento, Martínez fue efusivamente
saludado por la congresista republicana Ileana
Ros-Lehtinen, quien apoyó desde el inicio
sus aspiraciones senatoriales.
Entre la prensa llamó la atención
la ausencia de los congresistas cubanoamericanos
Lincoln y Mario Díaz-Balart, pero según
Martínez se cruzaron "en el pasillo
y me felicitaron''.
El nuevo senador aseguró que no guarda
rencor porque los dos congresistas no lo hayan
apoyado en su campaña. ''Eso ya pasó,
¡ya pasó! Ahora tenemos mucho trabajo
por delante'', dijo.
También sorprendió su encuentro,
aparentemente fugaz, con la ex presidenta panameña
Mireya Moscoso, quien se apareció en el
Capitolio acompañada por el presidente
de la Fundación Nacional Cubano Americana,
Jorge Mas Santos.
''Ella quiso celebrar con los cubanos estos momentos
históricos y nos acompañó
a felicitar a Mel'', dijo Mas Santos a El Nuevo
Herald.
Para el joven empresario, ''más importante''
que la toma de posesión de Martínez
son ''las consecuencias'' de su presencia en el
Capitolio.
"Mel es una persona con un acceso tremendo
a la Casa Blanca y con la idea acertada de enfocar
la lucha dentro de Cuba, de seguir apoyando a
la disidencia dentro de la isla, creando así
pequeños espacios de la sociedad civil
que tenemos allí", agregó Mas
Santos.
Igual de efusivo fue el secretario de Justicia,
John Aschcroft, quien acudió a la ceremonia
donde el nuevo senador se reencontró con
sus viejos amigos y vecinos de su natal Sagua
La Grande.
''Quiero agradecerles que nos hayan enviado a
Washington lo mejor de ustedes...'', dijo Aschcroft
a los presentes, refiriéndose a Martínez.
El secretario de Justicia apenas había
acabado de hablar cuando Martínez fue rodeado
por sus viejos amigos, entre ellos el viejo maestro
de la escuela secundaria de Sagua, el doctor Justo
Espinosa, quien viajo 16 horas en un autobús
desde Miami para poder verlo aunque fuera 20 minutos.
''Mel fue un alumno excelente en el colegio.
Muy maduro y carismático, pero yo lo hice
ingresar a los boy scouts, donde fue el abanderado
del curso'', dijo Espinosa.
A su lado, también oriundos de la tierra
villa clareña, los esposos Henry y Yolanda
Castro, no ocultaban su emoción.
''Nos conocemos del pueblo. Todavía me
acuerdo de la perra de su abuelo, una greyhound
enorme que se paraba con las patas en los hombros
de Mel, y se llamaba Yara'', dijo Henry Castro.
rferreira@herald.com
Martínez habla de cambio en Cuba...
en el Senado
Nestor Ikeda, Associated Press.
4 de enero de 2005.
WASHINGTON - Desde hace años, la comunidad
cubana en el exilio habla de la necesidad de cambios
en la isla. Mel Martínez, miembro de esa
comunidad, no podía ser la excepción.
Pero, esta vez habló convertido ya el martes
en el primer senador de origen cubano en el Congreso
de Washington.
"El cambio en Cuba hacia una democracia
se aproxima...", afirmó.
Martínez se refirió del "caso
cubano" como uno de los problemas que preocupan
a Latinoamérica y que requieren de una
solución, pero no adelantó detalles.
Martínez juntó a Cuba con el "caso
venezolano" sobre el cual afirmó que
"es necesario encarar... a partir del reconocimiento
de que hay un problema allí y que tenemos
que resolver".
Martínez, quien ha sido secretario de
Vivienda del presidente George W. Bush en los
últimos cuatro años, es el primer
senador estadounidense nacido en Cuba.
Es, por supuesto, miembro del Partido Republicano,
de Bush, que ha consolidado su mayoría
en las elecciones de noviembre con un total de
55 miembros. Otros 44 senadores son del Partido
Demócrata y uno es de origen independiente.
Junto con Martínez asumió también
el cargo el senador Ken Salazar, demócrata
de Colorado, para formar la primera dupla hispana
que sirve en el Senado en un mismo periodo legislativo,
el 109no de la historia republicana de Estados
Unidos.
Martínez, representante del estado de
la Florida, se une así a otros tres miembros
de la Cámara de Representantes que son
de origen cubano y representan al mismo estado:
Ileana Ros-Liehtenen, Lincoln Díaz Balart
y su hermano Mario Díaz Balart.
Ros-Liehtenen y Lincoln Díaz Balart son
ya conocidos por sus severas críticas al
régimen comunista del presidente Fidel
Castro, así como al presidente venezolano
Hugo Chávez, un amigo estrecho del gobernante
cubano.
Martínez no es, sin embargo, el primer
extranjero que llega a ser senador federal. El
primero fue el mexicano Octaviano Ambrosio Larrazolo,
nativo del estado de Chihuahua, elegido por el
Partido Republicano en Nuevo México en
1928.
Anuncian mejora del servicio eléctrico
Efe, La Habana. 4 de enero de
2005.
La generación de electricidad en Cuba
será ''más favorable'' en el 2005,
después de superada la avería en
una termoeléctrica que ocasionó
el año anterior graves afectaciones y apagones
en la isla, dijo ayer un alto funcionario.
''Será una etapa de duro trabajo, pero
nos permitirá al término del año
estar en condiciones de normalizar la disponibilidad
y la confiabilidad del parque de generación'',
afirmó el viceministro de la Industria
Básica, Pedro Abigantús, en declaraciones
al semanario Trabajadores.
El funcionario, que también es director
de generación de la Unión Eléctrica,
manifestó que no puede decirse que "hayamos
solucionado definitivamente el problema del déficit
de generación acumulado por la falta de
mantenimiento''.
''Nos tomará aún varios meses estabilizar
los ciclos de mantenimiento de las unidades y
tener un margen de disponibilidad suficiente para
dar un servicio totalmente estable'', añadió.
Además advirtió que será
necesario mantener las medidas de ahorro vigentes
que consideró ''decisivas'' para disminuir
las afectaciones y reducir el consumo de combustible.
El directivo anunció para este año
importantes inversiones que contemplan la generación
de electricidad a partir del gas acompañante
de los pozos petroleros en el oeste de la nación.
En ese sentido, avanzó que se irán
poniendo en servicio en diferentes etapas tres
nuevas unidades, que deben generar electricidad
a partir del gas disponible en la zona occidental.
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