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Víctor
Rolando Arroyo víctima de malos tratos y humillaciones
Reporteros
sin fronteras, 19 de octubre de 2004.
Elsa González pudo ver a su marido el
9 de octubre de 2004, en una visita conyugal.
La visita, a la que describe como una "tortura
conyugal", se desarrolló en una pequeña
habitación de la zona de seguridad de la
cárcel, oscura y apestando a orina. Había
una temperatura de 35 grados y las sábanas
estaban sucias.
Víctor Rolando Arroyo pudo describirle
los malos tratos de que fue víctima en
septiembre. El primer día del mes un guardián
le pidió que recogiera sus cosas y le llevó
a una oficina donde revisaron y pisotearon sus
efectos personales. Algunos oficiales le insultaron.
Uno de ellos grababa la escena, buscando una eventual
reacción violenta de su parte. Posteriormente
le trasladaron a una celda de aislamiento en la
que permaneció 15 días, durante
los cuales solo durmió cuatro veces en
un colchón. Ahora, el periodista ya no
se encuentra en esa celda pero continúa
internado en la parte más segura de la
cárcel, junto con 200 presos comunes. Según
Elsa González, su marido ha perdido siete
kilos desde el mes de agosto.
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