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No quieren más balseros cubanos
La
Prensa. Tegucigalpa,
Honduras, 22 de junio del 2004.
No más extranjero ilegales en el país.
Los titulares de Gobernación, Defensa y
Seguridad se reunirán de emergencia para
analizar y establecer medidas que traten de detener
su ingreso.
Más de 50 cubanos han ingresado ilegalmente
al país en lo que va del año. Sólo
en los últimos días, unos 15 isleños
han llegado a bordo de balsas a las costas hondureñas,
pidiendo asilo político.
Operativos
Según las autoridades de Migración
el fenómeno se debe a la supuesta confabulación
de hondureños con personas radicadas en
Miami, con quien establecen comunicación
y les facilitan la llegada a Honduras, para después
de un tiempo seguir hasta Estados Unidos.
Las autoridades, desde ya anuncian operativos
por mar y tierra para evitar que las personas
indocumentadas lleguen a tierra firme.
El director de Migración, Ramón
Romero, advirtió que algunos balseros cubanos
llegan al país aprovechándose de
la buena voluntad del gobierno, y que utilizan
el país como puente para llegar a EUA.
"Vienen aquí diciendo que quieren
trabajar para ayudar a su familia, pero es una
mentira, porque la mayoría de ellos busca
asilo político en el país, para
después viajar ilegalmente a EUA".
El objetivo
El último grupo de cubanos que llegó
al país a bordo de una lancha, el pasado
sábado 19 de junio, corroboró las
sospechas de las autoridades. Ellos confirmaron
que su deseo es llegar a Estados Unidos para reunirse
con familiares y cumplir su sueño americano.
Su objetivo es permanecer como refugiados un
tiempo, luego intentarán llegar a EUA.
Los refugiados ya hicieron las primeras llamadas
telefónicas a sus familiares en el país
de Norteamérica, quienes respondieron felices
a la noticia.
Vendieron la lancha en que viajaban:
Los últimos aventureros caribeños,
que llegaron a Puerto Cortés, vendieron
la lancha, el motor y todos los instrumentos de
navegación que utilizaron para poder llegar
a Honduras por tres mil lempiras, dijo Walkin
Dieguez Fernández, uno de los balseros
cubanos.
Tomaron la decisión de venderla por la
necesidad de comprar alimentos y disponer de dinero
para poder vivir en el país mientras se
decide su status migratorio por parte de las autoridades
hondureñas.
Dieguez Fernández indicó que desde
que hicieron su arribo al embarcadero del barrio
El Porvenir la persona, identificada como Reynaldo
Rodríguez, les compró la embarcación.
"Mostró interés por hacer el
negocio y nos entregó el dinero completo,
luego de haberla inspeccionado personalmente".
Los pobladores que fueron testigos de la negociación
comentaron que el comprador se había aprovechado
de la necesidad de los cubanos, sólo el
motor tiene un costo arriba de los 30 mil lempiras
en el mercado nacional.
La vicealcalde, Consuelo Coindet, y la regidora
Johann Prieto visitaron a los cubanos y les prometieron
ayuda mientras la delegación seccional
de Migración les tramita un permiso especial
de estadía de 15 a 30 días.
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PRENSA 2003
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