|
Visita de canciller: Cuba quiere
estrechar contactos con Chile
Phillip Durán.
El Mercurio,
Chile, 23 de febrero de 2004.
Chile no se pronunció
ante esperanza de La Habana de conseguir apoyo
por derechos humanos ante la ONU
El azar. Ésa fue la razón que dio
ayer el canciller cubano, Felipe Pérez
Roque, para explicar su corta visita a Chile,
que se inició a las seis de la mañana
y terminó a las 14 horas.
Pero a pesar de que fue la suerte -o la nula
disponibilidad de vuelos directos La Habana-Asunción,
donde hoy iniciará una visita oficial-
la que lo trajo a Santiago, el diplomático
aprovechó de enviar la primera señal
para conseguir el apoyo chileno a uno de los temas
más sensibles para Cuba: la situación
de derechos humanos.
Además, la aspiración de La Habana
es reactivar los contactos de "alto nivel",
indicó Pérez.
En la Plaza de la Constitución, tras depositar
una ofrenda floral en el monumento de Salvador
Allende, Pérez Roque expresó el
deseo isleño de que Chile cambie su posición
sobre la situación de derechos humanos
en la isla en el seno de la comisión especializada
de la Organización de Naciones Unidas.
"Quisiéramos que Chile cambiara su
posición. Nos duele que el Gobierno de
Chile haya votado en la Comisión de Derechos
Humanos contra Cuba. Nos parece que Chile tiene
un espacio para comprender que Cuba es un país
bloqueado, acosado", planteó.
Aunque minutos antes había sido recibido
en La Moneda por el subsecretario de Guerra, Gabriel
Gaspar, y el presidente (s) del Partido Socialista,
Arturo Barrios, Pérez Roque aclaró
que no conversó el tema con el representante
del Gobierno ni con el dirigente del PS.
Tampoco lo hizo más tarde, al reunirse
con el canciller (s) chileno, Cristián
Barros, en un almuerzo en la residencia del embajador
cubano en Chile, Alfonso Fraga.
Ante la señal enviada por el ministro
cubano, Barros despejó dudas.
"Ese no es un tema que hemos tratado en
la Cancillería. Lo veremos en su oportunidad,
cuando se presente una resolución".
Fuentes diplomáticas explicaron que no
es conveniente apresurar una opinión del
Gobierno antes de conocer una propuesta oficial
en cuanto al tema. "No moveremos una pestaña
antes", explicaron.
Sin embargo, la visita fue interpretada como
un intento cubano por estrechar lazos, no sólo
ante la cita de la ONU, sino también con
miras a un posible encuentro bilateral en la Cumbre
Iberoamericana, que tendrá lugar en noviembre.
Pérez Roque había acordado un encuentro
con el presidente de la Democracia Cristiana,
el senador Adolfo Zaldívar, una de las
voces más fuertes que pidieron el año
pasado la condena de Cuba. La cita no se realizó
por problemas de agenda.
© El Mercurio S.A.P
|
