NOTICIAS DE CUBA
El Nuevo Herald

Desertor desmiente las cifras de Cuba

Gerardo Reyes , El Nuevo Herald.

Las cifras de médicos de Cuba que han llegado a Venezuela son más altas de las que reconocen los gobiernos de ambos países, según un periodista cubano que desertó hace un mes en Caracas.

Uberto Mario Hernández Gato, quien estaba adscrito a la oficina de prensa de la embajada de Cuba en Venezuela, aseguró a El Nuevo Herald que los médicos cubanos que han arribado al país no son 1,500, como se ha informado, sino 3,257. Los entrenadores de la isla son en total 1,165, dijo.

Desde un lugar de América Latina que pidió que no fuera mencionado, Hernández explicó a El Nuevo Herald que por órdenes del gobernante Fidel Castro, los médicos están recibiendo equipos de televisores y VHS marca Panda.

Los equipos son utilizado para proyectar intervenciones de Castro y del presidente Hugo Chávez a los vecinos de los barrios donde trabajan.

''Han llegado videos del [discurso] del 26 de Julio, de la graduación de médicos y una mesa redonda en la que Chávez se refiere a una periodista norteamericana que publicó un artículo sobre los vínculos de su gobierno con el terrorismo'', explicó Hernández.

Los médicos no obligan a nadie a ver los videos, pero es su deber invitar ''sutilmente'' a los vecinos con cualquier pretexto para ponérselos, agregó.

Por lo menos tres vuelos de Cubana de Aviación llegan a Caracas a la semana (lunes, miércoles y viernes) con médicos, entrenadores y asesores en cuestiones agrícolas como la siembra de cultivos organopónicos, explicó.

Hernández, de 42 años, dijo que trabajaba para Radio Guamá, la emisora de Pinar del Río, como comentarista deportivo. Estaba en Venezuela por invitación de una emisora. El primero de octubre decidió no volver a Cuba.

Piden a la ONU que exija respeto a los derechos

Wilfredo Cancio Isla , El Nuevo Herald.

Prominentes figuras y organizaciones de la disidencia interna exhortaron ayer a la comunidad internacional a que exija al gobierno cubano el respeto a los derechos humanos y la liberación de los presos de conciencia con la misma intensidad que reclama el levantamiento del embargo estadounidense a la isla.

En un urgente llamado ''Por la vida de los prisioneros políticos en huelga'', el opositor Oswaldo Payá Sardiñas pidió ayer a la Asamblea General de Naciones Unidas (ONU) que condene "la crueldad del gobierno de Cuba''.

''Si verdaderamente los gobiernos que están representados en la ONU, lo que les preocupa es el bienestar y los derechos de los cubnos y tienen coherencia moral, deben exigir al gobierno de Cuba el cese del trato cruel y degradante a los prisioneros políticos y su liberación'', indicó el comunicado firmado por el líder del Movimiento Cristiano Liberación.

Las declaraciones de Payá y otras figuras de la oposición pacífica se producen un día después de que la ONU condenara el embargo contra Cuba por amplísimo margen de 179 votos a favor, tres en contra y dos abstenciones. El hecho coincide internamente con una huelga de hambre de siete disidentes encarcelados en la prisión provincial de Holguín, quienes permanecen en ayuno desde el pasado 18 de octubre.

La condena al embargo por duodécimo año consecutivo en el seno de la ONU destapó la euforia oficial del régimen, que llegó incluso a convocar a 5,000 personas en el teatro Carlos Marx, en La Habana, para presenciar en vivo la votación.

El economista Vladimiro Roca, de la coalición disidente Todos Unidos, consideró "el gobierno de Cuba continúa amparado en el lenguaje de la doble moral''.

''¿Cómo pueden entenderse que Cuba reclame el cumplimiento de las resoluciones de la Asamblea General de la ONU sobre el embargo y se niegue a cumplir las trece resoluciones que ese mismo organismo ha emitido a través de su Comisión de Derechos Humanos [desde 1989]?'', se cuestionó Roca, quien es un ferviente opositor del embargo.

El opositor señaló que las naciones representadas en la ONU deberían condenar al gobierno de Fidel Castro ''por haber embargado todos nuestros derechos ciudadanos'' y restó importancia a la ''rotunda victoria'', que proclamaron los medios estatales respecto a la votación.

''He recorrido entre ayer y hoy numerosos lugares de La Habana y puedo asegurarte que nadie habla de eso, y que el júbilo gubernamental no encaja en la realidad de la gente común, porque la situación económica es cada vez peor'', agregó Roca.

También ayer el Arco Progresista --integrado por grupos disidentes de izquierda-- divulgó una nota en la que rechaza la prolongación del embargo, pero a su vez advierte que la votación "no puede solapar una realidad: el gobierno cubano no respeta los derechos humanos, vistos en su integralidad e indivisibilidad''.

Médicos cubanos entre condenas y bendiciones en Venezuela

Gerardo Reyes/El Nuevo Herald, CARACAS.

La madre de Raiza Rojas comenzó a sentir un dolor en el pecho a las tres de la madrugada en su humilde rancho situado en uno de los empinados cerros de Antímano, al oeste de la ciudad.

Presintiendo que su mamá de 83 años estaba en medio de un preinfarto, Rojas corrió a la Casa de la Salud y la Vida donde le abrió las puertas el médico cubano del barrio a quien todos conocen como Carlos, pero nadie recuerda el apellido.

Rojas recuerda que el médico se presentó en su casa, le tomó el pulso a la anciana y la llevó de inmediato en una ambulancia al Hospital Militar. La madre de Rojas sobrevivió.

Carlos es uno de más de 1,500 médicos cubanos que viven en Venezuela como parte de la misión Barrio Adentro, implantada por el gobierno del presidente Hugo Chávez para llevar salud a los más necesitados en barriadas humildes donde el incumplimiento de sus promesas estaba amenazando la fidelidad de su mayor fortín político: los cerros de Caracas.

Muchos de los habitantes de los barrios pobres consideran que el plan de los médicos cubanos es una ''bendición de Dios'', como le dijo Rojas a El Nuevo Herald. El mayor gremio médico de Venezuela cree que no es más que una ''invasión ideológica disfrazada de bata blanca y estetoscopio'', según palabras de Douglas León Nateras, el presidente de la Federación Médica Venezolana.

''Son operadores políticos que le están haciendo propaganda al gobierno'', agregó Nateras. Lo que nadie pone en duda es que la labor de los médicos cubanos ha elevado visiblemente la popularidad de Chávez en esas zonas.

''Aquí ni siquiera soñábamos con un médico'', explicó Rojas. "Ahora tenemos dos que viven con nosotros y nos atienden día y noche''.

Conformado por 22 parroquias y 1,750 barrios, el municipio Libertador, cuyo alcalde es el furibundo alcalde chavista Freddy Bernal, se convirtió en la sede piloto de Barrio Adentro donde hoy trabajan 810 médicos cubanos.

Los primeros 150 llegaron de Cuba en marzo de este año, lo que desató la ira de los médicos venezolanos que denunciaron al gobierno por no haber exigido ninguna evaluación de sus conocimientos ni homologación de sus títulos, como se requiere para cualquier médico extranjero que aspire a trabajar en el país.

''Llegaron del avión a los barrios'', explicó Nateras a El Nuevo Herald. "Cuando protestamos, el embajador de Cuba en Venezuela nos respondió que se quedarían un día, un año, 10 ó 20 años, según lo ordenara el comandante''.

"El problema --agregó-- es que no dijo cuál comandante, si Chávez o Castro''.

La federación demandó al gobierno por permitir el ejercicio ilegal de la medicina y ante el Tribunal Supremo interpuso un recurso de amparo para dejar sin efecto un acuerdo firmado por el Colegio Médico del Distrito con el gobierno de Cuba.

La FMV considera que el plan Barrio Adentro es ''un caballo de Troya'' para ingresar los médicos cubanos.

El tribunal se pronunció a favor de la federación, pero el fallo no ha sido obedecido.

Además de la cuestión legal y política, lo más preocupante, explicó Nateras, es la falta de preparación de los médicos.

Nateras citó como ejemplo la muerte del niño Davis Campos, a quien un médico cubano le prescribió aspirina cuando se presentó con un cuadro de meningitis en una de las casas de la Vida y la Salud. La aspirina está contraindicada para este tipo de afección.

De acuerdo con una funcionaria del gobierno venezolano vinculada al plan Barrio Adentro, y quien pidió no ser identificada, la mayoría de los médicos cubanos ha hecho postgrados de medicina familiar en su país y están preparados para atender casos de pediatría, cirugía menor, ginecología y obstetricia.

''Tienen una formación universal con una direccionalidad hacia áreas de escasos recursos que no existe en Venezuela'', explicó.

En cuanto a la actuación del médico que suministró aspirina al niño, comentó que la dosis no representaba un peligro para el caso de meningitis. Dijo que en ese caso también influyó el hecho de que los médicos venezolanos no quieren atender pacientes examinados por cubanos.

''El paciente queda estigmatizado'', afirmó la funcionaria.

El Nuevo Herald intentó llegar a una de las casas donde se alojan dos médicos cubanos, pero los funcionarios de la alcaldía del municipio Libertador advirtieron que ''la comunidad del barrio'' no permitiría el acceso al lugar.

Según la funcionaria ''las comunidades los cuidan y lo protegen tanto que hasta nosotros tenemos que pedir permiso para verlos y hablar con ellos''. De esa manera, explicó un médico venezolano, también se controla una posible deserción masiva.

Los médicos reciben viáticos de $120 mensuales y en Cuba sus familias continúan recibiendo auxilio del gobierno cubano. La mayoría vive en casas de familia. La señora Rojas explicó que los vecinos del barrio hacen turno cada semana para preparar sus alimentos y limpiar su ropa.

La funcionaria del sector de salud del gobierno explicó a El Nuevo Herald que "casi ningún médico venezolano está dispuesto a vivir en las condiciones que viven los médicos cubanos''.

Nateras respondió que no existen condiciones de seguridad y que si el gobierno de Chávez realmente quiere hacer jornadas de salud, las universidades venezolanas tienen la preparación y la voluntad para hacerlo.

Con el argumento de que fue testigo de prácticas médicas inadecuadas del plan Barrio Adentro, el director de salud de la alcaldía de Caracas, Edilberto Pacheco, renunció a su cargo en septiembre.

Pacheco dijo que constató que se están formulando productos farmacéuticos llevados desde Cuba sin ningún control de calidad.

''Mis principios'', dijo Pacheco a el diario El Nacional "son contrarios a la patología del poder que hay en Barrio Adentro''.

greyes@herald.com

Muy importantes los militares para el poscastrismo

Pablo Alfonso , El Nuevo Herald.

Los militares cubanos, instalados en los principales puestos claves del país, están listos para jugar un papel de primer orden en el poscastrismo, aseguró un destacado académico cubano.

''Los militares tienen bajo su control importantes sectores de la economía y poder político; cuando hablamos de los militares estamos hablando de Raúl Castro'', afirmó Hernán Yanes Quintero, de 49 años, durante una entrevista con El Nuevo Herald.

Yanes, un reconocido especialista cubano en Ciencias Sociales que desertó la pasada semana en Estados Unidos, señaló que la sucesión prevista tras la muerte de Fidel Castro, asegura al aparato militar un control mucho mayor del que ahora ejerce en las estructuras de poder en la isla.

''No tengo dudas de que los militares estarían más dispuestos a impulsar un modelo económico al estilo chino o vietnamita'', subrayó.

Yanes trabajó en Cuba en el Centro de Estudios sobre América (CEA), un centro de análisis político que fue desmantelado luego de que recibiera fuertes acusaciones de llevar a cabo una política revisionista y reformista a mediados de la década del 90. En el CEA, Yanes trabajó en el análisis de las relaciones civiles-militares en los procesos de transición política.

''Durante más de ocho meses sufrimos todo tipo de vejámenes y presiones, en un proceso político conducido contra los integrantes del Centro, por una Comisión del Buró Político del Partido, encabezada por un miembro del mismo y los jefes de sus Departamentos Ideológico y de Relaciones Internacionales'', apuntó.

Doctorado en Ciencias Políticas en la Universidad de La Habana, Yanes obtuvo un permiso en 1999 para cursar estudios de posgrado en la Universidad Autónoma de México y alcanzó el pasado septiembre un doctorado en la Facultad de Ciencias Políticas de esa Universidad.

Hace una semana cruzó la frontera con Estados Unidos, en compañía de su esposa y su hija menor, aprovechando la estancia de ambas en México.

''Durante estos últimos años regresé un par de veces a Cuba, pero en mi último viaje me convencí de que no podía volver de nuevo al país'', afirmó.

Autor de numerosos estudios sobre la sociedad civil y las organizaciones no gubernamentales de la región, Yanes escribió bajo seudónimo un interesante ensayo titulado ''Fuerzas Armadas y política revolucionaria: el caso de Cuba de 1959 a los años 90'', que apareció publicado junto a otros ensayos en el libro Soldados y Ciudadanos en el Caribe, editado el pasado año en República Dominicana por la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO).

''Desde el principio de la revolución los militares la sociedad cubana ha estado en manos de los militares'', aseguró. ''Cuba ha sufrido en las últimas cuatro décadas la militarización más grande y profunda de todo el hemisferio, y también la más ignorada y desconocida'', subrayó Yanes.

palfonso@herald.com

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