SOCIEDAD
Mala calidad de reparaciones cosméticas disgusta
a residentes de Cabañas
LA HABANA, 2 de diciembre (www.cubanet.org)
- Vecinos del poblado Cabañas, en el municipio
Mariel, provincia Habana, consideran que la mala
calidad de la pintura de las fachadas de los edificios
públicos y casas particulares y del relleno
de baches de la calle principal, efectuados unos
días antes de la celebración de
un acto político, se debe a que las reparaciones
sólo perseguían un fin político,
y no mejorar los problemas de la población.
El 20 de noviembre de 1958 fueron asesinados
22 hombres en Cabañas por agentes represivos
de la dictadura de Fulgencio Batista. Esa es la
razón por la cual se celebra cada año
un acto público en supuesta recordación
de aquellos mártires y que en realidad
ha devenido uno de contenido puramente político
de apoyo al actual gobierno, al único partido
político permitido y a su máximo
líder.
A dichos actos asisten personalidades "de
arriba" y representantes de los medios de
propaganda oficial, escrita y radial y a veces
televisivos. A la presencia de la prensa vinculan
muchos pobladores la realización de los
arreglos cosméticos que las autoridades
locales efectúan días antes de la
fecha, cada año. Los arreglos se realizan
en los sitios visibles para los visitantes en
su marcha hasta el mausoleo dedicado a los mártires,
donde se desarrolla el acto.
Como es habitual, este año también
se rellenaron los baches de la carretera de acceso
al pueblo desde Mariel (cabecera municipal) y
los de la calle central del mismo. La mala calidad
de las "reparaciones" ya es comprobable
en muchas de ellas. El asfalto de relleno se ha
esparcido de nuevo por el paso de los vehículos
y el arrastre de las aguas de lluvia. "Lo
que han hecho es botar los materiales y la mano
de obra", expresó un vecino nombrado
Antonio.
La farmacia y la tienda El 20 de Mayo comparten
el mismo edificio en el centro del pueblo. Para
sorpresa de los cabañenses fue pintada
la parte que corresponde a la farmacia, permaneciendo
mugrienta la que corresponde a la tienda. "El
contraste es ridículo, ahora se nota más
la suciedad de la tienda y ello anula la pintura
de la farmacia", comentó un trabajador
de la tienda.
El edificio de apartamentos enclavado frente
al mausoleo se estaba pintando mientras se efectuaba
el acto. La premura con que se realizaron los
trabajos ha resultado en lo que puede calificarse
como una "chapucería". Inclusive
una de las escaleras quedó sin pintar y
las paredes de los balcones mantienen los viejos
colores: amarillo, verde y distintos tonos de
azul que contrastan con el azul claro con que
pintaron la fachada. cnet/38
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