SOCIEDAD
Se
"destapan" policías infiltrados entre jóvenes
roqueros
LA HABANA, 21 de agosto (www.cubanet.org) - Desde
que comenzó la batida contra la sociedad
civil bajo el pretexto de perseguir el tráfico
de drogas en enero pasado, la policía económica
del Departamento Técnico de Investigaciones
(DTI) y la Seguridad del Estado han puesto en
la calle más de 200 agentes infiltrados
en grupos hippies o frikis, como se les conocen
en La Habana.
La edad de la mayoría de estos agentes
oscila entre los 20 y 25 años. Muchos de
ellos fueron reclutados en el Servicio Militar
Obligatorio (SMO), bajo promesas de prebendas,
rebajas de tiempo de servicio y otros privilegios.
Su misión es la de prevenir el uso de
las drogas entre los que se cree son los mayores
consumidores: los muchachos que oyen música
rock. También deben localizar e informar
a sus superiores de todos aquellos que la venden,
para su futura detención.
El destape de algunos de estos agentes se produjo
el sábado 19 de julio al terminar el concierto
de la banda de rock Zeus. Después de salir
del patio de María, cercano a la Plaza
de la Revolución, los jóvenes fueron
hacia el parque de G, donde tienen la costumbre
de sentarse a conversar una vez terminados los
conciertos.
Aunque es normal ver a esa hora a cientos de
policías y camiones de la Brigada Especial
cargando con todos los travestis, jineteras y
proxenetas, extraño fue ver el ropaje de
los muchachos que empezaron a pedir identificación
a los "roqueros".
Vestían a la usanza friki, con blue jeans
raídos y acampanados, cabezas rapadas y
con pulovers con calcomanías de alguna
banda de rock norteamericana. Muchos quedaron
estupefactos al ver a alguien con quien habían
fumado marihuana y habían hecho amistad,
pedir identificación, y a la vez identificarse
como agentes encubiertos.
Asustados, muchos pensaron en la suerte que correrían
aquéllos que se dedicaban a vender parkisonil
o cigarros, y que eran bien conocidos.
Aunque esa noche no hubo detenidos se les advirtió
que se alejaran de las drogas y de todos aquéllos
que las vendían. También se les
conminó a salir del parque, pues según
alegaron, estaban en un operativo.
La penetración de estos grupos no es algo
fortuito, pues ellos son la imagen de la rebeldía
y la frustración frente a un sistema que
condena todo lo que para ellos tiene valor, como
la música rock, la paz y las grandes estrellas
de rock norteamericano. cnet/32
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