Producción agropecuaria (Final)

Oscar Espinosa Chepe

LA HABANA, Cuba, noviembre (www.cubanet.org) - Los datos aportados por ONE hasta agosto también describen la participación de los distintos sectores de propiedad en la conformación de las producciones logradas en la agricultura no cañera y la ganadería.

Confirman  lo que ha estado presente durante años en la agricultura cubana: que el sector privado agrupado en las Cooperativas de Créditos y Servicios (CCS) y los pequeños agricultores dispersos, a pesar de contar con sólo el 18,3% de la superficie agrícola del país, no contar con recursos, soportar demoras sustanciales en los pagos de los productos entregados a acopio, y estar bajo un fuerte tutelaje estatal que impone muchas prohibiciones y arbitrarias obligaciones, continúa siendo el sector más productivo. 

Los porcentajes que brinda la ONE reflejan que los agricultores individuales, hasta el cierre de agosto, produjeron el 46,6% de las viandas, el 59,3% de las hortalizas, 68,0% del tomate, 87,5% del ajo, 82,0% de la cebolla, 61,8% del pimiento, 55,7% del pepino, y así sucesivamente. Cosecharon el 47,8% del arroz, 88,2% del maíz, frijol 71,8%, el 77,5% del tabaco -prácticamente cerca del 100,0% de las hojas de mayor calidad-, y el 51,2% del cacao.

En lo que respecta a la ganadería, produjeron el 59,0% de la leche. Al mismo tiempo, en sus reducidas extensiones de tierra tienen la mayor existencia del ganado del país, de la siguiente forma: vacuno 53,2%; porcino 52,6%; cunícola 65,5%; ovino 71,5%, y caprino 83,6%.

Si a estos porcentajes se unieran los de las Cooperativas de Producción Agropecuaria (CPA), formadas por la unión de la tierra de los campesinos, pero con un tutelaje estatal superior, y por consecuencia menos eficientes que el de los campesinos, darían una participación todavía mayor en el total de la producción agropecuaria nacional. Debe agregarse que como se indicó anteriormente, en la información entregada por la ONE falta la obtenida en patios y parcelas para el auto consumo, y el destino al mercado de algunas cantidades; estas producciones también son privadas, logradas por la población con sus esfuerzos y recursos. Todo ello debe tenerse en consideración para valorar el peso real de la iniciativa individual en la producción agropecuaria cubana.   

Estos datos reiteran la importancia decisiva de la producción privada en la agricultura y su carácter de factor decisivo en la solución de la alimentación del pueblo cubano. Debe añadirse que, según las estadísticas oficiales, al término de 2008 el sector estatal tenía un 26,4% de sus tierras declaradas ociosas, pero en el sector privado era de sólo un 5,5%. 

Esto indica un aprovechamiento muy superior de la superficie agrícola por parte de los campesinos, unido a una superioridad absoluta en el cuidado de la fertilidad de la tierra.

Finalmente, los resultados de la producción agropecuaria brindados por la ONE hasta agosto pasado, evidencian de nuevo que si se desea resolver los problemas de la agricultura nacional, deberá ampliarse sustancialmente la cantidad de tierras en manos del sector privado, facilitarle mayores recursos, así como garantías y libertad para producir, eliminándose las prohibiciones y cortapisas que hasta el momento tienen.

Producción agropecuaria (I parte)