Un
farfallón con mesa y micrófono
Odelin Alfonso Torna
LA HABANA, diciembre (www.cubanet.org) - Para
el periodista oficialista Lázaro Barredo Medina, revivir
a su personaje el camaján, es como una espina de tenca en
el gaznate. El asunto se torna personal. Sugiere derrames de hiel
sobre Elizardo Sánchez Santa Cruz y la Comisión de
Derechos Humano y Reconciliación Nacional (CDHRN) que preside.
Barredo es un especialista en catarsis mediática. En cuanto
resuenan en sus oídos los arpegios más agudos de la
disidencia interna, no tarda en montar la danza del adulón
enojado.
No por gusto es un moderador por excelencia, un farfallón
con mesa y micrófono en el espacio televisivo Mesa Redonda.
Su fuerte, lo que él denomina “el tema anticubano”.
Tuve la oportunidad de asistir el pasado 11 de diciembre a la muestra
fotográfica en la sede del CDHRN. Fui recibido con el abrazo,
siempre afectuoso, de Guillermo Fariñas, prisionero de conciencia
con licencia extra penal.
Es una lástima que la escasa tele audiencia que sigue de
cerca a los fantoches del programa radio-televisivo, no haya podido
presenciar la verdadera síntesis de lo que Barredo llama
“reclusos contrarrevolucionarios”.
Para el farfallón, reprimir a luchadores pacíficos
en Cuba no está entre las violaciones a los Derechos Humanos.
Hace 49 años que los esbirros castristas suscribieron su
propia declaración, con tinta roja y sobre márgenes
de barrotes.
Si en Cuba se respetan los Derechos Humanos, ¿por qué
entre Ciudad Habana y provincia Habana existen más cárceles
que las que existían en todo el archipiélago cubano
en el año 1958?
Si no se violan los derechos humanos, ¿por qué los
prisioneros de conciencia Oscar Elías Biscet, Normando Hernando
y Nelson Aguiar Ramírez, permanecen en prisión con
un deterioro progresivo de su salud?
En el caso especifico de Nelson Aguiar Ramírez, presidente
del Partido Liberal Ortodoxo, sufre de artrosis degenerativa avanzada,
hernia discal L3, L4 y L4, L5; hipertensión arterial crónica,
insuficiencia venosa profunda, hiperplasia prostática grado
1 y esteatosis hepática.
Es bochornoso hablar de humanismo cuando el gobierno de Cuba, miembro
del nuevo Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, dejó
bajo las aguas del litoral habanero a las 39 victimas del remolcador
13 de Marzo.
Si la moral del gobierno cubano es tan alta y la democracia abre
los caminos de la libertad de expresión, ¿por qué
existen grupos paramilitares (brigadas de respuesta rápida)
asesorados y controlados con pase de lista?
No tiene caso que un farfallón use micrófono y mesa
de formica para hablar sobre derechos humanos. Prefiero que le den
una tonfa, casa en un albergue comunitario y calamares por la libreta.
Quien quita que por escribir estas líneas yo sea un futuro
“recluso contrarrevolucionario”. En todo caso, me otorgo
el derecho. Prefiero ser un camaján libre, antes que tener
una espina de tenca en el gaznate y hablar sandeces por encargo.
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