20 de diciembre de 2007

Duras sanciones contra tres por desorden en un ómnibus

Redacción de El Nuevo Herald


En otra dura sanción contra las indisciplinas sociales que agudizan la crisis del transporte, un tribunal provincial de Ciudad de La Habana condenó a penas entre dos y cinco años de cárcel a tres hombres que provocaron un desorden público en un ómnibus, informó ayer la prensa local.

Según un informe publicado por el diario Granma, Osmel Kindelán, Yoandri Kindelán y Rashid Torres, fueron sancionados a cinco, tres y dos años de prisión, respectivamente, por ``la comisión de los delitos de desorden público, atentado y coacción''.

Los tres jóvenes, cuyas edades no se precisaron, provocaron el pasado 29 de octubre un desorden público dentro de un ómnibus --perteneciente a la terminal de Palatino. El incidente concluyó con una lesión del conductor, forcejeos con un agente policial que los había requerido para que pagaran el pasaje, y amenazas contra el chofer ``blandiendo una botella de cristal''.

Es la tercera sanción que anuncian las autoridades cubanas en casos recientes de indisciplinas en el transporte público.

La pasada semana un tribunal del municipio habanero de San Miguel del Padrón condenó a cuatro años de prisión a un hombre por romper de una pedrada el cristal de una de las puertas de un autobús. El 19 de noviembre otro tribunal municipal de La Habana había sancionado a dos años de prisión a un hombre por un incidente similar.

El reporte de ayer destacó que ''actitudes antisociales'' como la de los tres hombres dañaron hasta la fecha 27 autobuses, entre ellos 16 Mercedes Benz y 11 de la marca Yutong, adquiridos como parte de un programa que se inició en 2004 para superar la crisis que afectó al transporte en los 90.

Datos oficiales indican que este año se han producido más de 200 actos vandálicos contra autobuses públicos, en su mayoría robo de piezas, lanzamiento de objetos y riñas en el interior de los vehículos. El 75 por ciento de estos incidentes se produjo en horario nocturno y son más frecuentes en barrios populosos de la ciudad, como Centro Habana, San Miguel del Padrón y Habana del Este.

El ministro del Transporte, Jorge Luis Sierra, afirmó la semana pasada que el gobierno invierte más de $2,000 millones, un cuarto de ellos en la compra de 3,500 ómnibus a China y Rusia, para aliviar la crítica situación del transporte.

Pero Sierra señaló que ''las inversiones no son exclusivamente las que pueden resolver los problemas'', y llamó a actuar con mano dura ante las indisciplinas que agravan la crisis del transporte.

 

 
 
CubaNet no se responsabiliza por el contenido de las páginas externas