Cuba vuelve a encarar la pregunta de qué pasará después de Chávez

EFE - miércoles, 5 de diciembre, 07

La Habana, 4 dic (EFE).- La derrota del presidente Hugo Chávez en el referendo de reforma constitucional en Venezuela ha devuelto al primer plano de la realidad cubana la pregunta de qué pasará con la isla cuando ya no esté su principal aliado.

Aunque Cuba reaccionó a la derrota del gobernante suramericano con cautela y elogios a su actitud "ética" y "digna" de reconocer la derrota tras difundirse los resultados de la consulta, desde el Gobierno no se ha escondido que la preparación para un escenario post-Chávez está presente en la agenda de la dirección del país.

"Chávez es el presidente y ha sido elegido hasta el año 2013, así es que tenemos tiempo para pensar en todo", indicó el lunes el ministro de Relaciones Exteriores, Felipe Pérez Roque.

La pregunta de qué hacer sin el hombre que gobierna el país que en 1999 apareció en auxilio de Cuba, cuando la isla se debatía en medio de la profunda crisis económica del periodo especial, declarado tras la desaparición del bloque socialista europeo, no es nueva, pero siempre gravitó en torno a la posibilidad de que el gobernante fuera asesinado.

El líder cubano, Fidel Castro, ha advertido reiteradamente sobre el riesgo del magnicidio de Chávez, la última vez en una reflexión publicada la semana pasada en la que señalaba que el Gobierno de EE.UU. había creado las "condiciones propicias para la violencia y los conflictos internos".

Castro ya había dado avisos similares en el pasado, como en febrero de 2005, cuando responsabilizó al presidente de EE.UU., George W. Bush, de un eventual asesinato de Chávez o en agosto de ese mismo año en términos similares.

"La preocupación de que desapareciera o se colapsara el movimiento chavista en algún momento está en la mesa de los cubanos desde hace mucho tiempo", opinó un analista consultado por Efe.

Venezuela es hoy el principal socio comercial de la isla y una importante fuente de divisas, con un intercambio anual en bienes y servicios cifrado en 7.000 millones de dólares por el propio Castro -hasta ahora era público que el intercambio llegó el año pasado a 2.600 millones de dólares-.

Caracas envía a Cuba alrededor de 100.000 barriles diarios -la cifra varía según la fuente entre los 92.000 y los 98.000 barriles-, que La Habana retribuye con servicios médicos, educativos y deportivos.

Pero, más allá de la provisión petrolera, analistas subrayan la importancia que tiene para Cuba la financiación que le brinda Venezuela, principal mercado de servicios cubanos que alcanzan la asistencia en planificación, la colaboración en construcción o la informática.

"Cualquiera que tuviera la dependencia que tiene Cuba de Venezuela ya estaría corriendo en busca de alternativas, pero no de ahora, seguro que hace más tiempo que lo están haciendo", indicó a Efe un observador europeo.

El revés sufrido por Chávez el domingo fija en 2013 la fecha de caducidad de su mandato, al menos por el momento, pero agrega, además, un factor al proceso de cambios estructurales que se propone llevar a cabo el presidente provisional de Cuba, Raúl Castro, de acuerdo con observadores europeos.

Según un analista, eso no debe implicar necesariamente una aceleración de los tiempos para llevar a cabo esas medidas.

"La reforma va, no veo que haya un problema de tiempo automáticamente como consecuencia del referéndum, hay un problema de tiempo anterior (relacionado con las urgencias de introducir determinadas medidas en el país), pero los cubanos lo han ido tomando a su propio aire", apuntó.

El pasado 26 de julio, durante el discurso pronunciado en la fecha más importante para la revolución cubana, Raúl Castro subrayó la necesidad de aumentar la producción y reducir importaciones y manifestó la disponibilidad del país a abrir nuevos espacios a la inversión extranjera.

Independientemente de cómo se puedan ver afectados los tiempos para ejecutar ese tipo de medidas, en opinión del observador europeo, el escenario tras el referendo, da "un argumento para aquellos que están por lograr una verdadera independencia económica, además de la política".