LA HABANA, Cuba. – Mientras la delegación cubana a los XIX Juegos Panamericanos cosecha victorias a cuentagotas para escalar dentro del medallero, en la competencia del decatlón un cubano nacionalizado chileno se alzó con la presea dorada representando a la nación sudamericana, cuya capital es la sede del evento deportivo más importante de la región.
Santiago Ford, de 26 años, alcanzó la ciudadanía chilena el 9 de enero de 2023. Tras cuatro años de esfuerzos, perseverancia y una medalla de plata conseguida en la prueba del decatlón, en el Campeonato Sudamericano de Atletismo de São Paulo, fue admitido en la selección de atletas que competiría por Chile en la cita panamericana. En su palmarés brillaba un acumulado de 7.845 puntos ―mejor marca personal―, logrados en la cita brasileña.
Antes de tocar la gloria bajo otra bandera, Ford había tenido una breve carrera en Cuba, que terminó con una lesión y el olvido por parte de entrenadores y dirigentes deportivos. El deseo de continuar en el deporte y tener mejor calidad de vida lo decidió, en 2018, a emprender la travesía de tantos miles de cubanos. El destino elegido fue Chile, una idea que se había fijado en su mente desde el año 2016, cuando un grupo de entrenadores de ese país fue a la Isla en busca de jóvenes talentos.
Medalla de oro y campeón panamericano: ¡SANTIAGO FORD! 🥇👏 Con la ovación de miles, Santiago ya disfruta de su merecido premio 🫶 pic.twitter.com/aYlT3JQXdU
— Ministerio del Deporte (@MindepChile) November 1, 2023
Por aquel entonces, Ford era el cuarto a nivel mundial en la categoría Sub-20, un buen resultado que, sin embargo, no bastaba para ser fichado. Dos años después se encontró atravesando Guyana, Brasil y Perú. Pasó hambre y sed. Caminó en el desierto siguiendo las líneas del tren hasta arribar a Chile, sin más capital que su feroz determinación, y 20 dólares.
En declaraciones a la prensa, Ford reconoció que, al llegar a la meta en la última prueba del decatlón (1.500 metros), se detuvo. “De repente me acordé de cuando caminaba por el desierto a las 5:00 de la mañana, parado en medio de la nada sin saber qué hacer”.
Aunque la prensa estatal cubana no lo menciona, como ha hecho con otros atletas que han alcanzado grandes resultados compitiendo para otras naciones, Santiago Ford es una gran historia de superación personal y un orgullo cubano, sean cuales sean los colores de la bandera que abraza en cada competición.
