PRENSA INTERNACIONAL
Febrero 14, 2007
 

Guerra a muerte contra las parabólicas en Cuba

Por M. L. de Guereño Corresponsal La Habana. ABC, España, 12 de febrero de 2007.

Cárcel, multas y confiscación de bienes son los castigos para quienes desafíen la prohibición de tener un decodificador y antena satélite en sus casas.

Las autoridades cubanas han declarado la guerra a muerte contra los violadores de las regulaciones sobre la tenencia de las antenas. Según el diario "Granma", cuatro cubanos están pendientes de la decisión del fiscal por haber cometido un delito de "actividades económicas ilícitas".

A la caza de forma cíclica

Las redadas, cíclicas desde hace años, se han recrudecido en las últimas semanas. Se da la circunstancia de que el Gobierno estadounidense decidió emitir a través de "Direct TV" y "Dish programas", destinados originalmente a llegar a la isla por "TV Martí", pero que el régimen consiguió interceptarlos casi totalmente.

Las antenas parabólicas están prohibidas en Cuba -salvo en hoteles y para diplomáticos y técnicos extranjeros-, pero el Gobierno estadounidense las cifra entre 10.000 y 30.000 en toda la isla, y son miles los cubanos que se arriesgan a meter el cable en su hogar.
Para saber quién lo tiene, sólo hay que escuchar conversaciones en la calle. Si alguien dice: "Voy a ver la novela" a las cinco de la tarde, es que tiene antena, porque la novela cubana se emite en la noche.

La TV de Miami

Por algo menos de 9 euros al mes se pueden ver noticieros de la televisión de Miami, programas de chismes, dibujos animados, música, películas, o retransmisiones en directo de ceremonias como los Grammys o los Oscar, pero también programas como la "Mesa Retonta", donde un imitador personifica a Fidel Castro y lo ridiculiza. La programación, eso sí, es a gusto del propietario del equipo, quien suele tratar de contentar a todos los "abonados".

La exclusiva es mucho más cara, cuesta 1.700 euros el primer año: 1.000 por el decodificador, 450 por la tarjeta, activada legalmente en Estados Unidos anualmente, y 250 por la antena, generalmente de fabricación casera. El castigo se aplica a quienes importen, distribuyan o reciban antenas satelitales.

Para el "Granma", el contenido de muchos de esos programas es "culturalmente enajenante, subversivos e injerencistas", además de "desestabilizador" y forma parte "del Plan de la Administración de (George) Bush dirigido a destruir la Revolución cubana".

Así lo aseguraba en la nota "Caso Antena y otras ilegalidades" en la que informaba de una redada realizada el 25 de marzo del 2006 en el taller de Lázaro Rueda, trabajador por cuenta propia con licencia para arreglar pinchazos. Él, José Antonio, quien aportó los conocimientos técnicos y los materiales, y Celestino, fabricaban antenas parabólicas. Se les incautó material como para confeccionar 30 aparatos.

Tres años de prisión

Podrían ser condenados de uno a tres años de prisión, o a pagar una multa de hasta 30.000 pesos cubanos (1.100 euros), pagaderas en mensualidades, o a ambas penas, además de la confiscación de bienes.

Esa sanción económica es astronómica si se compara con el salario medio nacional, que está en unos 250 pesos. Sería relativamente asumible si los ingresos fueran en dólares.

IMPRIMIR



PRENSAS
Independiente
Internacional
Gubernamental
IDIOMAS
Inglés
Francés
Español
SOCIEDAD CIVIL
Cooperativas Agrícolas
Movimiento Sindical
Bibliotecas
DEL LECTOR
Cartas
Opinión
BUSQUEDAS
Archivos
Documentos
Enlaces
CULTURA
Artes Plásticas
El Niño del Pífano
Octavillas sobre La Habana
Fotos de Cuba
CUBANET
Semanario
Quiénes Somos
Informe Anual
Correo Eléctronico

DONACIONES

In Association with Amazon.com
Busque:


CUBANET
145 Madeira Ave, Suite 207
Coral Gables, FL 33134
(305) 774-1887

CONTACTOS
Periodistas
Editores
Webmaster