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Disidencia
de Cuba frustrada tras visita del canciller español
Moratinos
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LA HABANA, 4 (AFP) - La mayoría de la
disidencia en Cuba se manifestó indignada
y frustrada por la visita del canciller español
Miguel Angel Moratinos que la ignoró y
tampoco incluyó el tema de los presos políticos
en su agenda, lo que dividió este miércoles
su asistencia en torno a una reunión con
diplomáticos españoles.
"El gobierno español ha traicionado
a nuestros prisioneros, a todas las personas reprimidas
desde marzo de 2003" y "si Moratinos
habla ante la Unión Europea (UE), lo hará
en nombre del gobierno de Cuba, y no en nombre
del pueblo cubano", declaró a la AFP
Miriam Leiva, activista de Damas de Blanco, esposas
y madres de presos políticos cubanos.
"Considero que (el gobierno español)
debe darnos una excusa por esta humillación
y estos acuerdos (firmados en materia de derechos
humanos) con un gobierno que desconoce absolutamente
los derechos humanos", apuntó Leiva,
quien anunció que las Damas de Blanco,
Premio Sajarov 2005, no asistirán a la
reunión convocada en la embajada de España.
Tampoco acudirán al encuentro la economista
radical Martha Beatriz Roque, de la Asamblea para
la Promoción de la Sociedad Civil y consideró
"totalmente negativo" el balance que
dejó la visita, así como el dirigente
de "Todos Unidos", Vladimiro Roca, el
cual la calificó como una "falta de
respeto hacia el pueblo cubano".
"Consideramos que la actuación del
gobierno y de la embajada de España en
este caso se han adaptado a las condiciones de
exclusión que el régimen cubano
impone respecto a la disidencia", denunció
por su parte el opositor Oswaldo Payá,
Premio Sajarov 2002, a nombre del Movimiento Cristiano
Liberación.
El economista Oscar Espinosa Chepe, uno de los
75 opositores condenados en 2003 y excarcelado
un año después por razones de salud,
declaró que "si algo ha tenido de
positivo" la visita del canciller de España
"es que ha logrado casi la unanimidad de
la disidencia" en el rechazo a la postura
española.
Como resultado de la visita de Moratinos, Cuba
y España relanzaron sus relaciones económicas
y políticas, incluido un mecanismo de diálogo
en derechos humanos que también motivó
la negativa de varios representantes de la oposición
en la isla.
Ese mecanismo "es un acuerdo que no tiene
credibilidad alguna", porque "si Cuba
no reconoce las violaciones de derechos humanos,
entonces, de qué van a hablar. Es una burla",
dijo Leiva.
Roque destacó que con esa fórmula
no se impedirá que "el gobierno cubano
siga llamando mercenarios" a los opositores
o cese "el hostigamiento" contra ellos.
En contraste, el opositor y ex comandante castrista
Eloy Gutiérrez Menoyo, consideró
"positiva" la visita de Moratinos y
el acercamiento que se produjo entre los dos países,
porque "por la vía de la confrontación
no se resuelve absolutamente nada" con el
gobierno cubano.
"No me ilusionó (...), en Cuba hay
una dictadura que tiene un criterio muy pobre
sobre derechos humanos y democratización,
pero siempre por la política de una buena
vecindad con Cuba se puede lograr algo",
añadió Gutiérrez Menoyo,
quien fue excarcelado en 1986 por gestiones del
entonces presidente socialista español,
Felipe González.
Al confirmar su asistencia a la reunión
en la embajada de España, el opositor moderado
Manuel Cuesta Morúa se mostró esperanzado
con los resultados de la visita de Moratinos y
con el mecanismo de diálogo que realizará
su primera reunión en La Habana a finales
de mayo.
"Espero que este mecanismo abra por primera
vez una posibilidad de discusión amplia
del tema (derechos humanos) y se obtengan resultados
concretos para Cuba, porque ha sido un tema eludido
por las autoridades cubanas y tabú para
la sociedad".
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