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NOTICIAS
DE CUBA
El
Nuevo Herald
Castro retiene a 533 cubanos con visa para
EEUU
Wilfredo Cancio, El Nuevo Herald.
13 de marzo de 2006.
El gobierno de Fidel Castro mantiene retenidos
a 533 ciudadanos cubanos -mas de 100 de ellos
profesionales de la salud- que tienen visa para
emigrar a Estados Unidos, pero no reciben el permiso
necesario para abandonar el país.
Según datos de la Oficina de Intereses
de EEUU en La Habana, 303 cubanos con visados
de inmigrantes tienen denegado o retrasado el
permiso de salida (tarjeta blanca), requisito
obligatorio en Cuba para poder viajar al extranjero
con carácter temporal o definitivo.
La restricción afecta también a
otras 230 personas que han sido reclamadas por
familiares residentes en territorio estadounidense,
pero se les retiene la salida, en la mayoría
de los casos como represalia del régimen
por tratarse de deserciones de altos funcionarios
o militares.
Algunos superan ya los diez años de espera
por la autorización para emigrar, como
la familia del ex oficial de la inteligencia cubana
José Cohen, quien escapó de la isla
en 1994 y recibió refugio político
en EEUU.
''No es un descubrimiento que en Cuba prevalece
un régimen represivo entre cuyas múltiples
violaciones de derechos humanos está la
retención de personas que desean emigrar
legalmente'', declaró un funcionario del
Departamento de Estado a El Nuevo Herald.
El funcionario consideró lamentable que
algunas personas con visas estadounidenses tengan
que lanzarse al mar.
Cuba insiste en que las salidas ilegales y los
trágicos naufragios en alta mar son resultado
de la Ley de Ajuste Cubano (CAA), que al año
otorga residencia a quienes logren pisar suelo
de EEUU.
El pasado 3 de marzo, el presidente del Parlamento
cubano, Ricardo Alarcón, declaró
a la prensa internacional en La Habana que ninguna
persona que se lanza al Estrecho de la Florida
poniendo a riesgo su vida, lo hace porque no se
le permite salir.
''Dígame un nombre de un cubano que se
haya arriesgado a la muerte; que teniendo la visa
se haya lanzado al mar porque Cuba no lo dejaba
salir. Todavía estoy esperando la respuesta'',
dijo Alarcón.
Sin embargo, varios casos recientes lo desmienten:
o Los dentistas Marialys Darias Mesa y David
Gonzalez Mejías se encuentran retenidos
en Bahamas hace 10 meses, luego de intentar llegar
por vía marítima a las costas de
la Florida el pasado abril. Ambos tienen visas
estadounidenses desde el 2002 y habían
enviado antes a sus familiares a EEUU en espera
de que las autoridades cubanas los liberara de
su responsabilidad laboral en el 2005. Tras una
espera de tres años, el gobierno les dijo
que seguían siendo ''imprescindibles''
y que la liberación podía aguardar
hasta diez años.
o En junio del 2005, Rafael Díaz Rey,
su esposa, la doctora Nivia Valdés Gálvez,
y los hijos del matrimonio, Pablo, de 15 años,
y David, de 10, protagonizaron una histórica
fuga desde la costa norte de La Habana a bordo
de un automóvil Mercury de 1948, adaptado
para la navegación. Los cuatro miembros
de la familia tenían visas, pero Cuba no
le otorgaba el permiso a Valdés por ser
médico.
o En junio del 2004, tras diez fallidos intentos
de escapar de Cuba, el ex entrenador de la selección
nacional de béisbol, Orlando Chinea, llegó
en una lancha a Miami. La familia Chinea obtuvo
visa de refugiados en septiembre de 1998, pero
el gobierno cubano impedía la salida de
Chinea por un supuesto intento de deserción
con jóvenes peloteros. Su esposa e hijo
se hallaban en EEUU desde el 2000.
o En agosto del 2002, el cadáver del dentista
Manuel Cabrera, de 55 años, fue encontrado
flotando a 26 millas de Cabo Cañaveral,
Florida. Desesperado porque las autoridades cubanas
no le daban el permiso para emigrar y reunirse
con su esposa en Miami, Cabrera se enroló
en una operación de contrabando humano
que naufragó con 25 personas a bordo.
La pasada semana, el informe del Departamento
de Estado sobre la situación de derechos
humanos en Cuba se refirió a las restricciones
impuestas por las autoridades castristas a las
personas que desean radicarse o viajar al exterior,
no sólo a EEUU.
''Aunque el gobierno permite la salida a quienes
clasifican como inmigrante o tienen estatus de
refugiado en otros países, a miles de ciudadanos
que recibieron documentos para viajar al extranjero
se les negó el permiso de salida en el
2005'', señaló el informe.
El documento añade que la mayoría
de los afectados son doctores, enfermeras y otros
profesionales de la salud, así como jóvenes
en edad militar e individuos con posiciones de
disidencia política. Al menos seis opositores
del llamado Grupo de los 75, excarcelados por
razones de salud, tienen visa como refugiados
en EEUU, pero aguardan por el permiso de salida.
El informe mencionó la situación
de las llamadas Damas de Blanco, movimiento integrado
por esposas, madres e hijas de prisioneros políticos,
a quienes el gobierno cubano les impidió
viajar para recibir el Premio Sájarov de
Derechos Humanos 2005.
Un hijo de Castro en el Clásico Mundial
de Béisbol
Kevin Baxter / The Miami Herald,
San Juan. 13 de marzo de 2006.
El muchacho quería ser pelotero. Y había
demostrado cierta vocación. Jugaba la tercera
base de su escuadra universitaria, mientras buscaba
una oportunidad para entrar en el poderoso equipo
nacional cubano.
''A nivel universitario era un jugador decente'',
dijo Fernando Arango, coordinador de talentos
de los Cerveceros de Milwaukee. ''No era malo''.
Pero el padre del chico quería que fuera
médico. Y cuando el padre es Fidel Castro,
es muy difícil que alguien pueda hacer
algo distinto a lo que él quiere. Sobre
todo cuando las dos opciones que brinda son entrar
en la Facultad de Medicina o en el ejército
para ir a pelear en la guerra de Angola.
''El béisbol'', dijo Arango con una sonrisa,
''no era una opción''. De modo que Antonio
Castro Soto del Valle se convirtió en cirujano
ortópedico, y terminó de todas formas
integrando la escuadra nacional, como el médico
del equipo.
''Me siento muy satisfecho de lo que he logrado'',
dijo ayer Antonio, caminando por el túnel
que lleva a los vestidores del equipo minutos
antes del partido de Cuba en la segunda ronda
del Clásico Mundial de Béisbol.
"No importa cuál sea la profesión
de uno: ser el médico, o simplemente trabajar
con el equipo nacional de tu país, por
un deporte que significa tanto, es motivo de orgullo''.
Antonio, de 37 años, es uno de los cinco
hijos del gobernante cubano y Dalia Soto del Valle,
ex maestra y su esposa durante más de 30
años. Sin embargo, debido a que Castro
ha insistido en que su familia se mantenga fuera
de la vista pública, Antonio --o Tony para
los jugadores-- es el único de los cinco
con un empleo visible al público.
Antonio, que es médico del Hospital Ortopédico
de La Habana, forma parte del equipo nacional
desde hace seis años y ha trabajado en
eventos deportivos como los Juegos Panamericanos
del 2003 y las Olimpíadas de Atenas del
2004, así como con el equipo de béisbol.
Aunque los cubanos no le dan publicidad a su
presencia, tampoco lo ocultan.
Vestido con los mismos pantalones de caqui y
el pulóver rojo de los otros médicos
del equipo, Antonio se destaca: su sentido del
humor y su sonrisa frecuente contrasta notablemente
con la seriedad del resto de la delegación
cubana de 65 miembros.
En San Juan, Antonio ha firmado autógrafos
--lo que lo convierte quizás en el único
médico deportivo al que se le haya pedido
una firma-- y ha bromeado con fanáticos
antes de los encuentros. Ayer, en muchas ocasiones
fue el primer hombre del banco cubano en felicitar
a los jugadores cuando salían del terreno,
abrazando al lanzador Yadel Martí cuando
salió del juego en la quinta entrada, y
saludando efusivamente al torpedero y capitán
del equipo Eduardo Paret, cuando anotó
una carrera en el sexto capítulo.
El entusiasmo, explicó Castro, no era
sólo por el equipo, sino también
por su país, que es la misma forma en que
enfoca su trabajo.
''Soy un hijo de Cuba, un producto de nuestro
sistema. Un producto formado por la revolución
y por el país'', expresó. "Y
este equipo forma parte de nuestro país,
de nuestra revolución.
"Para el pueblo cubano las dos cosas van
juntas, no hay nada personal''.
Prohíben carteles
en estadio de San Juan tras incidente con Cuba
Associated Press, San Juan. 12
de marzo de 2006.
Luego de que la delegación cubana llegó
a considerar la posibilidad de retirarse del Clásico
Mundial de Béisbol debido al incidente
en que un aficionado desplegó una pancarta
que leía ''Abajo Fidel'' durante el partido
del jueves contra Holanda, las autoridades de
Puerto Rico decidieron prohibir la entrada de
letreros al estadio.
La imagen del hombre con el letrero detrás
del home fue contemplada el jueves en vivo por
millones de telespectadores, incluyendo los de
Cuba. El principal funcionario de la delegación
cubana en el juego celebrado en el estadio Hiram
Bithorn Stadium, en San Juan, trató de
confrontar al fanático. La policía
de Puerto Rico intervino de inmediato y se llevó
al funcionario cubano --Angel Iglesias, vicepresidente
del Instituto de Deportes de Cuba-- a una estación
de policía cercana donde se le habló
de la libertad de expresión.
''Le explicamos que aquí existía
el derecho constitucional a la libre expresión,
y que eso no era ningún delito'', dijo
el coronel de la policía Adalberto Mercado
al diario de San Juan El Nuevo Día.
Una página web anticastrista, therealcuba.com,
identificó al fanático del letrero
únicamente como Enrique, y ofreció
su propia versión de lo ocurrido.
Enrique dijo que durante las prácticas,
antes del juego, había sacado un primer
letrero denunciando al régimen de Castro
--éste decía 'Peloteros sí,
tiranos no''-- y que lo vio el hijo del gobernante
cubano, Tony Castro, que está en San Juan
como el médico del equipo cubano. "Miró
hacia abajo y siguió caminando, y entonces
le grité 'Eso es para tu padre'. Estoy
seguro que me escuchó'', dijo Enrique,
según el relato aparecido en la página
web.
La Federación Cubana de Béisbol,
en una declaración que dio a conocer después
del incidente, dijo que las autoridades no brindaron
la seguridad necesaria ni mantuvieron el espíritu
del evento deportivo, y "evidentemente no
tenían ninguna intención de hacerlo''.
Los cubanos consideraron retirarse del campeonato
pero decidieron permanecer después que
los promotores puertorriqueños les aseguraron
que no volverían a suceder incidentes de
este tipo, dijo la federación cubana en
una declaración que dio a conocer, sin
brindar más detalles.
Cuba chocó anoche con Puerto Rico luego
de que los organizadores anunciaron que habían
prohibido la entrada de letreros al estadio.
Minutos antes del partido, los efectivos de seguridad
del parque confiscaron todo tipo de pancarta.
Entre las inscripciones que la AP pudo leer de
los letreros confiscados, una tenía el
mensaje ''Cuba te apoyamos los 364 días...'',
y otra decía ''PR Campeón'', con
un dibujo de un bateador conectando una pelota
con el rostro de Castro.
''Queremos el Clásico pero también
exigimos se cumplan las normas y espíritu
por el que fue convocado'', indicó la Federación.
A pesar de la prohibición y las confiscaciones
de letreros, dos aficionados lograron desplegar
dentro del estadio un cartel que rezaba ''Libertad
para Cuba'' poco antes del primer lanzamiento.
La molestia cubana llegó hasta las costas
de La Habana, donde un grupo de deportistas realizó
ayer una protesta frente a la Oficina de Intereses
de los Estados Unidos.
La ex campeona mundial de atletismo Ana Fidelia
Quirot, el boxeador Odlanier Solís y cuatro
equipos locales de pelota encabezaron la protesta.
Olga Lidia Castillo, madre de Yulieski Gourriel,
segunda base del equipo de Cuba en el Clásico,
aseguró que su hijo y los peloteros cubanos
''con la misma fuerza que salen sus batazos sabrán
defender a nuestra Revolución'' y que "la
patria espera de ustedes la honra y la victoria''.
El periódico oficial Granma calificó
el incidente de la pancarta como un ''acto de
protesta'' y afirmó que las ''provocaciones
contrarrevolucionarias'' tuvieron "el apoyo
de autoridades federales de los Estados Unidos
y las autoridades estatales y policiales de Puerto
Rico, país ocupado por el imperialismo''.
El portavoz de Grandes Ligas, John Blundell,
dijo que a raíz del incidente, el equipo
cubano no se presentó a la conferencia
de prensa del jueves, después de su triunfo
por 11-2 sobre Holanda que los clasificó
a la segunda ronda.
Señaló que los organizadores le
garantizaron a los cubanos que harán todo
lo posible para evitar actos similares en los
próximos desafíos.
''Los cubanos estaban molestos con el incidente
del jueves, y quieren asegurarse de que no ocurra
de nuevo'', comentó Blundell.
''Estamos haciendo todo lo posible por garantizar
la seguridad de los aficionados y las delegaciones'',
agregó.
Crece el comercio entre la Unión Europea
y Cuba
EFE, La Habana, 11 de marzo de
2006.
La balanza comercial entre la Unión Europea
y Cuba creció significativamente en 2005,
tras un incremento del 31 por ciento en las exportaciones
comunitarias a la isla y un aumento del 28 en
las importaciones, según datos oficiales.
Las exportaciones europeas a Cuba se situaron
el pasado año en 1,272 millones de euros
(unos $1,590 millones), arrastradas por las ventas
de equipamiento eléctrico e instrumental
óptico, de acuerdo con un informe de la
Oficina de la Comisión Europea en La Habana
divulgado ayer.
Cuba destinó más de 440 millones
de euros ($550 millones) a la compra de reactores
y maquinaria eléctrica a empresas europeas,
fundamentalmente equipos electrógenos a
grupos alemanes y españoles para paliar
la crisis energética que sufre el país.
Además, invirtió cerca de 140 millones
de euros ($175 millones) en la compra de instrumental
óptico a compañías europeas,
principalmente alemanas, destinadas a la llamada
''Operación Milagro'' puesta en marcha
con Venezuela para atender a pacientes latinoamericanos
de escasos recursos con problemas en la vista.
Las importaciones cubanas de los países
de la Unión Europea se acercaron a los
371 millones de euros (unos $463 millones).
España fue el principal exportador a la
isla.
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