NOTICIAS
DE CUBA El
Nuevo Herald
La Habana se recupera tras el paso de Wilma
EFE, La Habana, 26 de octubre
de 2005.
La Habana trata de superar progresivamente la
normalidad tras el paso de ''Wilma'', aunque decenas
de miles de personas continúan evacuadas,
miles de viviendas permanecen inundadas y gran
parte de la ciudad sigue sin servicios básicos
como agua, luz y teléfono.
La retirada de las aguas ha dejado al descubierto
un paisaje desolador en las zonas más próximas
al mar, donde al menos 2,000 viviendas quedaron
afectadas, según datos oficiales. El mar
de lodo que penetró cientos de metros en
tierra arrastró piedras, palmeras, vehículos
y hasta contenedores, y los lanzó contra
los edificios más próximos a la
costa
Miles de personas salieron ayer a las calles
para ayudar en las tareas de recuperación,
orientadas por el Ejército y la Defensa
Civil, que han empezado a repartir comida y agua
entre los afectados. La policía vigila
también las áreas próximas
a las tiendas que venden productos en divisas
para evitar saqueos, como en Miramar o el Malecón.
El agua todavía inunda algunas de las
principales avenidas de la ciudad, pero ha bajado
el nivel y ha permitido el regreso de miles de
personas a sus viviendas, aunque aún hay
amplias zonas sin luz y con los depósitos
de agua infectados por el lodo.
''Esto ha sido horrible y ahora sin luz no se
puede vivir en esta casa, yo tendré que
volver con mi hermana, porque no puedo hacer más'',
se quejaba una vecina de Miramar que regresó
a su vivienda para sacar el agua y proteger sus
muebles.
Como ella, cientos de personas se afanaban en
limpiar sus casas del lodo y la porquería
que arrastraron las aguas.
''Hasta una esponja de mar me encontré
limpiando la sala'', relataba un vecino del barrio
que vive a cientos de metros de la costa.
En las calles próximas al Malecón,
muchos esperan todavía a que baje mas el
nivel del agua para poder entrar en sus viviendas.
''Los portales se inundaron y la gente no ha
podido salir de los edificios hasta hoy'', comentaba
Helen, una vecina de la Avenida Paseo, una de
las mas emblemáticas de la ciudad, todavía
inundada por las aguas.
Desde Paseo es imposible acceder al Malecón,
que sigue inundado en algunos tramos, aunque es
un buen lugar para ver muchos de los destrozos
causados por el azote de las olas en el muro de
la más popular avenida de La Habana.
Cuba vaticina que llegarán turistas
que hubieran ido a Cancún
Anne-Marie Garcia, Associated
Press. 26 de octubre de 2005.
LA HABANA - Los turistas que tenían previsto
viajar a la península de Yucatán
en México cambiarán su destino a
Cuba tras los daños ocasionados por el
huracán Wilma en esa zona, en particular
en Cancún, vaticinó el ministro
cubano de turismo, Manuel Marrero.
"Hemos estando recibiendo solicitud de touroperadores
para incrementar sus cupos hacia Cuba y desviar
algunas operaciones", dijo Marrero en rueda
de prensa el miércoles.
El ministro no dio una cifra exacta pero vaticinó
que la temporada alta de turismo en Cuba se adelantará
de diciembre a noviembre.
Dijo que "existe una demanda" que estimó
en "cientos de habitaciones" y precisó
que "de no existir disponibilidad en otras
regiones, Cuba estará en disposición
de satisfacer las solicitudes".
Sin embargo el funcionario se solidarizó
con "nuestros colegas mexicanos" y agregó
que "el pueblo y el gobierno lamentan lo
sucedido en esa región mexicana".
Hizo votos por una rápida recuperación
porque según explicó "que el
turismo mexicano vuelva a la normalidad es importante
para el desenvolvimiento del turismo en nuestra
gran región del Caribe".
Marrero señaló que el huracán
Wilma, que azotó la costa norte de la isla
el domingo y lunes últimos, ocasionó
daños "mínimos" en el
sector del turismo. "Se están cuantificando
los daños pero no pensamos que la cifra
sea tan alta", precisó.
En La Habana hay tres hoteles cerrados por los
daños ocasionados por Wilma y dos instalaciones
hoteleras en la provincia occidental de Pinar
del Río que requieren de reparaciones por
unas tres semanas, según calculó.
El funcionario agregó que en el resto
del país todo el sector del turismo funciona
con normalidad, en particular en Varadero, el
balneario más famoso situado a 120 kilómetros
de la capital.
Marrero indicó de los 35.000 turistas
extranjeros que se encontraban en la isla el domingo
fueron evacuados un total de 1.749, y que no murió
ninguno a causa del ciclón. Tres turistas
_un alemán, un holandés y un italiano_
fallecieron el domingo tras un accidente de tránsito
que "no tuvo nada que ver con el huracán".
En el 2004, Cuba alcanzó la meta de los
2 millones de visitantes, y en el presente año
se espera alcanzar la cifra de 2,3 millones de
viajeros según estimó el funcionario.
El turismo, el rubro más eficiente en
las finanzas isleñas, creció durante
12 años consecutivos un 28% anual.
Católico laico cubano aboga sin cesar
por la libertad en la isla
Associated Press, Pinar Del Rio,
26 de octubre de 2005.
Es uno de los 30 miembros del Pontificio Consejo
Justicia y Paz del Vaticano; sin embargo, en Cuba
trabaja ocho horas diarias para el estado en un
almacén cuidando los tallos de palma con
los que se fabrican las cajas de puros.
Se puede pensar que Dagoberto Valdés no
pudo alcanzar su potencial. Pero este católico
laico, que se convirtió en una voz alternativa
del medio ecléctico que lucha por impulsar
cambios en Cuba, explica que los castigos, incluido
éste último trabajo, contribuyeron
a su emancipación.
''Hay gente que tiene todo el poder del mundo
y es infeliz'', dijo Valdés, hablando en
la diócesis de Pinar del Río en
el occidente de la isla. "Cambio todo eso
por la satisfacción interior de saber que
he podido caminar como una persona libre y responsable.
Esto no tiene precio.''
Valdés es un hombre de fe y un optimista
innato. Su espiritualidad le ayuda a superar los
desafíos diarios para impulsar las libertades
cívicas y económicas en el sistema
rígido que impera en el país desde
hace más de cuarenta años.
Por la noche escribe y edita, en la revista independiente
Vitral, artículos polémicos sobre
diversos temas de la actualidad en Cuba. Durante
el día trabaja para el estado.
''Es lo que llamo la catedral de las yaguas'',
comentó este hombre con gafas, que sonríe
cuando describe las hileras de los tallos de palma.
"Mientras transcurre el día, simplemente
medito y rezo.''
Devoto del catolicismo y la libertad de expresión,
Valdés es un crítico consecuente
del gobierno de Fidel Castro.
Está un poco marginado, no sólo
porque reside en el extremo occidental de Cuba
--la actividad política y la atención
de la prensa internacional se concentran en La
Habana--, sino tal vez también por su fervor
religioso.
Pero su profunda conexión con la Iglesia
católica le da credibilidad. Resulta difícil
aceptar la idea de que es ''un mercenario'' al
servicio de Estados Unidos, la acusación
que se hace aquí a los opositores al gobierno.
A diferencia de disidentes internacionalmente
conocidos como Martha Beatriz Roque u Oswaldo
Paya, Valdés no tiene un programa político
concreto. Sin embargo, a través de su revista
y del Centro de Formacion Cívica y Religiosa,
una organización no gubernamental que fundó
en Pinar del Río, encontró una vía
para expresarse y alentar a otros cubanos a hacerlo.
Valdés habla utilizando metáforas.
Para él, Cuba comunista es una cabaña
de troncos. Las puertas y las ventanas fueron
selladas, y sólo algunos rayos de luz pasan
por las grietas de la cabaña.
''Los que están adentro no tienen luz,
pero sabemos ya que afuera, hay luz'' dijo Valdés.
"El problema no está en que la luz
no existe, el problema está en que la cabaña
está cerrada.''
Desde el triunfo de la Revolución socialista
de Castro en 1959, miles de cubanos abandonaron
la cabaña, dejando atrás sus hogares
y sus familiares, buscando la luz, según
dijo Valdés.
''Eso ha sido la gran tragedia del pueblo cubano
en estos 46 años'' expresó. "Confundir
la solución. Quien tiene que irse es quien
cierra la casa, no los habitantes de la casa.''
El mar entra en La Habana y obliga a miles
de evacuaciones
Pablo Alfonso, El Nuevo Herald.
25 de octubre de 2005.
Severas penetraciones del mar en Ciudad de La
Habana y municipios aledaños de la costa
norte de Cuba, que obligaron a la evacuación
de miles de personas, se produjeron ayer cuando
el huracán Wilma empujaba olas gigantescas
a su paso por las inmediaciones de la isla, en
su trayectoria hacia la Florida.
''El zarpazo del mar ha cambiado dramáticamente
la imagen de La Habana. El Malecón soporta
olas de varios metros y las avenidas próximas
se han convertido en ríos gigantescos.
El agua ha penetrado más de un kilómetro
en algunas zonas y el nivel ha subido hasta metro
y medio'', afirmó un despacho de Mar Marín
de la agencia española de noticias EFE.
Informes obtenidos por El Nuevo Herald, que fueron
confirmados telefónicamente por una residente
de El Vedado, reportaron el saqueo de varios comercios
ubicados en las calles Línea y San Lázaro,
respectivamente.
''En Línea, una tienda que tiene cristales
panorámicos, fue saqueada por algunas personas
que se robaron bicicletas y electrodomésticos'',
indicó la fuente.
En las primeras horas de la madrugada de ayer
el agua alcanzaba la intersección de las
calles Paseo y Calzada, en el Vedado, y según
reportes de la prensa local "ya amenazaba
rebasar ese punto y llegar a la calle Línea''.
''Se trata de una penetración del mar
fuerte y debe afectar a los cinco municipios costeros
de la ciudad: Plaza de la Revolución, La
Habana Vieja, Centro Habana, La Habana del Este
y Playa'', declaró José Rubiera,
jefe del Centro de Pronósticos del Instituto
de Meteorolgía, quien agregó que
las inundaciones pudieran mantenerse hasta hoy.
Poco después del mediodía de ayer
se informaba que unidades anfibias de las Fuerzas
Armadas estaban participando en la evacuación
de personas atrapadas por las inundaciones, que
a esa hora eran particularmente severas en calles
como Paseo, Avenida de los Presidentes, Línea,
San Lázaro, Prado o Quinta Avenida.
La furia del mar provocó fracturas en
varios puntos del Muro del Malecón.
En Ciudad de La Habana se habían evacuado
19,219 personas, hasta las 3:00 P.M. del domingo,
según informó Carlos Amador, vicepresidente
del Consejo de la Administración Provincial.
El principal peligro que enfrentan ahora los residentes
de la capital es el derrumbe de edificios y viviendas
que se encuentran en pésimo estado.
La mayor parte de la capital se encuentra sin
electricidad, aunque las autoridades han asegurado
que "gracias a la instalación de los
grupos electrógenos se puede garantizar
la producción del pan''.
Según Jesús Enríquez Hernández,
director del Hotel Riviera, dijo que los 169 turistas
alojados en esa instalación, fueron trasladados
al hotel Habana Libre, en previsión de
las penetraciones del mar.
El Hotel Meliá Cohiba, frente al Malecón,
quedó incomunicado por la subida del nivel
del agua..
En la provincia de Pinar del Río, en el
extremo occidental de la isla, Wilma produjo rachas
de vientos sobre los 100 kilómetros por
hora, interrupciones del servicio eléctrico
e intensas lluvias en toda la región, además
de penetraciones del mar en ambas costa de la
región.
''En Mantua habían caído 602 milímetros
[de lluvia], en Guane 380 y en Minas de Matahambre,
323'', informó el diario Granma.
Desde Pinar del Río ''fueron llevados
hacia hoteles de Ciudad de La Habana, 147 turistas
extranjeros; mientras los 889 estudiantes de otras
naciones que cursan la enseñanza universitaria
aquí tuvieron todas las garantías
de seguridad y alimentación'', informó
el semanario Trabajadores, citando fuentes de
la Defensa Civil que hablan de 261,000 personas
evacuadas a lugares seguros.
''Minas de Matahambre fue el municipio más
afectado por Wilma en la provincia de Pinar del
Río. Las rachas de viento más significativas
se registraron en Santa Lucía, poblado
del propio municipio: 120 kilómetros por
hora'', informó Trabajadores.
Solicitan asilo en Canadá
más de 20 coristas cubanos
EFE, Toronto, 25 de octubre de
2005.
Al menos dos decenas de miembros del Coro Nacional
de Cuba, que se encontraba desde el 18 de octubre
de gira en Canadá, han abandonado el grupo
y han pedido asilo a las autoridades de este país.
El barítono cubano Ernesto Hermes Cendoya
Sotomayor declaró a la agencia EFE que
en las últimas horas ''más de 20''
integrantes del coro han solicitado asilo en Canadá
y que varios han decidido viajar hasta Estados
Unidos para refugiarse en ese país.
Ismael Zambra, presidente de la Fundación
Cubana Canadiense, que está ayudando a
varios de los cantantes que han decidido quedarse
en Canadá, indicó que la gira del
coro ha tenido que ser suspendida ante la falta
de las voces necesarias para realizar sus actuaciones.
Ayer estaba previsto que el grupo viajara a Vancouver
para actuar en la costa oeste canadiense.
Cendoya añadió que los integrantes
del coro, formado por unos 40 cantantes, empezaron
a discutir la posibilidad de quedarse en Canadá
en cuanto llegaron a este país, el 18 de
octubre, y que la gira tendría que haber
terminado el próximo 5 de noviembre.
Según el barítono, tan pronto como
el grupo empezó sus actuaciones los jefes
del coro les retuvieron sus dietas así
como sus porcentajes de las recaudaciones para
"intentar hacer más difícil
que nos escapáramos''.
''Pensamos que éste era el mejor momento
para quedarnos porque no sabíamos cuáles
eran las intenciones de nuestros superiores una
vez que llegáramos a Vancouver'', explicó
Cendoya, quien amplió estar en contacto
con siete integrantes del coro.
En un recuento hecho ayer en la mañana,
Cendoya cifró en ''más de 20'' los
cantantes que han abandonado el coro, aunque aclaró
que "la mayoría "quería
quedarse''.
La última vez que se produjo una deserción
masiva de cubanos en Canadá fue en junio
del 2002, con motivo de la celebración
en Toronto de la Jornada Mundial de la Juventud,
un evento organizado por El Vaticano y al que
asistió el papa Juan Pablo II.
Entonces, 23 jóvenes miembros de la delegación
cubana decidieron no regresar a la isla caribeña
y prefirieron solicitar asilo a Canadá.
Severas inundaciones en La Habana
Pablo Alfonso, El Nuevo Herald.
24 de octubre de 2005.
Severas penetraciones del mar en Ciudad de La
Habana y municipios aledaños de la costa
norte de Cuba, que obligado a la evacuación
de miles de personas, se produjeron el lunes cuando
el huracán Wilma empujaba olas gigantescas
a su paso por las inmediaciones de la isla, en
su trayectoria hacia la Florida.
''El zarpazo del mar ha cambiado dramáticamente
la imagen de La Habana. El Malecón soporta
olas de varios metros y las avenidas próximas
se han convertido en ríos gigantescos.
El agua ha penetrado más de un kilómetro
en algunas zonas y el nivel ha subido hasta metro
y medio'', afirmó un despacho de Mar Marán
de la agencia española de noticias EFE.
Informes obtenidos por El Nuevo Herald, que fueron
confirmados telefónicamente por una residente
de El Vedado, reportaron el saqueo de varios comercios
ubicados en las calles Lánea y San Lázaro,
respectivamente.
''En Lánea, una tienda que tiene cristales
panorámicos, fue saqueada por algunas personas
que se robaron, bicicletas y electrodomésticos'',
indicó la fuente.
En las primeras horas de la madrugada del lunes
el agua alcanzaba la intersección de las
calles Paseo y Calzada, en el Vedado, y según
reportes de la prensa local ''ya amenazaba rebasar
ese punto y llegar a la calle Lánea''.
''Se trata de una penetración del mar
fuerte y debe afectar a los cinco municipios costeros
de la ciudad: Plaza de la Revolución, La
Habana Vieja, Centro Habana, La Habana del Este
y Playa'', declaró José Rubiera,
jefe del Centro de Pronósticos del Instituto
de Meteorolgía, quien agregó que
las inundaciones pudieran mantenerse hasta el
martes.
Poco despúes del mediodía del lunes
se informaba que unidades anfibias de las Fuerzas
Armadas estaban participando en la evacuación
de personas atrapadas por las inundaciones que
a esa hora que eran particularmente severas en
calles como Paseo, Avenida de los Presidentes,
Lánea, San Lázaro, Prado o Quinta
Avenida.
La furia del mar provocó fracturas en
varios puntos del Muro del Malecón.
En Ciudad de La Habana se habían evacuado
19, 219 personas, hasta las 3:00 P.M. del domingo,
según informó Carlos Amador, icepresidente
del Consejo de la Administración Provincial.
El principal peligro que enfrentan ahora los residentes
de la capital es el derrumbe de edificios y viviendas
que se encuentran en pésimo estado.
La mayor parte de la capital se encuentra sin
electricidad, aunque las autoridades han asegurado
que ''gracias a la instalación de los grupos
electrógenos se puede garantizar la producción
del pan''.
Según Jesús Enríquez Hernández,
director del Hotel Riviera, dijo que los 169 turistas
alojados en esa instalación, fueron trasladados
al hotel Habana Libre, en previsión de
las penetraciones del mar.
El Hotel Meliá Cohiba, frente al Malecón,
quedó incomunicado por la subida del nivel
del agua.
En la provincia de Pinar del Río, en el
extremo occidental de la isla, Wilma produjo rachas
de vientos sobre los 100 kilómetros por
hora, interrupciones del servicio eléctrico,
e intensas lluvias en toda la región, además
de penetraciones del mar en ambas costa de la
región.
''En Mantua habían caído 602 milímetros,
en Guane 380 y en Minas de Matahambre, 323'',
informó el diario Granma.
Desde Pinar del Río ''fueron llevados
hacia hoteles de Ciudad de La Habana, 147 turistas
extranjeros; mientras los 889 estudiantes de otras
naciones que cursan la enseñanza universitaria
aquí tuvieron todas las garantías
de seguridad y alimentación'', informó
el semanario 'Trabajadores', citando fuentes de
la Defensa Civil que hablan de 261,000 personas
evacuadas a lugares seguros.
''Minas de Matahambre fue el municipio más
afectado por Wilma en la provincia de Pinar del
Río. Las rachas de viento más significativas
se registraron en Santa Lucía, poblado
del propio municipio: 120 kilómetros por
hora'', informó 'Trabajadores'.
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