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Cuba: opositores piden
unidad
Fernando Ravsberg, BBC,
La Habana. 5 de abril de 2005.
El grupo opositor cubano Todos Unidos acaba de
hacer público un documento en el que llama
a los sectores de la disidencia interna y en el
exilio a suspender los enfrentamientos públicos
entre las organizaciones.
"Se debe tener al menos un mínimo
de solidaridad entre nosotros", dijo a BBC
Mundo el coordinador de Todos Unidos, Vladimiro
Roca, y agregó que "es un suicidio
no darse cuenta de esto".
La iniciativa del grupo socialdemócrata
se produce luego de los ataques públicos
entre los dos principales grupos, la Asamblea
de la Sociedad Civil, de Marta Beatriz Roque,
y el Diálogo Nacional, encabezado por Osvaldo
Payá.
A este enfrentamiento se suma también
el exilio de Miami que se ha dividido en el apoyo
a uno u otro de los grupos, por lo que Vladimiro
Roca les pide "que opinen pero que no ataquen
ni agredan".
"Ataques, mentiras, boicot"
Osvaldo Payá, promotor del Proyecto Varela
y en la actualidad del Diálogo Nacional,
le dijo a la BBC que "la actitud de la Asamblea
de la Sociedad Civil ha sido de ataques, de mentiras,
de boicot".
Payá afirma que los dirigentes de la Asamblea
criticaron también el Proyecto Varela,
aliados entonces con infiltrados de la Seguridad
del Estado y con "sectores extremistas de
Miami que nos atacan por oficio".
El dirigente, de tendencia democristiana, afirmó
que los problemas en la disidencia se deben a
la disparidad de criterios, al trabajo que realiza
la policía política y a la influencia
de Miami sobre algunos grupos opositores.
Dijo además que con la Asamblea existen
importantes diferencias políticas sobre
cómo alcanzar el cambio en Cuba.
Un problema de liderazgo
La economista Marta Beatriz Roque encabeza la
Asamblea de la Sociedad Civil, una especie de
frente que, según sus organizadores, reune
a más de 300 organizaciones opositoras.
Roque le dijo a BBC Mundo que con Payá
"lo que pasa, al parecer, es un problema
de protagonismo" y aseguró que eso
se refleja en que este quiere estar por encima
del resto de los dirigentes de la oposición.
"Lo que es imposible es aceptar un solo
líder", indicó Roque y explicó
que Payá jugó un papel importante
en el pasado con el Proyecto Varela, pero que
en la actualidad existen otros proyectos diferentes.
Refiriéndose a las críticas de
Payá, Marta Beatriz Roque, dijo que "al
menos hay que respetar los años que he
pasado en la prisión, la enfermedad que
tengo y a pesar de eso mantenerme en la lucha".
Los quiebres en la disidencia
Para el opositor socialdemócrata, Manuel
Cuesta Morúa, "la inmadurez de la
disidencia lleva a que las menores diferencias
políticas se personalicen" y agregó
que en Cuba ha sido imposible despersonalizar
el debate.
Cuesta Morúa le dijo a la BBC que "hay
una gran bronca por una especie de posicionamiento
en los medios de comunicación y frente
al favor de los políticos que internacionalmente
apoyan a la disidencia".
"Desafortunadamente se sigue transfiriendo
la idea de que es sólo un proyecto el que
puede llevar a la democratización de Cuba
y si aparecen otros proyectos deben ser eliminados",
opinó el socialdemócrata.
Manuel Cuesta Morúa agregó que
además pesa la duda de "que unos u
otros son de la seguridad del Estado de manera
que se ha creado un clima de sospecha" entre
los grupos y líderes.
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