Pérez
Roque: "Volar en pedazos la OEA"
Abril,
Venezuela, 12 de agosto de 2005.
El canciller cubano, Felipe Pérez Roque,
sostuvo que "una prioridad de la lucha antiimperialista"
en la región es "volar en pedazos"
a la Organización de Estados Americanos
(OEA), para crear un organismo regional que impulse
la integración del Continente y de Cuba.
En el marco de la 16 edición del Festival
Mundial de la Juventud y los Estudiantes que se
realiza en la capital venezolana, Pérez
Roque expresó que "hay que oponerse
a los mecanismos de dominación imperial
en la región, esa es una prioridad (antiimperialista),
hay que volar en pedazos a la OEA".
"¿Por qué hay que aceptar
que la OEA es el foro de integración de
América Latina y El Caribe?", se preguntó
el canciller cubano, tras destacar la necesidad
de crear una nueva organización de países
latinoamericanos y caribeños.
"En esa sí Cuba entraría,
en una (organización) independiente, no
en la otra (la OEA) mangoneada", enfatizó
Pérez Roque.
El canciller cubano sostuvo que la OEA se ha
convertido en "territorio de enfrentamiento"
entre sus países miembros y criticó
que el foro hemisférico "dócilmente
aceptó separar a Cuba a principios de los
años 60".
El canciller también destacó "la
importancia de oponerse" a la Carta Democrática
Interamericana, que a su juicio es un "instrumento
de injerencia e intervención" de Estados
Unidos, y a las bases norteamericanas en la región.
Además, Pérez Roque señaló
que una de las prioridades de la lucha antiimperialista
es "defender" la "revolución
bolivariana" de Chávez, que -destacó-
es "patrimonio estratégico de todos
los que en América Latina luchan contra
el imperialismo y por un mundo mejor".
"La derrota de la revolución bolivariana
significaría 100 años de retroceso
en nuestra lucha, ardería América
Latina y el Caribe si el imperio (estadounidense)
invadiera a la Venezuela bolivariana. La revolución
bolivariana es un pedazo donde hemos triunfado
y es trampolín para seguir impulsando la
lucha en el Continente", apuntó.
Pérez Roque respaldó la posición
de Chávez de "construir una genuina
unión latinoamericana y caribeña"
a través de Petrosur, Petroandina y Petrocaribe,
y la Alternativa Bolivariana para las Américas
(ALBA), impulsada por Venezuela que se contrapone
al ALCA de Estados Unidos.
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