PRENSA INTERNACIONAL
Noviembre 9, 2004
 

Adiós, dólar; bienvenido, 'chavito'

La divisa norteamericana deja de circular en Cuba tras ser la moneda más utilizada en los últimos diez años

Casi automáticamente ha reaparecido un incipiente mercado negro que recuerda al de antes de legalizar el dólar

Joaquim Ibarz - México. Corresponsal. La Vanguardia, España, 9 de noviembre de 2004.

Los cubanos han dicho adiós al dólar. La moneda estadounidense ha dejado de circular en la isla tras diez años de ser la más utilizada en el país. Ha sido sustituida por el peso convertible. Sin embargo, casi automáticamente ha aparecido un incipiente mercado negro, que rememora el existente hasta la legalización de la moneda norteamericana.

Con la desaparición del dólar, Cuba recupera soberanía nacional y pone fin a la contradicción de que mientras se mantenía un discurso antiimperialista, en la práctica sólo se utilizaba esa moneda. Antes de la legalización del dólar, en los hoteles y en locales especializados existían las llamadas diplotiendas, en las que únicamente los extranjeros podían comprar todo tipo de productos que no se encontraban en el desabastecido mercado local.

Tiendas, hoteles, agencias de alquiler de coches, restaurantes y los modestos centros comerciales ya sólo aceptan el pago en pesos convertibles, una colorida divisa local conocida como chavito.Para la compra de bienes y servicios, se usa en toda la isla el peso cubano convertible. Las autoridades han ampliado hasta el domingo 14 el plazo para cambiar dólares por pesos convertibles sin que se aplique el gravamen del 10% estipulado para la operación. El resto de las divisas aceptadas en Cuba (euro, franco suizo, libra esterlina y dólar canadiense) podrán cambiarse sin esta tasa.

Los cubanos están un tanto desconcertaquede dos ante la desaparición del hasta ahora omnipotente fula,tal como en la jerga popular se denominaba al dólar. La tercera parte de la población que recibe remesas de sus familiares en el exterior, principalmente de Miami y Nueva York, están ansiosos por saber cómo esta medida les va a afectar en la recep-ción de una ayuda que les resulta indispensable para subsistir. Por lo pronto, el Estado se les quedará el 10% de los envíos, ya que en EE.UU. no hay práctica en utilizar otra divisa que no sea el dólar. Alguna emisora de radio de Florida pide a los oyentes que restrinjan el envío de dólares "para que no se los Castro". Las remesas que envían los exiliados cubanos a sus familiares en la isla, unos mil millones de dólares, es la principal fuente de divisas para el régimen de Castro y, por lo tanto, su principal sostén financiero. El turismo genera más entradas de dólares, pero una buena parte hay que gastarlos en comprar alimentos, bebidas y todo tipo de productos para atender a los turistas. No hay datos sobre cómo han afectado las nuevas medidas restrictivas impuestas por el presidente George W. Bush al envío de remesas a Cuba.

Aunque el presidente del Banco Central de Cuba, Francisco Soberón, rechazó que la desdolarización fomente la aparición de un mercado negro de dólares, en algunos barrios de La Habana y otras ciudades han aparecido cambistas que ofrecen hasta 32 pesos cubanos por dólar, casi un 20% más que las casas de cambio. Los estudiosos de la economía de la isla creen que estas operaciones paralelas podrían disminuir o desaparecer si se mantiene la estabilidad del chavito.Los pesos convertibles pueden ser adquiridos por el turista en aeropuertos, hoteles, centros comerciales, bancos, correos y puntos de cambio.

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