PRENSA INDEPENDIENTE
Enero 5, 2004

RELIGION
Vivir la Navidad en Cuba

LA HABANA, enero (www.cubanet.org) - En su último mensaje de Navidad a todos los cubanos, el disidente Oswaldo Payá mencionó el temor que aún perdura entre los ciudadanos del país a la hora de expresar sus parabienes con motivo de la celebración navideña. Hace alusión a esa manera tan común en otra época, cuando el deseo de una feliz Navidad era expresado abiertamente entre dos personas que se encontraban en medio de este marco festivo. Realmente hoy muchos en la Isla se desean felicidades, pero sin añadir el sustantivo Navidad.

No me atrevería a señalar la causa del miedo como único factor que incide en la referida omisión. Puede ser que algunas personas todavía encuentren inadecuado hablar de Navidades después de treinta años de supresión. Hace un lustro que se levantó el veto oficial que pesaba sobre esta fiesta religiosa. Las tiendas se adornan con los atributos distintivos de la celebración y los ofertan a los consumidores. Claro que tampoco se hace referencia directa al hecho navideño, mientras que el énfasis propagandístico gira en torno al fin de año y más todavía sobre el nuevo aniversario del triunfo revolucionario que propició la instauración del actual sistema de gobierno. Por tanto pondría al desconocimiento como otro factor que atenta contra la normal visión del verdadero sentido de lo que se está celebrando. ¿Cómo es posible que se esté disfrutando de un día de asueto correspondiente al 25 de diciembre, para recomenzar las actividades laborales que volverán a interrumpirse en los días finales de año, y hablar de ambos feriados como si fueran la misma cosa?.

El verdadero significado de la Navidad sólo puede ser comprendido cuando ésta se celebra y se vive plenamente desde la fe. Por ello me resultó tan interesante la homilía pronunciada por el párroco que atiende actualmente la comunidad de Cojímar durante la celebración de la Víspera de Navidad, o Misa del Gallo. El sacerdote se preguntaba si los cristianos sabremos distinguir el sentido de la celebración del nacimiento de Jesús en medio de tantos problemas. Viviendo entre tantas personas pobres, ancianos abandonados, dolencias terribles que postran a enfermos en las cruces de las camas, dolor, odios, intolerancias e incomprensiones. En un mundo donde priman la guerra, el hambre y las enfermedades. Sólo sabiendo que no se trata de una celebración más, obviando el comercialismo y la frivolidad que se nutren de esta ocasión es que podremos celebrar una recta Navidad.

Obviando cierto escepticismo, creo que este Jesús nacido en la pobreza de Belén le está diciendo algo a la mayoría de la población cubana, y muchos perciben el mensaje. Ciertamente las iglesias se llenaron, según referencias de varios templos conocidos, de un público que busca algo diferente al escapismo del ron y la cerveza. Gente que espera escuchar palabras de esperanza y amor. El gran dilema está en si encuentran verdaderamente esa palabra que les haga cambiar el derrotero de su vida.

Porque si la gente tiene miedo, es que no han encontrado a Jesús, y difícilmente podrán desear una feliz Navidad. Pero si dicen celebrar la Navidad cristianamente y se quedan en los signos de la cena, el arbolito, los turrones o la tristeza de no tener estas cosas, faltará igualmente el sentido de la celebración y Jesús seguirá ausente de la vida de estas personas. Tampoco estas personas podrán decir Feliz Navidad.

En la carta que ha dirigido el Cardenal Jaime Ortega a la feligresía de La Habana, y con ella a todo el país, trata de estas realidades comprendidas en aquello que el Señor nos ofrece a través del regalo de su Hijo, el Dios hecho hombre que comparte la vida y la historia de los seres humanos. Que se hace humano en la carne y el dolor, en la vida y en la muerte, pero que con su Resurrección nos dice que con la muerte no todo termina. La Navidad es la fiesta de la Vida, del Amor y la Esperanza. Quien en esta ocasión diga de manera trágica que no puede expresar alegría o felicidad, es que aún no conoce la plenitud del mensaje cristiano, y mucho menos lo que Jesús nos viene a traer.

Por eso, a pesar del luto, de las ausencias, sean por el exilio creciente o la prisión, se puede hablar de alegría. Es la alegría que emana de la luz. Es ese sentimiento que transmiten algunos encarcelados, capaces de decir que ahora más que nunca, desde la soledad y la oscuridad de una celda, de no contar con tantas cosas necesarias en apariencia para celebrar la Navidad, ellos sienten la cercanía de Dios, reciben la luz de su Palabra y se alegran en su nacimiento con lo indispensable. El hecho de que Antonio Díaz pueda decir a su esposa y amigos: ¡Feliz Navidad! es lo que me hace comprender dónde radica la esencia de esta fiesta. Contrasta con la actitud de aquéllos que cuentan con todo, aparente libertad, cosas materiales y salud, pero no pueden articular la sagrada palabra y se quedan en las incompletas y vacías felicidades.

Sí, la Navidad existirá siempre. No necesita del decreto oficial que la autorice. Porque a pesar de que se promulguen leyes que permitan su ejercitación, es una fiesta que nace del corazón y no de las legislaciones. Si aquél está vacío, desesperanzado, alejado de Dios, lleno de banalidades, entonces no existirá una verdadera Navidad. No es el miedo el que impide desear felicidades referidas al acontecimiento pascual, sino el desconocimiento de ese Dios que es amor, perdón y libertad. El que conoce a Jesús y se compromete en su caminar difícilmente dejará de vivir la Navidad y desearla abiertamente a todos. cnet/43



Esta información ha sido transmitida por teléfono, ya que el gobierno de Cuba controla el acceso a Internet.
CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores, y autoriza la reproducción de este material, siempre que se le reconozca como fuente
.

IMPRIMIR



PRENSAS
Independiente
Internacional
Gubernamental
IDIOMAS
Inglés
Francés
Español
SOCIEDAD CIVIL
Cooperativas Agrícolas
Movimiento Sindical
Bibliotecas
DEL LECTOR
Cartas
Opinión
BUSQUEDAS
Archivos
Documentos
Enlaces
CULTURA
Artes Plásticas
El Niño del Pífano
Octavillas sobre La Habana
Fotos de Cuba
CUBANET
Semanario
Quiénes Somos
Informe Anual
Correo Eléctronico

DONACIONES

In Association with Amazon.com
Busque:

Palabras claves:

CUBANET
145 Madeira Ave, Suite 207
Coral Gables, FL 33134
(305) 774-1887

CONTACTOS
Periodistas
Editores
Webmaster