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SOCIEDAD
Feria
Internacional del Transporte en La Habana
SANTA CLARA, 19 de septiembre (www.cubanet.org)
- Mientras el cubano tiene que realizar grandes
esfuerzos para trasladarse de un lugar a otro,
no importa la distancia por recorrer, las autoridades
cubanas anunciaron esta semana en La Habana la
apertura de las puertas de PABEXPO para la 7ma
Feria Internacional del Transporte (FIT 2003),
con la presencia de más de 130 firmas contratadas
en representación de 16 países con
novedosas técnicas y medios de transporte.
Anunciada a bombo y platillo por la TV y los
periódicos nacionales, la FIT 2003 abarca
cerca de 4000 metros cuadrados de área
del capitalino recinto ferial de PABEXPO, para
mostrar la gama de productos, tecnologías
y servicios del sector del transporte automotor
y marítimo fundamentalmente.
El cubano de hoy tiene que recurrir a otros medos
de transporte que datan incluso de siglos anteriores,
como es el caso de los carretones de tracción
animal, para poder mover o transportar las mercancías
dentro de los perímetros urbanos y suburbanos,
debido a la ausencia casi total de transporte
estatal. Coincidentemente, esta semana el periodista
de la radio y la televisión de Villa Clara
Abel Falcón recalcó en uno de sus
programas de la CMHW, cadena provincial de radio
de la provincia, que se hace necesario cuidar
a los caballos porque la matanza ilegal de los
equinos y el uso indiscriminado de los propietarios
en el transporte podían afectar al medio
de locomoción, imprescindible para estos
tiempos.
En la capital del país, montarse en un
flamante "camello", obra ingeniera de
elevado vuelo imaginativo, es casi imposible,
especialmente en horarios picos. Si se desea llegar
temprano al trabajo o a una cita, debe recurrirse
a los transportistas privados, quienes utilizan
automóviles tan antiguos como la propia
constitución del 40. Para viajar de cualquier
punto del país hacia la capital es prácticamente
imposible obtener un boleto para un asiento en
un ómnibus Astro. Los viajeros se amontonan
en las terminales ferroviarias para poder viajar,
aunque sea en un tren "lechero", después
de interminables horas de trayecto.
Las terminales de ómnibus intermunicipales
son incapaces de satisfacer las demandas de la
población. Sólo tienen una o dos
salidas diarias hacia los municipios, aunque a
veces se reducen a 0 por falta de combustible,
de baterías o roturas de los artefactos,
parecidos a los camellos, pero que en el interior
del país son llamados Superbus. Los recursos
más apropiados para llegar a los puntos
de recogida, son los bicitaxi o los carretones,
allí se engrosa la larga lista de espera
por un camión o lo que sea, mientras los
"amarillos" o "azules", se
baten a pulmón limpio con los choferes
indolentes ante la carencia de modos de locomoción.
Dentro de los indolentes se incluyen los choferes
de jefes de empresas y organismos estatales, que
acostumbran a mirar de reojo la situación.
El ministro de Transporte, Carlos Manuel Pozos
Torrado, ha reconocido antes de la Feria, que
se trabaja por mejorar la calidad de los servicios
a la población, explotando todas las alternativas,
como es el caso de los inspectores populares del
transporte y la aplicación del perfeccionamiento
empresarial, sólo aplicado hasta la fecha
al 5% de las entidades del sector. cnet/46
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