SOCIEDAD
Miedo y mentira del sistema cubano
LA HABANA, octubre (www.cubanet.org)
- "Breve historia del miedo", del historiador
cubano Rafael Rojas, nos sugiere un estudio del
miedo en Cuba, y de cómo éste ha
atravesado la vida nacional para por último
ser recogido y normalizado por el totalitarismo
cubano.
Más recientemente, en un artículo,
un colega afirmaba que el miedo era el sostén
del régimen, y que sin éste el sistema
no funcionaría. Pero sería imposible
hablar en Cuba del miedo sin mencionar cómo
le ha servido de soporte a la mentira.
Pero esta extraña relación no queda
ahí. Existe todo un juego donde los miedosos
no sólo somos nosotros y los mentirosos
el estado. Por una extraña inversión
el estado también siente miedo y nosotros
le mentimos.
Lo engañamos cuando le juramos fidelidad,
nos miente a nosotros a diario; le tememos por
el horror de lo que son capaces, llevan ellos
el miedo a perder el control.
De lo anterior pudiera citarse como ejemplo una
conferencia ofrecida hace unos meses por la cancillería
cubana. En ella se alegó que en 44 años
de revolución no se había "reprimido
en el país una protesta ciudadana".
Es sabido por todos de qué manera se paga
en la Isla disentir de la revolución. Por
años las más atroces condenas y
castigos han caído sobre aquéllos
que optaron por la verdad. Otros se han arriesgado
a perder la vida en el mar huyendo antes que enfrentar
la vida en la Isla.
Pero de otro lado el régimen también
se siente timado. Conoce las caras sudorosas y
las manos cansadas que agitan banderitas en las
concentraciones, las que le abandonarían
en ese mismo instante de orgía colectiva
si les fuera posible. Pero si es así, ¿por
qué no poner las cartas sobre la mesa y
consultar al pueblo sobre lo que está bien
o mal? Porque simplemente el miedo a saberse odiados
los paraliza de no cometer tal disparate. cnet/32
|