CUBA:
Preocupa al CPJ situación de periodistas presos
Comité
para la Protección de los Periodistas.
Nueva York, 12 de noviembre del 2003-El Comité
para la Protección de los Periodistas (CPJ,
por sus siglas en inglés) está sumamente
preocupado por la falta de información
sobre la situación de los periodistas cubanos
presos Mario Enrique Mayo Hernández, Adolfo
Fernández Saínz e Iván Hernández
Carrillo, quienes comenzaron una huelga de hambre
el 18 de octubre.
Una semana después de que un grupo de
familiares intentara infructuosamente visitar
a los periodistas y disidentes que se habían
declarado en huelga de hambre en la Prisión
Provincial de Holguín, en la región
oriental de la isla, los huelguistas han sido
dispersados y trasladados a otras prisiones.
Según fuentes del CPJ, el grupo de familiares
se dirigió a la provincia de Holguín
el 6 de noviembre para obtener información
sobre los periodistas y disidentes y para tratar
de verlos. Ante la negativa de las autoridades
penitenciarias de aceptar el pedido del grupo,
los familiares pernoctaron en un descampado en
las afueras de la prisión. Al día
siguiente, el director de la prisión, un
capitán que se identificó por el
nombre de Israel, atendió al grupo. Israel
les dijo que mientras los periodistas y disidentes
cometieran "indisciplinas", no se les
permitiría ningún contacto con sus
familias.
Cuando la esposa de Mayo Hernández, Maydelín
Guerra Alvarez, preguntó por su esposo,
Israel manifestó que había recibido
órdenes de trasladar a Mayo Hernández
a la prisión de Mar Verde, en la vecina
provincia de Santiago de Cuba. El grupo de familiares
decidió dejar la prisión el 7 de
noviembre bajo la promesa de Israel de que se
les permitiría a los prisioneros que llamaran
a sus casas, pero hasta el día de hoy las
familias no habían recibido ninguna llamada
telefónica de parte de ellos.
Tras la partida de la prisión del grupo
de esposas y madres, algunos disidentes que se
habían sumado a la huelga de hambre han
sido llevados a otras prisiones, según
fuentes de la oposición en la isla.
Fernández Saínz ha sido trasladado
a otro destacamento en la misma prisión,
de acuerdo con su esposa, Julia Núñez
Pacheco. El 11 de noviembre, Guerra Álvarez
fue hasta la prisión de Mar Verde pero
no la dejaron ver a su esposo. Debido a que las
autoridades penitenciarias se han negado a permitir
el contacto con los huelguistas, sus familias
no han podido confirmar si suspendieron la huelga
de hambre o en qué estado de salud se encuentran.
Mayo Hernández y Fernández Saínz
se habían sumado a cuatro disidentes presos
en una huelga de hambre que comenzó el
18 de octubre y que tenía como propósito
protestar por el trato dado a Hernández
Carrillo, quien fue enviado a una celda de castigo
tras quejarse de un malestar.
El CPJ también ha recibido noticia de
que el periodista Manuel Vázquez Portal,
quien está encerrado en la prisión
de Aguadores, en Santiago de Cuba, comenzó
una huelga de hambre el día de ayer. Según
Yolanda Huerga, la esposa de Vázquez Portal,
ella había recibido información
de que Vázquez Portal había iniciado
otra huelga de hambre más en apoyo a los
periodistas y disidentes encerrados en Holguín.
Vázquez Portal fue galardonado este año
con uno de los Premios Internacionales a la Libertad
de Prensa que entrega el CPJ.
En los últimos cuatro meses, varios periodistas
cubanos presos se han declarado en huelga de hambre.
En agosto, Mayo Hernández, Fernández
Saínz y Hernández Carrillo sostuvieron
una huelga de hambre durante 13 días en
reclamo de una mejor alimentación y una
atención médica adecuada. El mismo
mes, Vázquez Portal y el periodista Normando
Hernández González, en aquel entonces
en la prisión de Boniato, en Santiago de
Cuba, se mantuvieron en huelga de hambre por una
semana. Como represalia, Vázquez Portal
fue luego trasladado a la prisión de Aguadores,
mientras que Hernández González
fue enviado a una prisión situada en la
occidental provincia de Pinar del Río.
Los periodistas, quienes han sido ubicados en
pabellones de máxima seguridad y son esposados
cada vez que deben salir de sus celdas, han denunciado
las malas condiciones sanitarias, la inadecuada
atención médica, el aislamiento
a que son sometidos y la falta de acceso a la
prensa escrita y la televisión. También
se han quejado de que los alimentos que reciben
huelen mal o están en mal estado.
Un total de 28 periodistas independientes fueron
detenidos como parte de una intensa campaña
gubernamental en marzo. Los juicios sumarios de
los periodistas, que duraron un día, se
realizaron a principios de abril a puerta cerrada.
Algunos periodistas fueron procesados de conformidad
con el Artículo 91 del Código Penal,
que prevé largas sanciones de privación
de libertad o muerte para todo el que actúe
contra "la independencia o la integridad
territorial del Estado". Otros periodistas
fueron enjuiciados por violar la Ley 88 de Protección
de la Independencia Nacional y la Economía
de Cuba, que dispone sanciones de privación
de libertad de hasta 20 años para toda
persona que cometa acciones "que persiguen
subvertir el orden interno de la Nación
y destruir su sistema político, económico
y social".
El 7 de abril, tribunales de toda la isla dictaron
penas de cárcel para los periodistas, que
oscilan entre 14 y 27 años. Los periodistas
permanecieron encarcelados en celdas del Departamento
de Seguridad del Estado (DSE) hasta el 24 de abril,
cuando la mayoría de ellos fueron trasladados
a cárceles ubicadas a cientos de kilómetros
de sus hogares. En junio, el Tribunal Supremo
Popular, el órgano judicial de máxima
instancia, desestimó los recursos de casación
que los periodistas interpusieron en abril y ratificó
las condenas.
Para más información acerca
de la situación de la libertad de prensa
en Cuba, visitar www.cpj.org.
El CPJ es una organización independiente
sin ánimo de lucro radicada en Nueva York,
y se dedica a defender la libertad de prensa en
todas partes del mundo.
|