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Tres
periodistas en huelga de hambre
Reporteros
sin Frontera. 25 de agosto de 2003.
Cuando llevan diez días en huelga de hambre,
Reporteros sin Fronteras ha manifestado su gran
preocupación por la salud de los periodistas
independientes Mario Enrique Mayo, Adolfo Fernández
Sainz e Ivan Hernández Carrillo, internados
en la cárcel de la ciudad de Holguin (provincia
de Holguin, este de la isla), quienes reclaman
que los presos que padecen enfermedades crónicas
tengan derecho a poder recibir medicamentos, y
una alimentación adecuada.
"Las condiciones en que se encuentran detenidos
la mayoría de los periodistas independientes
son deplorables, y ponen en grave peligro su salud,
especialmente la de Mario Enrique Mayo. El traslado
de la mayoría de ellos a cárceles
situadas a cientos de kilómetros de sus
familias los hace aun más vulnerables a
las enfermedades, y a la sub- alimentación",
ha denunciado Reporteros sin Fronteras. La organización
pide la libertad, por "razones humanitarias",
de Mario Enrique Mayo y los demás periodistas
enfermos.
Mario Enrique Mayo, director de la agencia de
prensa Félix Varela, Adolfo Fernández
Sainz e Ivan Hernández Carrillo, de la
agencia Patria, así como otros cuatro presos
políticos, internados en la cárcel
de Holguin, iniciaron una huelga de hambre el
15 de agosto de 2003.
La huelga comenzó por iniciativa de Mario
Enrique Mayo cuando las autoridades carcelarias
impidieron a Maydelín Guerra Alvarez, esposa
del periodista, que le entregara una cesta con provisiones
y medicamentos. La cesta contenía alimentos
adaptados a la dieta médica de Mario Enrique
Mayo, que padece hipertensión arterial y
hemorragias, debidas a unos problemas de hemorroides.
El periodista declaró que haría huelga
de hambre hasta que se le proporcione una alimentación
acorde con sus problemas de salud. Según
una información no confirmada por las autoridades
carcelarias, Mario Enrique Mayo y Adolfo Fernández
Sainz fueron trasladados, tras el inicio de la huelga
de hambre, a la unidad de cuidados médicos
de la cárcel. Su estado de salud se habría
deteriorado seriamente.
Mario Enrique Mayo sufría hemorragias
desde hacía varios días y había
pedido al director de cárcel una mejora
en la alimentación; petición que
el director rechazó inmediatamente.
La organización recuerda que el 4 de agosto
de 2003 Blanca Reyes confió a Reporteros
sin Fronteras su gran preocupación por
las condiciones de detención de su marido,
el periodista y poeta cubano Raúl Rivero.
"Desde su detención, el 20 de marzo,
ha perdido cuarenta libras (19,5 kilos)",
declaró, precisando que habían hablado
por teléfono el pasado 31 de julio.
Reporteros sin Fronteras (RSF)
defiende a los periodistas encarcelados y la libertad
de prensa en el mundo, o sea el derecho de informar
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19 de la Déclaración Universal de Derechos Humanos.
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