Yupi
Internet, mayo 2, 2002.
Carter se reunirá con exilio cubano antes de viajar a Cuba
MIAMI, 01 may (AFP) - El ex presidente demócrata Jimmy Carter
(1977-81) se reunirá el jueves en Atlanta (Georgia, sudeste) con
representantes del exilio anticastrista antes de iniciar una histórica
visita a Cuba del 12 al 17 de mayo, indicó el miércoles en Miami
la Fundación Nacional Cubano-Americana (FNCA).
En la reunión, que se celebrará en el Centro Carter, los
dirigentes del exilio pedirán al ex-mandatario estadounidense que inste
al presidente Fidel Castro a mejorar la situación de los derechos humanos
en la isla.
"Como Fundación estamos dispuestos a cambiar la política
hacia Cuba si ellos (en la isla) también hacen algo" en materia de
derechos humanos, aseguró Joe García, director ejecutivo de la
FNCA, principal organismo en Estados Unidos del exilio anti-castrista.
La delegación de la FNCA que se entrevistará con Carter estará
dirigida por su presidente Jorge Mas Santos.
El viaje de Carter a Cuba es considerado histórico ya que se trata
del ex dirigente estadounidense de mayor jerarquía en visitar la isla
comunista desde 1959. Carter prevé reunirse con Castro así como
con "todos los sectores de la sociedad civil" cubana, según
indicó recientemente el ex presidente en un comunicado.
Carter, que defiende el fin del embargo comercial impuesto por Washington a
La Habana y el fin de las restricciones para viajar a la isla, mejoró las
relaciones con la isla durante su mandato en la Casa Blanca.
Castro encabeza gigantesca concentración por 1 de Mayo
LA HABANA, 01 may (AFP) - El presidente cubano, Fidel Castro, fustigó
este miércoles a los gobiernos latinoamericanos que reprobaron la política
de derechos humanos vigente en la isla y reivindicó los logros de la
revolución socialista ante más de un millón de personas, en
la mayor concentración popular realizada en Cuba para conmemorar el 1 de
Mayo.
"Esta ha sido la demostración popular más grande que se
efectuó en Cuba desde el triunfo de la revolución", en 1959,
dijo Castro ante una multitud estimada por los organizadores en más de un
millón de personas, que desde horas de la madrugada se movilizaron desde
diversos puntos de la ciudad.
La multitud cubrió varios kilómetros de avenidas en la capital
y la explanada de la histórica Plaza de la Revolución de La
Habana, hasta donde llegó coreando consignas contra Estados Unidos y en
apoyo a su líder Fidel Castro.
"Fidel seguro, al yanki dale duro", gritaban al unísono los
manifestantes, que vestían camisetas de color blanco y rojo y agitaban
banderas nacionales.
Banderas de numerosos países, fundamentalmente latinoamericanas y
africanas, fueron llevadas este miércoles por ciudadanos de sus
respectivos países, como testimonio de acompañamiento a Cuba,
enfrentada a varias naciones por el voto en su contra en la Comisión de
Derechos Humanos de la ONU en Ginebra.
Las banderas eran portadas por invitados a las celebraciones, estudiantes
extranjeros en la isla o ciudadanos de esos países residentes en Cuba.
"Con toda seguridad que ninguno de los que en América Latina
promovieron, coauspiciaron o apoyaron ese proyecto (en Ginebra), podrían
reunir en la capital de sus respectivos países el 5% de los ciudadanos
aquí reunidos", dijo Castro.
Las palabras fueron celebradas con ondear de banderas de Uruguay, México,
Argentina y Chile, países que apoyaron la resolución en Ginebra, y
también de Venezuela, Angola, Puerto Rico, Canadá y Gran Bretaña,
entre otras.
"Viva la unidad entre Cuba y México. La hermandad entre nuestros
pueblos no la destruirá el imperio yanqui ni sus esbirros serviles",
se podía leer en una pancarta firmada por la organización Sierra
Huasteca Potosina de México.
Bajo un radiante sol tropical que hizo subir la temperatura y correr varias
veces a los camilleros de la Cruz Roja a prestar auxilio, los cubanos escucharon
igualmente a oradores de Argentina, México, Estados Unidos y Uruguay, que
estaban entre los casi 800 invitados al acto por la Central de Trabajadores de
Cuba (única).
Los participantes cubanos fueron convocados a llevar camisetas blancas,
azules y rojas, colores de la bandera nacional, bajo la cosigna "Primero
con la patria".
Pocos minutos antes de que Castro terminara su discurso de clausura, una
lluvia de papelitos con esos colores comenzó a caer de lo alto del
mausoleo a José Martí, de unos 150m de alto, los que fueron
dispersados por el viento entre los concurrentes.
"No se sabe si esto un adorno o un sabotaje", dijo Castro entre
jocoso y molesto, pues tuvo que interrumpir su alocusión, debido a que la
gente desvió su atención hacia la lluvia de octavillas.
Unos pocos minutos después de concluir el discurso, el presidente
regresó a la tribuna para comentar que "estos papelitos extraños
no dicen nada" y aclarar que eran un adorno previsto para el final del
acto, pero que alguien por error dió la señal de lanzarlos antes
de tiempo.
Actos semejantes se efectuaron en las 14 provincias de Cuba y unos siete
millones de habitantes, más de la mitad de la población de la
isla, de acuerdo a datos de la Confederación del Trabajo, se movilizaron
en todo el país para celebrar esta efemérides.
El Proyecto Varela trae vientos de cambio en Cuba
WASHINGTON, 01 may (AFP) - Una petición firmada por miles de cubanos
que sería presentada en las próximas semanas a la Asamblea
Nacional para solicitar un referéndum en reclamo de amnistía para
presos políticos y libertad de expresión, entre otros, trae
vientos de cambio en Cuba, indicó el miércoles un editorial del
diario The Washington Post.
La petición, conocida como Proyecto Varela, "representa una
demostración pública mucho más impresionante que las
orquestradas" por el presidente Fidel Castro, como la convocada para
celebrar el Día de los Trabajadores y protestar contra la "actitud
servil" de los países latinoamericanos que llamaron a Cuba a hacer
progresos en los derechos humanos en la Comisión de Derechos Humanos de
la ONU en Ginebra.
"Que disidentes cubanos de unos 140 grupos hayan podido reunir las
firmas en un año, a pesar de no tener acceso a los medios y mucho acoso
de los servicios de seguridad, es en sí mismo un triunfo para los
derechos humanos, y una señal segura de que el sistema de Castro se está
desmoronando", estimó el diario.
"En una cultura de miedo, el cambio comienza cuando el pueblo supera su
miedo", dijo a The Washington Post Oswaldo Paya, organizador del Proyecto
Varela.
El diario señaló que el Proyecto Varela debe formar parte de
la agenda del histórico viaje que hará este mes a La Habana el ex
presidente estadounidense Jimmy Carter.
Hasta que la petición no sea aceptada, estimó el Post, no debe
considerarse un alivio del embargo económico impuesto por Washington a La
Habana en 1961.
El Proyecto Varela, lanzado en 1998, pide al Parlamento cubano que organice
un referéndum sobre cinco aspectos: libertad de expresión y
asociación; amnistía para los presos políticos que no hayan
participado en hechos violentos; autorización a los cubanos a que tengan
sus propias empresas y a contratarse libremente; una nueva ley electoral, y, si
se aprueba el referéndum, elecciones en un término de nueve meses
a un año.
Según la Constitución cubana, la Asamblea debe considerar y
votar cualquier medida presentada por 10.000 votantes registrados.
Deplora Fidel Castro voto latinoamericano en Ginebra
La Habana, 1 May (Notimex).- El presidente de Cuba, Fidel Castro, recriminó
hoy a varios gobiernos de América Latina haber "abandonado y
traicionado" a esta isla en la Comisión de Derechos Humanos de
Naciones Unidas (ONU) en Ginebra.
"Lo ocurrido antes de Ginebra, en Ginebra y después de Ginebra,
apenas se distingue de la bochornosa historia que ya conoció Cuba en los
primeros días del triunfo revolucionario de 1959", afirmó
este miércoles el gobernante en un discurso en la Plaza de la Revolución.
Ante más de un millón de personas congregadas con motivo del Día
Internacional del Trabajo, desacreditó a los gobiernos latinoamericanos
que votaron el pasado 19 de abril una resolución que pidió avances
en materia de derechos humanos y civiles en la isla.
Castro les pidió recordar que La Habana "no inclinó ni
inclinará sus banderas" ante Estados Unidos que "hoy dicta órdenes
a sus lacayos y lamebotas en este infortunado hemisferio".
En una comparación histórica, el gobernante se quejó de
que en la década de los años 60, Cuba fue "vilmente
abandonada y traicionada" por todos los países de la región,
excepto México y Canadá.
Sin mencionarlo por su nombre, recordó que ese aislamiento de las "oligarquías"
tuvo una excepción en un país (México) donde "décadas
atrás hubo una gran revolución social", pero que ahora en
Ginebra "tristemente la excepción se convirtió en regla".
En un discurso de 50 minutos, enlistó las calamidades económicas
y sociales causadas por la pobreza y dijo que el sistema que defienden los
gobernantes latinoamericanos "es la negación total de la libertad,
la democracia, la dignidad humana y la justicia social".
Opinó que ese sistema económico y político "ha
llegado a una crisis total" y reiteró acusaciones de que Estados
Unidos intenta anexarse a América Latina mediante la dolarización
y la creación del Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA).
Sostuvo que "todos los que nos condenaron en Ginebra o coauspiciaron la
resolución" de Uruguay sobre Cuba, "están bien distantes"
de los índices de educación, salud, cultura y seguridad social
que, dijo, disfrutan los habitantes de esta nación caribeña.
Apuntó que de los siete que votaron contra la isla (Costa Rica,
Chile, Argentina y Uruguay), "que en el pasado alardeaban ser los más
avanzados en la región, están a considerable distancia " en
los índices con este país.
Castro rechazó las denuncias sobre violación a los derechos
humanos en Cuba, dijo que este país es hoy "el más
independiente, más justo y solidario del planeta" y defendió
su sistema unipartidista y el control de los medios de comunicación.
De acuerdo con el mandatario, su país "ocupa ya lugares cimeros
en el mundo, muy difíciles de superar en un creciente número de
esferas fundamentales para garantizar la vida y los más esenciales
derechos políticos, sociales y humanos".
En otra parte de su discurso, Castro elogió la actuación del
presidente de Venezuela, Hugo Chávez, durante el golpe de 48 horas que lo
derrocó y dijo que con ello se abrió "una nueva página
histórica de América Latina, compleja y difícil" para
esa nación.
Al acto por el Día del Trabajo, dedicado a reclamar la libertad de
cinco cubanos condenados por espionaje en Estados Unidos, asistieron unos 800
invitados de organizaciones sindicales simpatizantes del gobierno cubano
procedentes de 32 países.
Castro: no ha sido venganza revelar conversación con Fox
La Habana, 1 May (Notimex).- El presidente cubano Fidel Castro negó
hoy que haya sido una venganza divulgar la conversación telefónica
que sostuvo con su homólogo mexicano Vicente Fox, en la que éste
le pide abreviar su estancia en la Cumbre de Monterrey.
"Toda mi vida he sido caballeroso en relación con mis
adversarios, aún en la guerra, donde los hombres mueren, jamás
humille, ofendí, ni tome venganza contra ningún prisionero",
expresó el gobernante cubano.
En el discurso con motivo del Día Internacional del Trabajo, Castro
dijo que tampoco buscó pretextos para divulgar su plática con el
mandatario mexicano, ya que "no vacilé en dejar constancia histórica
de aquella conversación que me pidieron fuese privada".
"También lo era mi carta personal al presidente (Fox), publicada
48 horas después sin consultarme, el mismo día que salí de
Monterrey", destacó el líder cubano.
El pasado 22 abril, Castro divulgó una conversación registrada
el 19 de marzo en la que Fox le pidió limitara a un día su
presencia en Monterrey, donde se realizó la Cumbre sobre Financiación
para el Desarrollo.
"Yo no inventé nada, ni llamé a nadie, ni tendí
trampa alguna contra alguien", ya que "advertí cuantas veces
pude a los que durante más de un mes me desafiaron constantemente y
exigieron pruebas" de quién fue quien le pidió acortara su
estancia en Monterrey, subrayó.
Ante más de un millón de habaneros, Fidel Castro aclaró
que "me tardé en presentar pruebas por no hacer daño a un país
hermano que admiro y respeto", pese a que algunos "gobiernos amigos en
la Cumbre me reprocharon no haber hecho allí la denuncia".
Sin embargo, agregó, "al continuar las mentiras, calumnias y
exigencias de pruebas durante varias semanas, cumplí la advertencia que
había hecho (de presentarlas)", por lo que "se me acusó
de ser vengativo por la promesa incumplida en relación con Ginebra".
Para el gobierno de Cuba, el apoyo del gobierno mexicano a la iniciativa
presentada por Uruguay en Ginebra sobre la situación de los derechos
humanos en la isla fue considerado como una traición y una promesa
incumplida por parte del presidente Fox.
El gobernante mexicano había declarado, antes de concluir su primer
visita de Estado a La Habana, en febrero último, que su gobierno no
promovía ni promovería ninguna iniciativa contra Cuba en esa
materia.
En la Plaza de la Revolución, Castro lamentó haber incluido el
diferendo Cuba-México en su discurso, pero comentó que era su
deber hacerlo pues "todavía funcionarios de ese país (México)
nos atacan sobre el tema que está demasiado fresco para lanzarlo al cesto
del olvido". |