A paso de
bastón: sufren los constipados
Manuel David Orrio, CPI
LA HABANA, marzo (www.cubanet.org) - Cuenta un amigo que un día sintió
deseos de matar a su esposa, tras sentirse víctima de un repentino e
injustificado ataque de celos. Ocurrió que al entrar a su casa escuchó
la voz de su mujer, encerrada en el cuarto de baño. La dama gritaba, se
quejaba, todo en una rara mezcla de dolor y placer. Mi amigo pensó que su
cónyuge hacía el amor con un amante, y literalmente se lanzó
al asalto de la habitación. Encontró a su esposa sentada sobre el
retrete inodoro, sufriendo a gritos una constipación.
Mi amigo y su esposa relatan la escena entre risas. Pero como en todo
sainete, la tragedia. El dolor de los constipados cubanos es más
extendido de lo que se supone. Ni el gobierno de Fidel Castro ni la prensa
oficiosa se han distinguido en los últimos tiempos por brindar información
sobre hasta dónde se halla incompleta la farmacopea isleña. Los últimos
datos hacen pensar que no es posible encontrar en el país a más de
cien medicamentos esenciales, entre ellos los laxantes.
El sufrir de los constipados se relaciona principalmente con la literal
ausencia de una de esas medicinas, cuyo nombre comercial es bisacodilo. De uso
extendido en la Isla, y al parecer muy efectivo, la nostalgia nacional por dicho
remedio parece alcanzar la categoría de clamor en marcha del pueblo
constipado, no combatiente.
Sencillamente, no hay; no se encuentra, está "perdido", y búsquese
quien lo envíe desde el exterior. Tal es la respuesta que más de
un médico de familia está dando a sus pacientes constipados, por
lo cual invito a recordar el célebre refrán cubano: "cuando
el mal es de 'cagal', no valen guayabas verdes".
Varias son las razones de esa extendida constipación. Primero que
todo, una dieta poco abundante en fibras vegetales, dada no sólo por la
escasez de ese tipo de alimentos, sino por sus elevados precios en los mercados
agropecuarios de cualquier género. Por ejemplo, la libra de tomates se
vende en La Habana a no menos de dos pesos cubanos, cuando el salario medio debe
de andar por unos 250 mensuales.
Después, la demografía. Ya el 14% de la población
cubana rebasa los 60 años de nacida. En ésa, la tercera edad, se
produce una disminución del peristaltismo intestinal que contribuye al
surgimiento de la constipación, la cual se agrava porque muchos de esos
mayores han hecho dependencia sicológica de medicamentos como el
bisacodilo. Se crea así un círculo vicioso.
Para colmo, según parece, y de acuerdo con informes de médicos
de familia, no existen remedios de medicina alternativa verdadera y
comprobadamente efectivos para combatir la constipación. Nadia, una de
esas especialistas, afirma que las infusiones de una planta nombrada sábila
pueden ser eficaces. Pero, en su experiencia, no del todo ni para todos.
Sufren los constipados. Pero al menos la esposa de mi amigo ya calmó
sus temores. A ella, le gusta hacer el amor en silencio.
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