Cuba Nueva. Vespertino
electrónico independiente de Cuba, editado en el exilio, en Barcelona.
Año 3 - Segunda edición.
Invaden balseros aéreos cubanos aeropuerto internacional de
Madrid-Barajas y solicitan asilo político
Barcelona, marzo 12 (Cubanueva.com/Guillermo Morales Catá).-Los más
importantes diarios de España publican este martes -y en grandes
titulares- la avalancha masiva de cubanos que ha llegado en los últimos días
al aeropuerto de Madrid-Barajas. Se estima en más de 200 los que a lo
largo del fin de semana se han congregado en la sala de deportados y
peticionarios de asilo de la terminal aérea, conocida como "sala 3".
"Las calladas pateras aéreas Habana-Madrid" o "Más
de 200 cubanos solicitan asilo político nada más llegar al
aeropuerto de Barajas" son algunos de los titulares de El Mundo, El País
o La Vanguardia.
Según diversas fuentes, la mayoría, 123, procedía de un
vuelo La Habana-Moscú, que aterrizó en Madrid el pasado domingo.
Se trata de la llegada de solicitantes de asilo cubanos más numerosa
desde que, en los primeros días de este año, arribaran otros 150.
Jesús Husillos, abogado del Gabinete de la Asociación Mutua de
Ayuda al Inmigrante de Catalunya (AMIC), dijo a Cubanueva que "es muy
probable que el Gobierno español les permita la entrada en España
por razones humanitarias tal y como ha hecho en ocasiones anteriores".
Alexander González, en conversación telefónica con esta
agencia, dijo que "en La Habana se corrió el "chisme" de
que a partir del 15 de marzo habrá que pedir un visado de tránsito
en España a todos los que vayan de Cuba a Moscú y por eso todo el
mundo está agarrándose de esta posibilidad de salir de Cuba antes
de que cierren el grifo". González es uno de los cubanos que acaba
de llegar a Madrid.
Se sabe que los cubanos reciben un trato especial en comparación con
los cientos de inmigrantes de otras nacionalidades que diariamente intentan
llegar a España mayoritariamente a través de las llamadas "pateras"
procedentes de Marruecos. Sin embargo, la nueva Ley de Inmigración y
Extranjería que entró en vigor hace poco más de un año
y una circular especial del 12 de enero pasado, estipula que para poder estar en
España, los inmigrantes deben venir de sus países de origen con un
permiso de trabajo y de residencia.
No obstante, se estima que más de 100 mil inmigrantes pululan por el
país de manera ilegal por haber quedado fuera del último proceso
extraordinario de regularización que venció el pasado 31 de julio
y que estipulaba que podían regularizarse todas aquellas personas que
pudiesen demostrar que se encontraban en España antes del 21 de enero del
2001.
Sin embargo, al parecer, la situación de los cubanos se maneja al
margen de las leyes pues en la mayoría de los casos se les permiten la
entrada al país por razones humanitarias. Fuentes del Gobierno han
declarado públicamente que la llegada de cubanos a Barajas se ha
triplicado. De las 3.273 peticiones de asilo tramitadas en el aeródromo
en el 2001, el 90 por ciento era de ciudadanos cubanos.
Detrás de las cifras y de los trámites migratorios de
regularización se escuda una triste realidad: cada día son más
y más quienes deciden abandonar el país por una u otra vía,
ya sea por "pateras" aéreas o por balsas. La mayoría
alega abandonar el país por razones económicas; sin embargo, ¿quién
decide que un país vaya bien o mal económicamente?: la política
de los gobiernos.
¿Y quién es el Gobierno en Cuba?: Fidel Castro. Y la lógica
no falla por más que nos inventemos un sinnúmero de silogismos
categóricos. Los cubanos se van o se escapan, hacen escaramuzas y sortean
el pago de miles de dólares pero no resisten más. La crisis económica
que se hace más palpable cada día y la represión política
que también se hace más evidente, sigue haciendo de Cuba uno de
los peores sitios del mundo y, por fortuna, España ha mostrado especial
responsabilidad hacia el pueblo de la Isla.
De La Habana a Moscú en patera aérea
Barcelona, marzo 12 (CubaNueva- Guillermo Morales Catá)- Hasta hace
unos años, viajar de La Habana a Moscú era un mérito sólo
concedido para los "héroes nacionales del trabajo", para los "vanguardias
nacionales", para los "destacados" o, como en mi caso, para los
dirigentes estudiantiles que "merecíamos" unas "buenas
vaciones" en el gran Hotel Rosilla en el mismo centro de Moscú, a un
costado de un Kremlim donde un señor llamado Lenin se mostraba dormido y
viejo. Y todo el mundo aspiraba en los años de bonanza a subirse a bordo
de un IL-62 de Aeroflot y degustar caviar mientras transcurrían los 9550
kilómetros de distancia.
Era tanta la furia de los viajes a Moscú que hasta un programa de
televisión llevaba por nombre, precisamente, el número de kilómetros
que separan a la capital cubana de la entonces capital de la Unión de Repúblicas
Socialista Soviética (URSS).
Pero las cosas cambiaron con el paso de los años. Ni viajan ahora los
elegidos del gobierno de Fidel Castro, ni en Aeroflot dan caviar con champagne,
ni Lenin está en el Kremlim, ni la URSS es URSS ni el chico de Camajuní,
Yiqui Quintana –presentador de aquel programa de televisión- está
en Cuba sino en Alemania, donde se asiló hace unos años.
Sin embargo, Moscú sigue siendo el sitio elegido. Esta de modé
inventarse un amigo que pone una carta de invitación para pasar unas
supuestas vacaciones en Rusia. Claro que, en la mayoría de los casos, los
viajeros no llegan al destino final sino que se quedan en el aeropuerto de
Madrid-Barajas; donde en estos instantes se concentran más de 200 cubanos
a la espera de que las autoridades españolas les concedan o bien asilo
político o asilo humanitario.
Y aunque fuentes no confirmadas especulan sobre la supuesta decisión
del gobierno español de imponer un visado de tránsito a todos los
que vayan de La Habana a Moscú; los cubanos siguen viniendo; y son cada día
más. Fuentes de Inmigración y Extranjería de España
han calculado la entrada de más de tres mil cubanos durante el año
pasado; de lo cual se infiere que la cifra se ha triplicado con respecto al
2000.
De manera que las pateras de Marruecos ya no ocupan los titulares de los
diarios ni de las agencias de noticias ni de las cadenas de radio o de televisión
de España. Ahora son las pateras aéreas; las silenciosas pateras aéreas
Habana-Madrid, como señala hoy el periódico El País.
Claro que, evidentemente, del otro lado del Atlántico ni una sola
palabra hace alusión sobre el tema en los medios oficiales. La Mesa
Redonda que todos los días emiten la radio y la Televisión Cubana
son engendros diabólicos diseñados para "despotrincar"
sobre el "norte revuelto y brutal" y no sobre la realidad que hoy se
cierne sobre la sociedad de la Isla. El diario Juventud Rebelde, en su edición
de hoy, por ejemplo, publica en su primera página toda una apología
a la "batalla de ideas" que "libran" los estudiantes
universitarios; sin hacer alusión a que la mayoría de los balseros
aéreos o de los que intentan llegar a las costas de Miami son
precisamente universitarios o egresados de aquel sitio donde el Alma Mater un día
abrió sus brazos para "los revolucionarios".
Se sabe, sin embargo, que varios funcionarios de Inmigración y
Extranjería de Cuba, oficiales del Ministerio del Interior, agentes de la
Aduana General de la República y varios trabajadores de Cubana de Aviación
han sido detenidos en los últimos día en La Habana bajo el cargo
de "tráfico ilegal de personas". Claro que, como es de suponer,
no ha habido un pronunciamiento oficial de las autoridades cubanas.
La periodista de Havana Press (una agencia de noticias catalogada como
vocera de la CIA por el gobierno de Fidel Castro), Dorka Céspedes, emitió
un reporte desde la capital cubana donde indica que el encargado de tramitar los
vuelos chárter y cobrar las estadías en Cuba se las agenciaba para
dar preferencia a los pasajeros que le pagaban 8 mil dólares en los
vuelos con destino a Europa.
Sin duda alguna, la corrupción no tiene ya que hueso calar en el seno
de los militantes del Partido Comunista de Cuba porque, como es de suponer,
todos los que están detrás de las maniobras de salida "legal"
del país, son militantes que, cuando el dinero corre, la filiación
política desaparece.
Aunque algunos rumores no descartan la implicación de las autoridades
cubanas en todo este tráfico de personas desesperadas y hasta suenan
nombres como el de Javier Leal Estevanez, residente en Barcelona e hijo de
Eusebio Leal Spengler, historiador de la Ciudad.
Claro que este artículo no pretende mencionar nombres de personas
supuestamente implicadas porque a fin de cuentas, no nos extrañaría
que el gobierno cubano luego tienda a lavarse las manos como Poncio Pilatos tal
y como hizo hace unos años al explotar el escándalo de Ochoa y
Tony de la Guardia. En esos casos, el paredón de fusilamiento se impone
para que prime el silencio.
¿Pondrá el Gobierno español restricciones para frenar el éxodo
de cubanos que se quedan en Madrid en el supuesto viaje La Habana-Moscú? ¿Serán
las autoridades cubanas quienes decidan cerrar "el grifo"?
Personalmente no me creo ni lo uno ni lo otro.
Por un lado, a España –que ahora ostenta la presidencia de la
Unión Europea- le viene bien "cierta solidaridad" con los
balseros aéreos para demostrar lo que tantas veces intentó decirle
Aznar al propio Fidel Castro de que los cubanos huyen por un problema económico
y un problema político.
Por otro lado, a la asfixiada economía de Fidel Castro no le vienen
mal unos dólares de más.
Pero, como no son tiempos de profetas, si uno u otro bando decide poner coto
a esta nueva añoranza de "viajar a Moscú"; pues ni uno
ni otro bando podrá, eso sí, detener el éxodo de cubanos.
En pateras aéreas o en balsas, como dice una popular canción de
los Van Van, la isla o La Habana, no aguanta más.
Que nadie se extrañe. Si un día se cierra el grifo de las
pateras aéreas, ver hecha la realidad del delirio de Reynaldo Arenas de
imaginar a los cubanos escapando hasta en un globo, como Matías Pérez.
Pero la tradición de unas vacaciones a Moscú no puede romperse.
Nada, que los cubanos no perdemos la costumbre aunque ya no haya caviar y se
vuele en Air Europe.
Guillermo Morales Catá es un periodista cubano que hasta el 2001
trabajó como presentador y realizador de programas en el noticiero de la
televisión oficial cubana. Dejó Cuba el pasado año y reside
en la actualidad en Barcelona, donde ha solicitado asilo.
Más de 200 cubanos piden asilo político en Madrid
MADRID, Mar 11 (AFP) - Lunes 11 de mar - Un grupo de doscientos diez
ciudadanos cubanos se encuentran en la sala de Deportados y Peticionarios de
Asilo del madrileño aeropuerto de Barajas, mientras esperan a que las
autoridades españolas resuelvan sus respectivas solicitudes de asilo político,
informaron este lunes fuentes aeroportuarias.
Los peticionarios llegaron a España durante el fin de semana, pero la
"entrada más numerosa se produjo el domingo cuando 123 solicitaron
asilo político al aterrizar en Madrid" al hacer escala en la capital
de España un avión procedente de La Habana con destino a Moscú,
según las mismas fuentes.
"Llegué ayer a Madrid junto a más de cien compañeros",
dijo uno de los cubanos solicitantes de asilo, en la mayoría de los casos
"por motivos económicos".Se trata de la mayor llegada de
demandantes de asilo desde que el pasado 30 de diciembre pidieron asilo en
Madrid otro grupo de 100 cubanos, según las fuentes del aeropuerto
madrileño.
"En la sala 3 (como se conoce a la sala donde aguardan los
peticionarios de asilo) somos más de 200 y, como no hay camas para todos,
nos han puesto colchones", explicó el mismo ciudadano cubano, quien
aseguró que "estamos muy bien porque aquí el trato es muy
bueno".
Sin embargo, la masiva llegada del fin de semana ha obligado a las
autoridades aeroportuarias a buscar otra dependencia para alojar a todos los
demandantes de asilo, ya que la sala 3 sólo tiene capacidad para unas 100
personas.
La sala está dotada con varias habitaciones con literas, duchas y
todos los servicios necesarios para atender a los peticionarios de asilo, que
son atendidos desde febrero de 2000 por cuatro asistentes sociales.
Estos funcionarios tratan de solucionar las necesidades que puedan tener las
personas confinadas en la sala 3, les hacen algunas compras y recados y les
cambian divisas. | 
