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Prisiones
en Cuba
Malviven en
condiciones inhumanas los reclusos en la cárcel provincial de Holguín
HOLGUIN, 8 de febrero (Juan Carlos Garcell, APLO / www.cubanet.org) - Los
reclusos confinados en la cárcel provincial de Holguín malviven en
condiciones inhumanas, denunció el Movimiento de Resistencia Cívica
Pedro Luis Boitel.
La denuncia, basada en una nota que esta organización recibió
del Presidio Político en esa penitenciaría, precisa que los
prisioneros están hacinados en celdas cuya área no cumple los
requerimientos establecidos por las Reglas Mínimas para el Tratamiento de
los Reclusos de la ONU, en las cuales muchos prisioneros tienen que dormir en el
piso por falta de camas y se exponen a las emanaciones pestilentes de los baños
sin servicio regular de agua.
"Las planchas de bagazo (prensado) de caña (de azúcar)
usadas como bastidores para los colchones (generalmente confeccionados con la
yerba llamada malangueta) son desviadas para usarlas en la construcción
de muebles destinados a los oficiales de mayor rango" -se lee en uno de los
párrafos del escrito del Presidio Político.
El despacho, sacado clandestinamente de la instalación penitenciaria,
señala que la alimentación que reciben los encarcelados es
deficiente. "El arroz es sustituido por harina de maíz, los potajes
que se confeccionan son ricos en gorgojos y gusanos pero en ellos escasean los
frijoles, los llamados platos fuertes (generalmente pescado) están en
estado de putrefacción" -aseguran los integrantes del Presidio Político
en su escrito.
Prisioneros políticos que se han quejado de los atropellos a que está
expuesta la población penal, como Eduardo Galván e Ismael Herrera,
son agredidos verbal y físicamente por reclusos comunes que colaboran a
través del Trabajo Operativo Secreto (TOS) con los representantes de la
policía política en la cárcel holguinera. La finalidad de
estas agresiones es coaccionarlos para que dejen de sacar informaciones del
penal.
Respecto a la atención médica de los confinados, el informe
del Presidio Político revela que al prisionero político Guillermo
Rojas Sánchez lo mantienen aislado en una pequeña celda y le
niegan el cambio de régimen al de menor severidad, a pesar de que ya le
corresponde por ley y de padecer de lesiones en la boca. Los medicamentos que
requiere este prisionero no le son suministrados en la cárcel, sino que
se los trae su familia desde la capital cubana, distante a unos 800 kilómetros
de esta provincia.
También sin medicinas y sin el cuidado de un especialista se
encuentra en el puesto médico del penal el preso político José
Luis Castro Aguilar, que tiene graves problemas cardíacos. A Castro,
aprovechándose de su mal estado físico, le roban las pocas
pertenencias que tiene consigo y la dirección del penal le suspende
visitas y no le concede la licencia extrapenal que la ley prescribe para estos
casos.
La denuncia del Presidio Político concluye exponiendo que el recluso
Eduardo Galbán Reyes, que es ciego y contrajo tuberculosis en la cárcel,
ahora sufre fuertes dolores en la región toráxica y falta de aire.
La situación legal de Galbán no ha sido definida por la Dirección
Nacional de Cárceles y Prisiones del Ministerio del Interior, entidad que
no precisa exactamente cuánto tiempo deberá estar encerrado este
prisionero.
Esta información ha sido transmitida por teléfono,
ya que el gobierno de Cuba no permite al ciudadano cubano acceso privado a
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