Publicado el lunes, 27 de septiembre de 2001 en
El Nuevo Herald
Detienen a sueco acusado de tráfico de inmigrantes
Agence France Presse. La Habana
Un sueco radicado en Estados Unidos fue detenido en Cuba por ingreso ilegal
al país con intención de realizar tráfico de personas,
indicó ayer el diario Granma.
Clases Eric Jarneberg, de 56 años, fue detenido en el Mariel (50 km
al oeste de La Habana) cuando piloteaba una balsa inflable con motor fuera de
borda. Jarneberg argumentó que se había extraviado en su ruta
hacia la Marina Hemingway, en La Habana, donde debía encontrase con unos
amigos.
Pero según Granma, su declaración resultó refutada
cuando las autoridades detuvieron ese mismo día a ocho personas en Bahía
Honda, Pinar del Río, que presuntamente lo esperaban en la costa para
embarcarse ilegalmente hacia Estados Unidos.
Jarneberg explicó entonces que vino a Cuba por primera vez en 1995,
donde conoció a su esposa, Magalys Rodríguez Vázquez. La
pareja se instaló luego en Florida, donde el hombre manejaba un taxi.
El 16 de agosto de este año Jarneberg regresó a Cuba por vía
aérea y entregó un walkie-talkie a uno de los familiares, con
quien planificó la operación de salida para septiembre, prosigue
el informe del diario oficial cubano.
Según Granma, el sueco se dijo "arrepentido'' y afirmó
que actuó instado por una amiga de su esposa, quien le prometió
entregarle $3,000 dólares al regreso.
Inalterable la política de EU hacia Cuba
Wilfredo Cancio Isla. El Nuevo Herald
Estados Unidos está siguiendo con mucha atención la situación
actual en Cuba y mantendrá inalterable su política respecto a una
posible normalización de las relaciones con el gobierno de la isla, afirmó
en Miami un alto funcionario de la Casa Blanca.
"Hay una discusión muy viva sobre Cuba dentro del gobierno de
Estados Unidos, pero nuestra política continuará regida al pie de
la letra por las legislaciones establecidas en el Congreso para propiciar
cambios democráticos en la isla'', manifestó Lino Gutiérrez,
subsecretario de Estado para Asuntos Latinoamericanos.
Interrogado sobre los planes de Washington ante una eventual transición
en Cuba, el funcionario enfatizó que la administración
norteamericana se conducirá en atención a la Ley para la
Democracia de Cuba (Ley Torricelli, 1992) y la Ley de Libertad y Solidaridad
Democrática con Cuba (Helms-Burton, 1996), que han fijado las condiciones
bajo las cuales se produciría un cambio de política.
"Mientras, seguiremos condenando las violaciones de derechos humanos en
Cuba y el anacronismo que se llama Fidel Castro'', dijo Gutiérrez a El
Nuevo Herald. "Ese sistema no tiene ya lugar en este hemisferio''.
Recordó que el presidente George W. Bush ha sido bien claro en su
intención de hacer todo lo posible para lograr una Cuba democrática
e impedir que se debilite el embargo contra el régimen castrista.
"La mejor prueba del nivel de compromiso de esta administración
con la causa de Cuba es el voto en la Comisión de Derechos Humanos de
Ginebra [abril del 2001], cuando muchos pronosticaban que el gobierno de Cuba
podía derrotar fácilmente la resolución contra ellos'', señaló
Gutiérrez, oriundo de La Habana y exiliado con su familia en 1961.
La resolución de condena a la situación de los derechos
humanos en Cuba, auspiciada por la República Checa, fue aprobada por 22 a
favor y 20 en contra, con 10 abstenciones.
Gutiérrez calificó de "extraordinario, casi
sobrehumano'', el esfuerzo desplegado por Estados Unidos para que fuera aprobada
la resolución contra Cuba.
"El esfuerzo del secretario [de Estado] Colin Powell y del presidente
Bush fue algo verdaderamente notable'', apuntó.
Con relación a la política migratoria hacia Cuba, Gutiérrez
defendió la aplicación de los acuerdos bilaterales firmados en
1995 entre Washington y La Habana.
"Esa decisión fue tomada por el gobierno de Estados Unidos y es
la ley que rige nuestras relaciones actuales con Cuba'', indicó.
Dijo también que la Sección de Intereses de Estados Unidos en
La Habana monitorea la situación para asegurarse de que no existe
persecución política contra las personas que son interceptadas en
el mar y retornadas a la isla por las autoridades norteamericanas.
"Si en algún momento cambian las circunstancias, pues nosotros
revisaremos la política [migratoria]'', dijo. "Pero por el momento
esa es la ley y continuaremos aplicándola''.
Un agente del INS denuncia hostigamiento
Wilfredo Cancio Isla. El Nuevo Herald
El agente especial Rick Ramírez, integrante del operativo federal que
sacó al niño Elián González de La Pequeña
Habana, denunció ayer que funcionarios del Servicio de Inmigración
y Naturalización (INS) han continuado ordenando actos de hostigamiento y
persecución contra él.
En una declaración escrita presentada ante el magistrado Ted E.
Bandstra, Ramírez relató sucesos recientes que vinculan a
investigadores de la oficina local del INS con presuntas acciones
intimidatorias.
La oficina del INS en Miami declinó ayer hacer comentarios, alegando
que se trata de un caso pendiente.
Ramírez, de 41 años y de origen mexicano, es el centro de una
demanda por $25 millones contra la ex Secretaria de Justicia Janet Reno y otros
ex funcionarios del gobierno, en la que alega "manifestaciones racistas y
antihispanas'' durante la llamada Operación Reunión, el 22 de
abril del 2000.
La demanda --entablada a comienzos de este año en un tribunal federal
de Miami-- fue inmediatamente contarrestada por una moción del
Departamento de Justicia para desestimar el caso.
El juez Bandstra decidirá la próxima semana si le da luz verde
a la demanda para iniciar un proceso judicial o si la desestima. Una audiencia
preliminar fijada para la semana entrante fue postergada.
De acuerdo con el testimonio escrito, el pasado 27 de julio Ramírez
fue obligado a entrevistarse con un agente de la Oficina de Auditoría
Interna (OIA), bajo órdenes directas del jefe de Sección del INS,
Mario Cavallo, y ofrecer declaraciones frente a una grabadora.
"Le dije [al agente McIntosh] que ya había hecho mi declaración
y que no hablaría para una grabación, porque era innecesario'',
expresó Ramírez en un texto de cinco páginas, en el que
responsabiliza de esta acción a James D. Goldman, director adjunto de
Investigaciones del INS en Miami.
Otro de los presuntos actos intimidatorios que figuran en el documento se
refiere al ocurrido el pasado 10 de septiembre, cuando Ramírez asegura
que fue seguido hasta su casa, en Davie, por un vehículo conducido por un
agente especial.
"Me siento agredido, intimidado, hostigado y asediado por esta acción'',
escribió Ramírez. "Ser seguido después del horario de
trabajo por un vehículo extraño es la peor manera de amenaza e
intimidación, y me ha hecho sentir miedo por mi vida''.
Durante la audiencia de ayer, el abogado William Rivera, que representa al
Departamento de Justicia, desestimó las alegaciones de Ramírez e
insistió en que "no existen violaciones de derechos constitucionales
en este caso''.
En representación del demandante, el abogado Larry Klayman propuso
que se concediera un plazo de 45 días para concluir con la investigación
del caso.
Klayman, director ejecutivo de la organización Judicial Watch, rechazó
que la demanda de Ramírez se tratara de una "simple disputa
laboral'', y responsabilizó a la ex comisionada del INS, Doris Meissner,
con la orden de destruir documentos relativos al operativo que reunió a
Elián con su padre en Washington.
Costa Rica otorgará refugio a balseros
Servicios De ENH. San Jose
Costa Rica dará refugio a los 25 balseros cubanos que atracaron la
noche del lunes en la costa atlántica de este país, informó
el ministro de Seguridad, Rogelio Ramos.
"Sin mayor problema van a permanecer en este país. Es una
situación humanitaria. Se trata de cuatro núcleos familiares que
salieron de Cuba por la falta de libertad que se vive, arriesgando incluso sus
vidas'', dijo Ramos ayer miércoles al programa radial Nuestra Voz.
Las autoridades de Migración entrevistaron el martes a los cubanos y
según el director de la entidad, Eduardo Vílchez, la resolución
estará lista en unos ocho días.
La llegada del grupo no representa una ola migratoria
Mientras tanto, la colonia cubana en Costa Rica se encargó de
trasladar hasta San José a los balseros, donde permanecerán en un
albergue mientras los ubican en algunas residencias.
Tanto Ramos como Vílchez manifestaron que la llegada de este grupo no
representa una "avalancha migratoria''. Para Ramos, la travesía marítima
es muy dura. "No cualquiera la puede hacer'', destacó.
Los balseros, entre ellos seis niños, son originarios de Santa Cruz,
en Camagüey. Zarparon en una embarcación pesquera el 12 de
septiembre y el lunes anterior alcanzaron el puerto costarricense de Limón,
a unos 140 kilómetros al sureste de la capital.
Este es el segundo grupo de balseros que llega a Costa Rica en lo que va del
año. En enero otro grupo de 21 cubanos arribó también en
una embarcación pesquera. |