Publicado el lunes, 26 de septiembre de 2001 en
El Nuevo Herald
Ciudadano sueco detenido en Cuba, acusado de entrada ilegal
LA HABANA -- (AP) -- Un ciudadano sueco fue detenido y acusado de entrar
ilegalmente al país, en un aparente intento de sacar de la isla a
familiares de su esposa cubana, según se reveló este miércoles.
Una nota del oficial diario Granma indicó que Claes Eric Jarneberg,
de 56 años, fue detenido el pasado 4 de septiembre en el puerto de
Mariel, al oeste de La Habana.
El diario aseguró que Jarneberg ha sido visitado por representantes
de la embajada de Suecia en Cuba, entre ellos el segundo secretario de esa sede
diplomática. Sin embargo, Granma no ofreció detalles sobre los
cargos ni el lugar de detención.
En el pasado, Cuba ha reportado la detención de cubanos por intentos
ilegales de entrada o salida del país, pero el de Jarneberg fue el
primero en involucrar a un extranjero en tiempos recientes.
Jarneberg, natural de Estocolmo y residente en Santa Bárbara, en la
Florida, fue detenido "por haber entrado ilegalmente a nuestro país,
sin ninguna identificación o documento personal, en una balsa inflable,
modelo Sakera, matrícula FL 6587 MB, con motor fuera de borda y capacidad
para 8 personas'', dijo Granma.
De acuerdo a la versión de Granma, al ser detenido Jarneberg dijo a
las autoridades cubanas que se había extraviado en su travesía marítima,
pues se dirigía hacia una marina en La Habana para luego visitar a unos
amigos, y que había dejado sus documentos personales en la Florida.
Jarneberg, un conductor de taxi en la Florida, vino a Cuba en 1995 y conoció
a Magalys Rodríguez, con quien se casó en un segundo viaje a la
isla en 1996, dijo Granma. El diario agregó que Jarneberg se llevó
a Rodríguez y sus dos hijos pequeños a Estados Unidos en 1999.
La pareja y los niños regresaron a Cuba en junio del 2000, cuando
visitaron a familiares de Rodríguez en Las Tunas, una provincia al
oriente de la isla, aseguró Granma. El diario dijo que el mismo día
de la detención del ciudadano sueco, en Las Tunas fueron capturadas otras
ocho personas, parientes de la esposa de Jarneberg.
Costa Rica dará refugio a balseros cubanos
SAN JOSE -- (AP) -- Costa Rica dará refugio a los 25 balseros cubanos
que atracaron la noche del lunes en la costa atlántica de este país,
informó el ministro de Seguridad, Rogelio Ramos.
"Sin mayor problema van a permanecer en este país (...) es una
situación humanitaria, se trata de cuatro núcleos familiares que
salieron de Cuba por la falta de libertad que se vive, arriesgando incluso sus
vidas'', dijo Ramos este miércoles al programa radial Nuestra Voz.
Las autoridades de Migración entrevistaron el martes a los cubanos y
según el director de la entidad, Eduardo Vílchez, la resolución
estará lista en unos ocho días.
Mientras tanto, la colonia cubana en Costa Rica se encargó de
trasladar hasta San José a los balseros, donde permanecerán en un
albergue mientras los ubican en algunas residencias.
Tanto Ramos como Vílchez manifestaron que la llegada de este grupo no
representa una "avalancha migratoria''. Para Ramos, la travesía marítima
es muy dura, "no cualquiera la puede hacer'', destacó.
Los balseros, entre ellos seis niños, son originarios de Santa Cruz
de Camaguey. Zarparon en una embarcación pesquera el 12 de setiembre y el
lunes anterior alcanzaron el puerto costarricense de Limón, a unos 140
kilómetros al sureste de la capital.
Este es el segundo grupo de balseros que llega a Costa Rica en lo que va del
año. En enero otro grupo de 21 cubanos arribó también en
una embarcación pesquera. Ellos recibieron en marzo el asilo político.
Arresto de espía abre grietas en la imagen de Cuba
Pablo Alfonso. El Nuevo Herald
El arresto de la supuesta espía cubana en el Pentágono deja al
desnudo la pretendida inocencia del régimen castrista, tan pregonada por
la propaganda oficial de La Habana.
De igual forma es una prueba de la candidez con que algunos políticos
y jefes militares norteamericanos han juzgado en los últimos meses al régimen
de Fidel Castro.
Pero donde el arresto de Ana Belén Montes tendrá mayor
repercusión inmediata será, sin duda alguna, en los argumentos
esgrimidos hasta ahora por La Habana y sus representantes en el exterior, para
defender la presencia en Miami de su red de agentes, encontrados culpables de
espiar para Cuba.
La propaganda oficial castrista ha repetido hasta el cansancio que Cuba no
tenía interés ninguno en espiar objetivos militares
norteamericanos. La Habana juraba y perjuraba que los planes militares
norteamericanos, sus instalaciones y unidades militares no estaban en la mira de
sus objetivos de inteligencia.
De hecho, ese fue el argumento central esgrimido por la defensa durante el
juicio seguido en Miami a los agentes castristas pertenecientes a la denominada
Red Avispa, desarticulada por el FBI.
Los espías cubanos detenidos en Miami tenían como única
misión infiltrarse en las organizaciones del exilio y vigilar de cerca
sus movimientos, aseguraba La Habana.
Sin embargo, tras el arresto de Montes, principal analista de asuntos
militares cubanos en el Pentágono, seguramente que el régimen
castrista tendrá que replantear sus argumentos.
Pienso que no será el único. Incautos y corifeos del régimen,
que han defendido esos argumentos, tendrán que hacer lo mismo.
Montes ocupaba una situación privilegiada en el Pentágono. No
era una burócrata cualquiera. Su supuesto espionaje en favor de Cuba no
es una reminiscencia de la Guerra Fría, cuando Cuba estaba alineada
militarmente con la Unión Soviética. De acuerdo con las
acusaciones del FBI, Montes comenzó a trabajar para los servicios
secretos cubanos aproximadamente en 1996, cuatro años después de
desaparecida la URSS.
La declaración jurada presentada por el FBI ante un tribunal de
Washington deja en claro que Montes no usaba su posición en el Pentágono
para informar a Cuba de los grupos exiliados castristas. En razón de su
cargo, "tenía acceso directo y autorizado a información
clasificada relacionada con la defensa nacional'' estadounidense, según
el FBI.
Estas son algunas de las acusaciones más relevantes en esa declaración,
que se puede encontrar completa en la página electrónica del FBI:
http://www.fbi.gov.
* Revelar a la inteligencia cubana la identidad de un oficial de
inteligencia norteamericano que se encontraba en Cuba, desde una fecha anterior
a octubre de 1996.
* Intercambio de mensajes con oficiales cubanos de inteligencia mediante
diskets de computadora, beepers y mensajes radiales.
* Uno de los beepers con los que se comunicaba Montes pertenece a la Misión
Cubana ante Naciones Unidas, en Nueva York.
* Informó a Cuba de los ejercicios militares del Comando Atlántico
de Estados Unidos, realizados en 1996.
* Reveló detalles de un denominado Programa Especial, "altamente
secreto'', relacionado con la defensa nacional de Estados Unidos en 1997.
* Advirtió a Cuba que el Pentágono tenía conocimiento
de emplazamientos militares en la isla, con sus características y
detalles.
Montes debe comparecer hoy ante un tribunal de Washington. Como lo garantiza
el estado de derecho, ella no tendrá que demostrar allí su
inocencia. Se presume inocente hasta tanto sea hallada culpable. Quizás
por eso La Habana todavía mantiene absoluto silencio sobre su arresto.
E-mail: palfonso@herald.com
Llegan a Costa Rica 25 balseros de Camagüey
En declaraciones a la televisión local, dijeron que hicieron
escala en Gran Caimán y que llevaban cuatro años planeando la fuga
Associated Press. San Jose, Costa Rica
Un grupo de 25 balseros cubanos arribaron la noche del lunes a Costa Rica
tras 12 días de una travesía que incluyó una escala en la
isla caribeña de Gran Caimán.
Los balseros llegaron en una embarcación pesquera hasta el puerto de
Limón, unos 140 kilómetros al sureste de la capital.
Se trata de un grupo familiar compuesto por seis niños, cuatro
mujeres y 15 hombres. Entre ellos hay un médico y un pastelero. El único
de los cubanos dedicado a la pesca es el capitán del barco, Ernesto
Villavivencio.
Todos son originarios de Santa Cruz, en la provincia de Camagüey.
Durante su viaje realizaron una escala en Gran Caimán, donde les dotaron
de un radio y combustible. A su llegada a Costa Rica recibieron atención
médica, y ayer iban a ser entrevistados por oficiales del Departamento de
Refugiados de la Dirección General de Migración.
El grupo llegó en buen estado de salud, aunque algunos, especialmente
los niños, están afectados por quemaduras de sol, que les serían
tratadas en el hospital de Limón, dijo un oficial de Migración.
En declaraciones a la televisión local, Villavicencio relató
que planeaban la salida desde hace cuatro años, y aprovecharon la atención
generada por los atentados en Estados Unidos para llevar a cabo el plan, a pesar
de que la policía costera cubana los siguió durante un par de
horas.
Según Villavicencio, ellos esperan que el gobierno costarricense los
acepte como refugiados y poder trabajar e integrarse a la sociedad. Aseguró
que mantuvieron contacto con otros balseros cubanos que llegaron en enero al país.
El grupo de 21 cubanos que arribó en enero también en una
embarcación pesquera recibió en marzo el asilo político.
La llegada de los cubanos en enero coincidió con la aprobación
por parte de Costa Rica de la apertura de un consulado de Cuba, con el fin de
atender a la población de isleños radicados aquí, estimada
en unas 30,000 personas.
Costa Rica rompió relaciones diplomáticas con Cuba en 1961, a
raíz del embargo impuesto por Estados Unidos al régimen de Fidel
Castro. No obstante, en 1998 abrió una oficina de intereses en la isla y
este año aprobó el consulado. |