Carmen Jiménez Diario
16 | Madrid. Martes, 30 de Octubre de 2001.
Carlos Franqui está a punto de cumplir ochenta años, vive en
Puerto Rico desde principios de los noventa y afirma que el presidente Fidel
Castro es el máximo responsable de la muerte de Camilo Cienfuegos, el mítico
revolucionario que desapareció el 28 de octubre de 1959 en el avión
que le trasladaba de Camagüey a La Habana.
La biografía de Camilo Cienfuegos (Seix Barral) de Franqui, su quinto
libro sobre Cuba, tiene el atractivo de estar escrita por una de las personas
que participó en el triunfo de la revolución cubana de 1959 y que
conoció y trató a todos los protagonistas de los acontecimientos
que expulsaron a la dictadura de Fulgencio Batista.
Tras la desaparición de Cienfuegos se produjeron cambios radicales en
la revolución, como la destitución de todos los ministros
reformistas y la entrada en Cuba de la Unión Soviética.
Franqui dirigió Radio Rebelde y el periódico Revolución
hasta que fue cesado en 1963. Caído en desgracia, salió de Cuba en
1968. No ha vuelto.
-¿Cómo ha cambiado el régimen cubano desde el derrumbe de
la URSS en 1989?
-Desgraciadamente, Cuba cambia, pero para peor. En 1989, cuando se produjo
la gran crisis por el derrumbe de la Unión Soviética, uno de los
asesores de Castro enviado por Felipe González, que era Solchaga, le
recomendó unas prácticas económicas, entre ellas
desmantelar una serie de empresas. El régimen encontró que tenía
cerca de un millón de personas sin empleo y permitió todo tipo de
trabajo por cuenta propia. Se produjo un desarrollo bastante grande, a partir de
las carencias que había, pero después se empezó a reprimir
y casi se ha vuelto a la situación anterior.
-Su libro acusa a Fidel Castro de la muerte de Cienfuegos.
-Castro es el responsable de la desaparición de Camilo, como es el
responsable de todo lo que ha pasado en Cuba durante los últimos 41 años.
En Cuba no se ha hecho nada sin que Fidel Castro lo sepa, lo ordene o esté
de acuerdo.
-¿Qué elementos aporta su libro sobre los últimos días
de Camilo Cienfuegos?
-Cuando Camilo desaparece en el año 59 todo el mundo creía en
Cuba en la palabra de Fidel Castro. Nadie puso en duda que la desaparición
de Camilo en un avión fuese un accidente. He realizado una investigación
durante muchos años, he estudiado documentos. Camilo partió del
aeropuerto militar de Camagüey a las seis y un minuto del 28 de octubre con
un piloto llamado Fariñas en un avión Cessna de dos motores, que
debía llegar a La Habana dos horas y media despúes. El avión
desapareció. Camilo era entonces jefe del Ejército revolucionario.
Hay grandes contradicciones que avalan la idea de que hubo un acto de sabotaje.
-¿Por qué iba a deshacerse Castro de uno de lo personajes más
populares de la revolución?
-La revolución cubana se hizo como una revolución libertaria,
democrática, reformista, pero no comunista. En ella participaron desde
los sectores más radicales a otros más moderados, pero el espíritu
no era comunista. Un hombre como Camilo, humanista, que gozaba de una enorme
popularidad, al que nunca le gustó el poder, era muy peligroso para
Castro.
-¿Era Cienfuegos un estorbo para la orientación comunista del régimen?
-El pueblo cubano era muy crítico con el Partido Comunista. En los
primeros meses del año 59, tras el triunfo de la revolución, los
principales comandantes, ministros y dirigentes obreros eran nacionalistas,
incluso radicales y hasta socialistas, pero no comunistas. Toda esta gente, de
una forma u otra, empezó a ser eliminada a partir de la desaparición
de Cienfuegos. Algunos incluso poco antes: o cayeron en desgracia o fueron a
prisión o se exiliaron o incluso fueron fusilados. Fue entonces cuando la
revolución se convierte en comunista.
-¿Tenía celos Castro de la popularidad de Cienfuegos?
-Camilo era un habanero típico. Fiestero, inquieto y aventurero. Hijo
de humildes emigrantes españoles, era muy querido por el pueblo. Fue el
primer revolucionario que entró en La Habana. Su popularidad creció
tanto que en su último acto público, el 26 de octubre de 1959, dos
días antes de desaparecer, al llegar frente al Palacio Presidencial de La
Habana, la multitud estalló en una larga ovación, mayor que la
otorgada a Fidel Castro. Camilo observó la cara seria de Castro y para
quitar hierro a la situación y tranquilizar a Fidel dijo: «Ésta
no es una ovación al comandante Camilo Cienfuegos, ésta es una
ovación a la revolución». Castro temía un excesivo
encumbramiento de Camilo, que representaba la opción humanista de la
revolución.
-¿Qué pasó con los hombres que lucharon con Camilo?
-Existen una serie de acontecimientos muy llamativos. En junio del año
59, la columna de Camilo, casi toda, fue enviada a una expedición a Santo
Domingo contra Trujillo. Prácticamente allí los mataron a todos.
Los jefes que lucharon con Camilo en la revolución fueron dispersados en
diferentes lugares de Cuba menos importantes. El 16 de octubre del 59, doce días
antes de la desaparición de Camilo, Raúl Castro fue nombrado jefe
de las Fuerzas Armadas. Camilo, que era jefe del Ejército Rebelde, quedó
subordinado a Raúl. La pugna contra Cienfuegos viene sobre todo por parte
de Raúl Castro.
-¿Por qué involucra al presidente cubano en esta muerte?
-Según Fidel Castro, en sus declaraciones publicadas tras la
desaparición de Camilo, él no se enteró hasta 24 horas
después, es decir, el día 29 pasadas las cinco de la tarde más
o menos. Pero el periódico Revolución que yo dirigía publicó
el primer parte que envió el Ejército, que recibimos esa noche del
29 de octubre y que salió el día anterior. Hay una cosa muy
sorpredente en este parte. Porque mientras Fidel Castro dice que no se sabía
nada de la suerte de Camilo a esa hora, el parte dice que la búsqueda que
se hizo ese día fue infructuosa. Esta es una de las contradicciones. Hay
otras sorprendentes, como la omisión del piloto de un avión
militar que salió de Camagüey casi a la misma hora que Camilo y que
se suponía que iba en misión contra una avioneta que venía
de EE UU.
-¿Ve posible un cambio democrático en Cuba?
-No.
-Qué ocurrirá cuando desaparezca Fidel Castro?
-Actualmente todos los poderes están en manos de Raúl Castro.
El problema es que hay una gran antipatía contra él. Raúl
ha hablado tres o cuatro veces de hacer cambios económicos, pero no creo
que haga cambios políticos. Lo que haría sería aplicar a
Cuba la vía china.
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