CUBANET... INTERNACIONAL

Noviembre 7, 2001



Después del Michelle ¿qué pasará en Cuba?

Cuba Nueva. Comentario. 07 noviembre, 2001. Actualizado: 13:21 hora de Cuba.

Barcelona, 7 nov. (Cubanueva.com) – Aunque el gobierno cubano aún no ha dicho oficialmente cuan grande han sido las perdidas materiales que ha dejado a su paso el mayor huracán que ha azotado la isla en más de 50 años, es evidente, según los corresponsales extranjeros, los periodistas independientes y los expertos, que los daños son tan grandes que la pregunta que nos tenemos que hacer hoy es simple: ¿qué pasará ahora?

Evidentemente que el régimen de Fidel Castro ha adoptado la misma posición que ha adoptado Fidel Castro en sus últimas comparecencias ante la televisión antes del ciclón: aquí no pasa nada y nosotros nos bastamos solitos para resolver el problema.

Castro y su gobierno se esfuerzan para hacer creer a la población, y al mundo, que la crisis económica que atraviesa Cuba, la más difícil después del derrumbe de la Unión Soviética y del comunismo en Europa, no es tan grave como piensan, y que Cuba se recuperará pronto, incluso ahora con este huracán, que ya antes que terminara de arrasar con Cuba, estaban diciendo que era mucho menos de lo que se esperaba.

Ayer martes, Fidel Castro llegó incluso a asegurar que Cuba tiene las reservas necesarias para enfrentarse a catástrofes producidas por el huracán Michelle.

"Ni la crisis económica mundial ni los efectos del huracán detendrán la marcha de los múltiples programas sociales emprendidos", aseguró Castro en Cienfuegos, a unos 250 kilómetros al este de La Habana.

Castro agregó en esa arenga que "Aquí no existe el caos" y enfatizó que "Estamos preparados y sabremos defender cada centavo de ingreso al país, y utilizarlo de la forma más óptima".

La prensa oficial controlada, la radio y la televisión en Cuba como es costumbre, enfatiza y repite día y noche las palabras del "Comandante en Jefe". "Aquí no existe el caos".

En su edición del miércoles el diario Granma escribe: "Colosal esfuerzo para acelerar la recuperación" y continúa más adelante: "Apenas dos días después del paso del huracán Michelle por el territorio nacional, el país vuelve a dar otro ejemplo de unidad y fortaleza y decenas de miles de sus trabajadores, apoyados por la población, se han volcado con toda su energía a las tareas de recuperación para que todo el mundo tenga agua, electricidad, transporte y otros servicios básicos, tan pronto como sea posible".

Pero a pesar de las arengas, la situación es bien diferente. Reina el dolor y la desolación. La prolongada falta de electricidad en prácticamente toda Cuba significa además que las reservas de comida congelada del país se han echado a perder, los hospitales están sin funcionar, no hay agua potable y tampoco gas para cocinar. Hasta ahora no se ha dicho nada de que el gobierno haya repartido raciones de comida a la población en las áreas más afectadas. ¡Ni una lata de leche condensada!

Para el lector avisado hasta el propio Granma tiene que reconocer a pesar de las arengas de los titulares, que la situación es terrible "Según reportes del Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil, los esfuerzos se concentran en reparar con la máxima celeridad las complejas averías sufridas por las líneas eléctricas, las mayores registradas en nuestra historia de acuerdo con el criterio de los especialistas del MINBAS". "Los daños en el sistema electro energético son severos y todavía es imposible adelantar cuándo quedarán resueltos definitivamente, agrega el Granma.

Y ahora viene lo peor: A los que le devuelvan el servicio eléctrico tendrán que conformarse con unas pocas horas al día, con muy pocas. Así escribe el órgano del Partido Comunista de Cuba: "los consumidores del sistema occidental (Pinar del Río, las 2 provincias habaneras y Matanzas) que vayan disponiendo del servicio deben tomar medidas excepcionales de empleo racional y ahorro de electricidad".

Con frases como "La electricidad no se ve, pero se siente", sacadas al parecer de algún programa esotérico de la televisión española, Ventura de Jesús (vaya lo acertado del nombre del autor del artículo) de la redacción del Granma, trata de recordar a sus lectores lo importante que es la electricidad, como si nadie se hubiera dado cuenta a estar alturas después de tantos años de apagones y ahora sin electricidad en prácticamente todo el territorio nacional.

Siempre en su tono militarista el Granma explica como la zona de Martí en Matanzas, que todavía está prácticamente aislada. "Todavía se pelea contra los efectos primeros del huracán".

El autor del artículo, sin tener en cuenta la verdadera y estremecedora realidad de los habitantes de esa zona matancera escribe festivamente: "Una imagen curiosa era observar a los vecinos pescando en el portal de sus propias casas". Claro, ¿que iban hacer? Si no hay comida y las inundaciones han destruido los almacenes de comida y no hay electricidad y no han recibido ninguna ayuda de alimentos y medicinas, ¿que van hacer? ¡COMER LO QUE PUEDAN!

Otro artículo, esta vez del Juventud Rebelde, parece sacado de una revista religiosa: "Poco a poco se hará la luz". El órgano de la Juventud Comunista citando, al propio "señor de la luz en Cuba", Leandro Matos, director de la Unión Eléctrica del Ministerio de la Industria Básica (MINBAS), explica que en los territorios matancero, villaclareño y cienfueguero el huracán Michelle provocó la destrucción total de circuitos y la avería de cientos de postes de madera y de hormigón, y por eso allí se labora con la misma intensidad que en el caso de la capital del país.

Y mientras los "periodistas" oficialistas del Granma, Juventud Rebelde, o de la radio o la televisión cubana, para solo citar a los más importantes de los medios controlados en Cuba, se dedican a sus ejercicios literarios, en espera que el "Máximo Líder" les cuente lo que ha pasado, en lugar de ir al lugar de los hechos e informar como verdaderos periodistas de cuan grandes son los daños de este huracán, el pueblo de Cuba no tiene esperanzas de que les llegue la ayuda que tanto necesitan.

Los periodistas independientes, por otro lado, dan una visión completamente diferente de lo que sucede en Cuba. Miriam Leiva escribe por ejemplo que "La población de Ciudad Habana se lanzó a las calles el sábado 3 de noviembre en búsqueda de alimentos, ante la inminente llegada del huracán Michelle. En cualquier país reacción similar es normal, pero en Cuba se complica porque los productos básicos están racionados y la población cada día posee menos dinero para adquirir lo elemental".

La periodista independiente escribe sobre la total ausencia de información en los medios públicos sobre los efectos del Michelle y se pregunta: "Cabe preguntarse ¿por qué esta ausencia de información? Se sabe que los daños tienen que ser enormes debido al paso de un ciclón tan poderoso. Claro está, en Cuba, la situación se complica por el mal estado de las construcciones". "Sería más fructífero y considerado con la población mostrar lo acontecido e incluso ello permitiría a la opinión pública internacional conocer la magnitud de la tragedia del pueblo cubano, a fin de propiciar la solidaridad y la ayuda correspondientes", escribe Miriam Leiva.

Los chinos han dado 120.000 dólares en metálico y el resto de 600.000 en mercancías, declaró el presidente del Parlamento chino Li Peng y Hugo Chávez

anunció este martes el envío de ayuda humanitaria a Cuba, para colaborar con los miles de afectados por el paso del huracán Michelle en la isla caribeña.

Chávez y Castro se envían de vez en cuando esos aviones con medicinas y alimentos, esperamos que no sean los mismos que les envío Castro hace solo unos meses.

El problema de la ayuda a Cuba es que el gobierno de Fidel Castro no acepta ayuda humanitaria de las organizaciones internacionales. Ellos solo aceptan la ayuda a través del Estado o de las organizaciones "de masas" como los CDR, las FMC, etc.

Todo el mundo sabe, y en específico las organizaciones internacionales de ayuda que el régimen utiliza la ayuda que se envía para vender después en las tiendas de dólares. Así ha sido hasta ahora y eso lo saben muy bien los cubanos.

Entonces, ¿qué hacer? El pueblo de Cuba necesita ayuda, pero no el régimen de Castro. ¿Cómo canalizar la ayuda para que llegue realmente a los necesitados y no sirva para darle artificialmente más vida al régimen?

¿Qué piensa la oposición moderada, no permitida pero tolerada?. ¿Es hora de hacer un llamado público para crear un grupo conjunto de la oposición y el gobierno para repartir la ayuda que podría llegar a Cuba, principalmente de Miami y quizás del propio gobierno de Estados Unidos?

¿Hasta cuando podrán soportar los cubanos esta situación?

Castro y su gobierno deben y tiene la responsabilidad de actuar rápidamente para evitar la catástrofe, la hambruna y las enfermedades. ¡Es hora de actuar inmediatamente!

Copyright © 1998-2001 Cubanueva.com

[ TITULARES ] [ CENTRO ]

Noticias por e-mail

La Tienda - Libros , posters, camisetas, gorras

In Association with Amazon.com

Busque:


BUSQUEDA

Búsqueda avanzada


SECCIONES

NOTICIAS
Prensa Independiente
Prensa Internacional
Prensa Gubernamental

OTROS IDIOMAS
Inglés
Aemán
Francés

SOCIEDAD CIVIL
Introducción
Cooperativas Agrícolas
Movimiento Sindical
Bibliotecas
MCL
Fraternidad de Ciegos
Seguidores de Cristo
Estudios Sociales

DEL LECTOR
Cartas
Debate
Opinión

BUSQUEDAS
Archivos
Búsquedas
Documentos
Enlaces

CULTURA
Artes Plásticas
Fotos de Cuba
Anillas de Tabaco

CUBANET
Semanario
Quiénes Somos
Informe anual
Correo Electrónico


CubaNet News, Inc.
145 Madeira Ave, Suite 207
Coral Gables, FL 33134
(305) 774-1887