Yupi Internet. Mayo 21, 2'001
Exigen libertad de presos políticos ante embajada cubana
Varsovia, 21 may (EFE).- Varias decenas de polacos y cubanos se manifestaron
hoy ante la embajada de Cuba en Varsovia para exigir la excarcelación de
los presos políticos en la isla caribeña, que cifran en más
de 600.
"Aunque Amnistía Internacional afirma que en Cuba hay 350 presos
de conciencia, nosotros sabemos que la cifra real supera los 600 y exigimos el
fin de su persecución", declaró a EFE Javier de Céspedes,
presidente del Directorio Revolucionario Democrático Cubano con sede en
Florida (Estados Unidos).
"La manifestación de Varsovia forma parte de una campaña
que hemos lanzado en Europa y América Latina a favor de nuestros compañeros
encarcelados por el régimen cubano", añadió De Céspedes.
Por su parte, Malgorzata Naimska, representante del Instituto en defensa de
la Democracia en Europa del Este, coorganizadora de la protesta, señaló
que "hasta hace prácticamente muy poco nuestro país también
estuvo gobernado como Cuba, sin libertad y con el racionamiento de todos los
productos".
Naimska puso de relieve que, si hoy Polonia es un país en el que
todos pueden decir lo que piensan y a nadie se le persigue por sus ideas es
gracias a la abolición del sistema comunista.
De Céspedes comentó: "Nosotros advertimos cómo de
año en año crece la actividad democrática de la sociedad
cubana, cómo se forma, poco a poco, el estado democrático
paralelo, independiente de las estructuras del régimen".
Más de 400 acciones de protesta contra el régimen cubano se
llevaron a cabo el pasado año, mientras que en 1997, cuando comenzó
el movimiento a mayor escala, se registraron sólo 47, añadió.
De Céspedes aseveró: "apoyamos la vía pacífica,
sin violencia, y somos conscientes de que el ejemplo dado por los países
de Europa del Este y, sobre todo, por el sindicato (polaco) Solidaridad nos
sirve de gran inspiración".
En los próximos días manifestaciones similares serán
organizadas en varios países de Europa, entre ellos Rumanía y
Hungría, avanzó el opositor cubano. EFE rlz-GT-wm/rml
Joan Manuel Serrat se reencuentra con La Habana
La Habana, 19 may (EFE).- El cantautor español Joan Manuel Serrat fue
recibido por el público cubano en un teatro abarrotado, después de
cuatro años de ausencia, en un reencuentro marcado por la nostalgia de
sus antiguas melodías y la novedad de su nuevo álbum "Cansiones".
Vestido de negro, muy conversador y acompañado por ocho excelentes músicos,
el cantante y compositor catalán compensó el fuerte aire
acondicionado de la sala "Avellaneda" del teatro "Nacional"
de La Habana, con el caluroso recibimiento que le brindó la heterogénea
multitud que desbordó ampliamente las más de 2.000 butacas del
local.
Desde que pisó el escenario, Serrat conectó con un público
en el que abundaban los jóvenes, algunos con el pelo más largo que
el Serrat que debutó en Cuba a mediados de la década de los
setenta, y también sus fieles admiradores que ya han cumplido cuarenta y
tantos años.
Su único concierto en la isla, donde no se presentaba desde enero de
1997, es ya uno de los conciertos de artistas extranjeros más concurridos
de los últimos tiempos, tras la actuación hace un par de meses del
grupo de rock británico "Manic Street".
Entre la veintena de canciones de este recital, Serrat se esforzó por
exponer los temas incluidos en su reciente disco, como "Sabana", "El
cigarrito", "Lo prohibido", "El amor, el amor", un
resumen de sones, rumbas y boleros.
Pero, una y otra vez, numerosas voces le pedían sus canciones antológicas
como "Penélope", "Malas compañías" y "Lucía",
que el cantante interpretó acompañado por un público que
demostró conocer bien las letras y que aplaudió con entusiasmo.
En la presentación de sus nuevas canciones Serrat explicó que
hay algunas que fueron junto a "Tarrés", alguien que definió
como su "otro yo".
Porque en su opinión "la vida es pródiga en pocas cosas,
pero todos tenemos otro yo", que en su caso no es otro que el propio "Tarrés"
(Serrat al revés).
Entonces "Tarrés" y Serrat son los auténticos
creadores del disco deliberadamente titulado "Cansiones", que ha
estado presentando en varios países latinoamericanos en los últimos
meses.
Al primer intento por despedirse del público, una cerrada ovación
y el reclamo unánime de las canciones de otros tiempos, obligaron al
cantante y a su grupo a volver al escenario para retroceder en el tiempo con "Mediterráneo",
"Para la libertad", "Caminante no hay camino", y "La
matinada", que interpretó en catalán.
Joan Manuel Serrat demostró, después de más de veinte años
de su primera presentación en Cuba, que sigue siendo uno de los cantantes
extranjeros más populares en la isla caribeña.
Este concierto de Serrat fue una de las atracciones de la Feria
Internacional Cubadisco 2001, en la que fue galardonado con un "Premio de
Honor", que le fue otorgado junto a otros cinco músicos cubanos.
Esta vez el cantante catalán tuvo un escaso contacto con la prensa, sólo
hizo unas breves declaraciones en la presentación del disco "Encuentros
con La Habana", una iniciativa del Ayuntamiento y la Escuela Municipal de Música
de la localidad de Mollet et Vallés (nordeste español) cuyos
beneficios serán destinados a las escuelas de música cubanas.
"Aquí todos han puesto no sólo su canción, sino
también su corazón y sus ideas", dijo Serrat en la presentación
de "Encuentros..." realizada por la Sociedad General de Autores y
Editores de España (SGAE) en una de las jornadas de la feria Cubadisco.
Para el artista, este proyecto, que será presentado próximamente
en España, es importante "en esta vida donde la gente funciona tan
por su cuenta y los valores de la solidaridad no están pasando
precisamente por su mejor momento".
"Una sencilla escuela de música en un pueblo catalán ha
impulsado este gran trabajo. Cualquiera puede hacer algo si se empeña y
es persistente. Eso ha hecho esta escuela, afortunadamente para la educación
musical cubana. Con proyectos como este conseguimos un beneficio también
social, pues probamos que acciones así pueden realizarse si entre todos
echamos una mano".
En el disco grabado en los estudios de la Empresa de Grabaciones y Ediciones
Musicales (EGREM) de Cuba participaron también los cantantes del grupo
Ketama, el rockero argentino Fito Páez y los cubanos Carlos Varela y
Pablo Milanés, entre otros. EFE.
Rmo/aag/rt
Juicio en EEUU a "espías" cubanos en la incertidumbre
MIAMI, EEUU, 18 may (AFP) - El juicio a supuestos miembros de una red de
espionaje cubano en Estados Unidos sigue dejando abiertas más
interrogantes que respuestas, cinco meses después de iniciarse en un
Tribunal federal de Miami (Florida, sudeste) y cuando se encuentra ya en su fase
final.
Pocas veces un proceso suscitó tanta expectativa en esta ciudad, cuna
del exilio anticastrista, desde que se iniciara el pasado 6 de diciembre. En
septiembre de 1998, los cinco procesados fueron detenidos por el FBI en la región
de Miami y encausados por pertenecer presuntamente a una llamada "Red
Avispa" de espionaje cubano.
La operación mereció primeras planas en la prensa de Florida.
Pero cinco meses de testimonios, frecuentes recesos y algún
enfrentamiento verbal, han alargado tediosamente el juicio sin aportar luz
definitiva sobre la cuestión central: ¿se trata de peligrosos espías
que intentaron penetrar en instalaciones militares estaodunidenses, o de simples
"infiltrados" en organizaciones anticastristas de Florida?
La defensa ha alegado con habilidad que los cinco hombres sólo
pretendían prevenir acciones violentas o atentados de esas organizaciones
contra la isla. La fiscalía, en cambio, ha tenido dificultades hasta
ahora para aportar pruebas contundentes sobre supuestas acciones de espionaje.
Sin embargo, el juicio gira sobre todo en torno a un acontecimiento que tuvo
resonancia mundial hace cinco años, y tensó extraordinariamente
las relaciones entre Washington y La Habana.
En febrero de 1996, dos avionetas de la organización anticastrista
Hermanos al Rescate fueron derribadas por cazas cubanos en el Estrecho de
Florida. Sus cuatro tripulantes, tres de ellos de nacionalidad estadounidense,
murieron. Según La Habana, el derribo se produjo en espacio aéreo
cubano. Según Hermanos al Rescate, sobre aguas internacionales.
Uno de los procesados, Gerardo Hernández, está acusado de
haber entregado a Cuba el plan de vuelo de las avionetas, gracias a datos
proporcionados por un infiltrado en Hermanos al Rescate. Puede ser condenado a
perpetuidad por "conspiración" en el fatal derribo, que el
exilio anticastrista calificó de "acción terrorista" de
Fidel Castro.
Un considerable numero de expertos, cartógrafos y técnicos ha
desfilado estos meses ante el tribunal para desmenuzar aquel acontecimiento,
convertido en pieza central del proceso. La defensa pretende demostrar que el
derribo se produjo en el espacio aéreo cubano, lo que avalaría la
tesis de que Cuba fue objeto de "agresiones" de organizaciones
anticastristas, y la necesidad de prevenirlas.
Esa táctica ha generado irritación en los medios
anticastristas de Miami. El propio presidente de Hermanos al Rescate, José
Basulto, llamado recientemente como testigo, se quejó ante la juez Joan
Lenard que conduce el caso: "¡Aquí me están acusando a mí
y a Hermanos al Rescate, y no a estos señores (los supuestos espías)!".
Los ataques cruzados, las tácticas dilatorias y los tecnicismos
utilizados por algunos de los testigos no harán ciertamente fácil
la labor del jurado, compuesto por cinco hispanos no cubanos, tres anglosajones,
tres afroamericanos y un asiático.
El jurado prevé iniciar sus deliberaciones a fines de mayo, tras los
alegatos finales de la defensa y la fiscalía, indicaron el viernes
fuentes del tribunal.
Yupi
Internet EFE AFP
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