Las guaguas del noticiero
Lucas Garve, CPI
LA HABANA, mayo - Con motivo de una feria internacional del transporte turístico celebrada en la capital cubana, el ministro de Transporte señaló que 200 ómnibus de transporte público se ensamblarían en la fábrica de Guanajay y rodarían próximamente.
Sus palabras fueron difundidas por el noticiero de la televisión nacional.
Lo que el ministro no llegó a explicar es por qué los ómnibus del servicio público no salen de las terminales según las salidas señaladas. ¿Falta de petróleo? Cuba vendió 250 mil toneladas en el año 99.
Pese al aumento del 1,9 por ciento en servicios de transporte -según dato reflejado en "Cuba: rasgos generales de la evolución reciente en Estudio Económico para América Latina y el Caribe 1999-2000 de la CEPAL- en la parada de la ruta 4, la que está en
Prado y Consulado, ahí justamente, la cola de la 4 no decrece.
Mayo 14, 7 y 30 p.m. Salió un ómnibus de la 4 hacia Párraga. 9 p.m., apareció el siguiente ómnibus de la 4. Según muchos potenciales viajeros, quien no pudiera irse a las 9 p.m... que esperara.
Mayo 15, 8 y 15 p.m., el ómnibus de la 4 no pasa desde las 6 y 30 p.m. Unas sesenta personas, adultos con niños, con paquetes, jabas, esperan. Apareció una guagua unos veinte minutos después del cañonazo (las 9 p.m.) Los ómnibus montan 41 personas
sentadas y 10 u 12 de pie a la salida de la cabecera del Prado. ¿Los pasajeros de las otras paradas? Sólo un número entre 5 y 10 personas pueden subir.
Como el pasillo es muy estrecho, las dificultades para avanzar son enormes.
En la cola las personas que esperan con paciencia infinita se entretienen en reflexionar: "Si el ministro de Transporte tuviera que regresar a su casa en guagua". "Sólo hay guaguas en el noticiero de televisión". Otra voz: "En el noticiero de televisión
hay de todo". Otra voz: "Sí, pero yo no tengo televisor a color, el mío es en blanco y negro". "Guaguas, hay para los turistas, te fijaste la que pasó por aquí... iba vacía".
Se amontonan las reflexiones y a la hora de partir el ómnibus que llegó, el chofer debe batallar para que el pasajero que sobre baje mansamente... aunque en ocasiones, se forma.
Junto a la situación de la vivienda, el problema del servicio público del transporte es crítico en La Habana. No por gusto el número de transportistas privados creció en un 33 por ciento el año pasado. En el presente muchos particulares detienen el carro
y recogen pasaje a 10 pesos el viaje. Un trabajador al pagar su viaje en uno de estos vehículos sencillamente deja en el taxi privado lo que ganó en el día. Esta puede ser también una causa por la que muchos trabajadores con bajos sueldos prefieran dejar de laborar.
Mas las empresas y corporaciones mixtas poseen transportes propios para sus trabajadores. En la actualidad, estos trabajadores pertenecientes a sectores vinculados a la economía del dólar o instituciones importantes pueden beneficiarse con un servicio de transporte destinado a
ellos.
Una empresa denominada Transmetro funciona con ómnibus importados que alquila a empresas, corporaciones y algunas instituciones.
Mientras, el grueso de la población, laboral o no, tiene que luchar para subir a la guagua o al camello. A pesar de lo que vean y oigan en el NTV, noticiero nacional de televisión.
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