Dos dirigentes de la oposición respondieron a cuestionarios
hechos llegar por la embajadora Mariclaire Acosta a través de la embajada
en Cuba
Alejandro Lelo de Larrea.
El Universal. México.
Mayo 10, 2001
LA HABANA, Cuba.- Fuentes diplomáticas con sede en esta capital
proporcionaron a EL UNIVERSAL dos de los cuestionarios entregados por la
embajadora especial para los Derechos Humanos, Mariclaire Acosta Urquidi, a la
oposición cubana.
Los documentos elaborados en respuesta a lasseis preguntas, formuladas por
la diplomática mexicana, están signados por el presidente de la
Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional,
Elizardo Sánchez Santa Cruz.
El otro es la exposición escrita que elaboró Oswaldo Payá
Sardiñas, presidente del Movimiento Cristiano Liberación.
Los documentos fueron entregados por los opositores a principios de febrero,
vía la Embajada de México, pero también entregaron copias a
otras representaciones diplomáticas de países latinoamericanos en
La Habana.
He aquí una reproducción resumida de los planteamientos
elaborados por los opositores a las preguntas de Mariclaire Acosta, documentos
cuya autenticidad fue reconocida por ellos.
Las respuestas de Elizardo Sánchez
Acosta Urquidi elaboró seis cuestionamientos a Elizardo Sánchez,
fundamentados en tratados y estándares internacionales sobre derechos
humanos.
P.-De acuerdo con los instrumentos internacionales de derechos humanos, de
los que Cuba es parte, ¿considera usted que se respetan los derechos
humanos protegidos por dichos instrumentos? ¿Cuál es el grado de
aplicación de dichos instrumentos internacionales, cuáles derechos
son respetados y en qué medida?.
R.-En Cuba no se manifiestan las discriminaciones de la mujer, o raciales,
de forma generalizada o institucional. Las mujeres tienen igual acceso a la
educación y al trabajo, esto último también beneficia al
Estado -único virtual empleador-, quien puede contar con una masa laboral
aún mayor, que es retribuida actualmente con un salario promedio de 11 dólares
al mes.
Al ser imposible su eliminación por decreto, la discriminación
racial subyace en la sociedad cubana, a pesar del discurso oficial que, por
cierto, ha sido marcadamente integracionista.
La tortura física no es practicada como política de Estado,
registrándose frecuentes hechos aislados de brutalidad policial, que
resulta sistemática en el enorme aparato penitenciario.
En cuanto a la tortura o apremio psicológicos, la situación es
diferente, pues durante muchos años las autoridades policiales han
recurrido a ciertas prácticas dentro de esa forma de tortura.
P.-¿Cuáles son los órganos encargados de la protección
de los derechos humanos en Cuba? ¿Qué tan eficaces son éstos
en la tutela de los derechos humanos de los cubanos? ¿Cuál es su
alcance y cuáles sus perspectivas en el corto y mediano plazos?. R.-La
eficiencia de los órganos responsables de la protección a los
derechos humanos en Cuba es prácticamente nula. No se advierten indicios
de que esta situación pueda comenzar a revertirse a corto plazo, pues el
gobierno persiste en responder \cada vez con más represión a todas
las manifestaciones de disidencia o simple descontento popular.
P.-¿Cómo se garantizan los derechos humanos en Cuba?
R.-La situación de los derechos sociales y culturales es
relativamente menos desfavorable. Todavía hay sitio en las escuelas para
todos los niños, y toda persona enferma puede ser atendida por un médico.
Los derechos económicos son vulnerables casi por definición,
ya que los cubanos no tenemos derecho a trabajar libremente en cualquier rama de
la economía nacional, debido a que domina el absoluto monopolio de la
propiedad estatal, y es el Estado el único virtual empleador, excepto los
minúsculos islotes donde sobreviven los pequeños campesinos y la
masa decreciente de trabajadores individuales urbanos o cuentapropistas.
P.-¿Cuáles son los mecanismos jurídicos, administrativos
y judiciales establecidos por el Estado, para garantizar la protección de
los derechos humanos?.
R.-Debido a que no existe en nuestro país un Estado democrático
de derecho, tales mecanismos formales devienen una suerte de engañosa
caricatura. Es el mismo Estado el que asume ciertas funciones propias de una
procuraduría de derechos humanos, que incluso cierra los ojos ante los
abusos, irregularidades, ineficiencia administrativa.
P.-¿En qué medida ha incorporado Cuba, en su legislación
nacional, los estándares internacionales de protección de los
derechos humanos?.
R.-En una medida muy limitada...
P.-¿Considera usted que en el corto plazo, el Estado cubano estaría
en posibilidad de ser parte de algún otro instrumento internacional, en
materia de derechos humanos?.
R.-Considero que el Estado cubano puede ser parte, a corto o mediano plazos,
del Pacto de Derechos Civiles y Políticos y sus Protocolos Facultativos,
y del Pacto de Derechos Económicos, Sociales y Culturales. |