Anunció una dura batalla para sancionar a la isla · Pero las
posibilidades de triunfo son escasas
ANA BARON. Washington. Corresponsal.
Clarín digital. Marzo 8,
2001
Aunque ya no luce uniforme militar, el Secretario de Estado, Colin Powell,
no dudó en recurrir ayer a la terminología militar para anunciar
que Estados Unidos librará una dura batalla en la Comisión de
Derechos Humanos de las Naciones Unidas a fin de lograr una enérgica
condena en contra de Cuba. Pero la posibilidad de que la diplomacia
norteamericana salga este año victoriosa disminuye día a día.
"La resolución sobre Cuba en la conferencia de derechos humanos
será una prioridad. Estamos juntando las fuerzas. Va a ser una batalla
muy, muy dura", dijo Powell con gran determinación.
El presidente cubano Fidel Castro lanzó, hace unas semanas, su propia
campaña destinada a impedir que países como Argentina o incluso México
se alineen con Estados Unidos. Acusó al gobierno argentino de "lamerle
las botas a Washington" por haber votado el año pasado contra La
Habana, alineado con Washington.
Este año sin embargo, la situación ha cambiado. La República
Checa presentó, con apoyo de Polonia, una resolución en la que no
sólo denuncia la violación de derechos humanos sino que critica
también el embargo que Estados Unidos impuso contra la isla hace más
de 40 años. Según una fuente diplomática argentina, el
gobierno de Fernando de la Rúa tiene intenciones de votar esta propuesta.
"En este momento tenemos un problema con la resolución por los
agregados contra el embargo", reconoció Powell ayer ante el Comité
de Relaciones Internacionales de la Cámara de Diputados.
La resolución que presentó el año pasado la República
Checa no incluía ninguna mención al bloqueo. Pero el nuevo
gobierno checo cambió la propuesta.
"Le estamos diciendo a los que han propuesto eso (la moción
checa) que para nosotros es un problema muy serio y que nos será muy difícil
alinearnos detrás de él", explicó Powell.
Powell explicó que el gobierno de Bush está organizando una
delegación para el voto del mes próximo y que designará a
un embajador que será el encargado de participar en la reunión.
La resolución del año pasado criticando a Cuba por la violación
de los derechos humanos pasó por 21 votos contra 18 y hubo 14
abstenciones.
Según la fuente diplomática consultada, Brasil tiene intención
de volver a abstenerse. En cuanto a México, "se abstendrá
pero en vez de defender a Cuba y atacar a Estados Unidos como lo ha venido
haciendo hasta ahora para justificar su abstención, este año es
muy probable que vaya a hacer una crítica contra el problema de los
derechos humanos en la isla", aseguró la fuente.
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