Se quejan
habaneros de productos de la "bolsa negra"
LA HABANA, 27 de julio (Luis Viño Zimerman, UPECI) - Una operación
policial que tuvo lugar recientemente en ciudad de La Habana puso de manifiesto
el riesgo que implica para la salud de los capitalinos adquirir medicamentos y
otros productos en el mercado ilegal o "bolsa negra", como le llaman
en Cuba.
Registros efectuados en diferentes zonas de la capital condujo a
mini-almacenes de medicamentos vencidos y fábricas artesanales de
desodorantes, algunos de cuyos componentes se consideran dañinos para la
salud.
Sin embargo, la población recurre cada día a la "bolsa
negra" para comprar productos que el estado cubano no asigna a los
ciudadanos por la cuota de racionamiento o que les vende en cantidades
insuficientes, o que se expenden en los comercios dolarizados o a precios
impagables para el cubano común.
"Compré un paquete de talco en el mercado ilegal y le causó
alergia a mi bebé de ocho meses", se quejó Mervin Aguila
Moreno, madre de 26 años que reside en calle 8 #522 entre 21 y 23, en el
Vedado, municipio Plaza de la Revolución.
Algo parecido le ocurrió a Ricardo Fragoso Rivas, de 28 años y
vecino de Santa Rita #301, en el reparto Juanelo. "Adquirí un
desodorante en la 'bolsa negra' y me causó accesos en las axilas. Tuve
que someterme a una intervención quirúrgica y estuve seis meses
sin poder trabajar", precisó el joven.
De cualquier modo las personas siguen comprando en el mercado ilegal lo que
no pueden adquirir por otras vías. De acuerdo al testimonio de analistas
independientes, la solución de los problemas económicos del país
radican en la libertad de empresa y de comercio.
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