Publicado el 18 de julio de 2001 en el
El Nuevo Herald
En marcha los Grammy
Erwin Perez. El Nuevo Herald
Tras ser objeto de polémica, la segunda edición de los Grammy
Latino empezó a tomar forma definitiva ayer en Miami, al anunciarse en la
Arena de American Airlines las nominaciones a los codiciados premios.
La larga lista --que incluye a artistas que presentaron discos entre el 1 de
abril del 2000 y el 31 de marzo de este año-- fue encabezada por el joven
cantante colombiano Juanes, quien recibió candidaturas en seis renglones.
También se convirtieron en múltiples candidatos el cantante
español Alejandro Sanz, con cinco postulaciones. Paulina Rubio, el Grupo
Aterciopelados, Fito Páez y Caetano Veloso obtuvieron tres cada uno.
Los anuncios fueron hechos durante una ceremonia especial que contó
con la presencia de personalidades como Thalía, Emilio Estefan y Jorge
Mas Santos.
Durante la ceremonia de nominación, se informó que músicos
cubanos residentes en la isla lograron postulaciones, dando lugar a que
participen en la entrega de premios del 11 de septiembre, posibilidad rechazada
por un sector del exilio cubano y óbice de la polémica que le costó
a Miami perder la sede el año pasado, cuando se realizó en Los
Angeles.
Esos artistas son el salsero Isaac Delgado, el pianista Chucho Valdés,
el dúo Celina y Reutilio y la cantante Omara Portuondo, integrante del
grupo Buena Vista Social Club.
El dúo y Portuondo disputarán un Grammy Latino en la Categoría
Mejor Album Tropical Tradicional con otra leyenda musical de Cuba: Celia Cruz.
La guarachera no se expidió sobre el asunto de competir con cubanos
de la isla, pero sostuvo que "es un placer y un honor'' recibir la nominación.
"Como todos, quisiera ganar, pero si no gano será un honor haber
estado seleccionada'', agregó.
En alusión al posible descontento de cubanos en Miami, el trompetista
exiliado Arturo Sandoval dijo: "Los cubanos de aquí debemos
demostrar que no tenemos una mentalidad agresiva y respetamos los valores artísticos''.
Mas Santos --titular de la Fundación Nacional Cubano Americana y
fuerte propulsor del evento-- dijo a El Nuevo Herald que "las nominaciones
no hubiesen cambiado si el Grammy hubiera sido en otra ciudad''.
La participación de los cantantes que viven en la isla, entre otras
razones dadas por exiliados opuestos a los Grammy en Miami, dará dinero
extra a las arcas del gobierno de Fidel Castro.
Se desconoce si Delgado, Valdés, Portuondo, así como Celina y
Reutilio, aterrizarán aquí en septiembre y, según Emilio
Estefan, quienes estén descontentos "tienen todo el derecho de
protestar''.
"Igualmente'', matizó el empresario --otro de los principales
impulsores de la llegada del Grammy a Miami--, "sabiendo cómo es
Fidel Castro, es posible que no les de permiso para venir''.
Willy Chirino apoyó el evento en Miami porque "es la capital de
la música latina'' pero, refiriéndose a los artistas cubanos
residentes en Cuba, completó: "Quien conozca la realidad de Cuba
como ellos la conocen y no la denuncie, traiciona a su pueblo''.
La entrega de los Grammy Latino es organizado por la Academia Latina de las
Grabaciones (LARAS), será televisado en directo a todo el país por
la cadena CBS.
Golpe al contrabando humano desde Cuba
Wilfredo Cancio Isla. El Nuevo Herald
En un fuerte golpe contra el tráfico de inmigrantes desde Cuba, dos
hombres fueron arrestados por las autoridades federales bajo cargos de
contrabando humano, luego de que familiares de una persona retenida por los
contrabandistas se decidieran a llamar a la policía para denunciar una
presunta extorsión por $8,000.
Alexis González Hernández, con residencia permanente en
Estados Unidos, y Eliecer Lara Salado --un fugitivo de la justicia
norteamericana, conocido también como Lisardo Pérez Carvajal--,
fueron denunciados ayer ante la fiscalía federal de Miami, en un caso sin
precedentes en la prolongada batalla contra las operaciones de contrabando que
proliferan en el Estrecho de la Florida.
Los dos hombres habían sido detenidos la noche del lunes como
resultado de una operación especial del FBI y el Servicio de Inmigración
y Naturalización (INS), la cual vinculó agencias federales y
departamentos policiales, desde North Miami Beach hasta Key West.
"Tuvimos que operar con mucha rapidez para garantizar el éxito
de la operación'', afirmó ayer Judy Orihuela, portavoz del FBI en
Miami.
De acuerdo con Orihuela, el caso comenzó a gestarse el pasado domingo
alrededor de las 11 p.m., cuando los familiares de Rogelio García, un
inmigrante cubano, llamaron a la policía de Clewiston, Florida, para
informar que éste estaba en poder de los presuntos contrabandistas,
quienes exigían el pago de $8,000 para proceder a su liberación.
La denuncia de los familiares de García desató un vertiginoso
operativo encubierto en las siguientes horas.
Un investigador del Condado de Monroe ayudó a obtener la cooperación
de los familiares de García, quien había arribado a los Cayos el
11 de julio.
"Este es un caso que abre una brecha decisiva'', manifestó Steve
Quiñones, agente especial de la Patrulla Fronteriza. "Es magnífico
que la gente se decida a denunciar tales situaciones, pues durante mucho tiempo
hemos solicitado esta cooperación''.
De acuerdo con una declaración jurada de cinco páginas,
presentada por Ralph Defelice, agente especial del INS, los contrabandistas le
habían comunicado a la familia de García que, de no pagar los
$8,000 en efectivo, optarían por hacerle daño físico o
retornarlo a Cuba.
"El INS y el FBI condujeron la operación mediante la cual un
agente encubierto del INS contactó a los contrabandistas y llegó
al acuerdo para entregarles los $8,000 a cambio de García'', escribió
Defelice en el texto entregado a la fiscalía federal de Miami.
Por vía telefónica, el agente encubierto acordó
encontrarse con González Hernández en Homestead. Al ver el dinero,
el contrabandista llamó para que trajeran al inmigrante cubano retenido.
Seguido por el agente encubierto, González Hernández se dirigió
a una segunda dirección en Homestead. Allí se encontraron con Lara
Salado, quien arribó conduciendo una camioneta roja, con dos pasajeros a
bordo.
Todas las conversaciones del operativo fueron grabadas.
De inmediato González Hernández presentó a García
al agente encubierto. Las autoridades procedieron entonces al arresto de ambos
contrabandistas, poniendo fin al operativo iniciado 19 horas antes.
Según la declaración, el otro pasajero fue identificado como
Rafael Cuéllar, quien afirmó haber pagado $8,000 a González
Hernández para ser traído desde Cuba en la misma operación.
Las investigaciones posteriores señalaron a Lara Salado como un fugitivo
de las cárceles federales, buscado por el Servicio de Alguaciles de
Estados Unidos.
Se espera que la fiscalía federal proceda mañana jueves al
encausamiento de los arrestados en el hecho.
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