CUBANET .INDEPENDIENTE

3 de julio, 2001


Desalojo o extracción, no hay diferencia

Fara Armenteros, UPECI

LA HABANA, julio - El desalojo ha sido y es una práctica impopular. Aunque esté respaldado por la ley, el pueblo lo considera injusto. Los desalojados no poseen casa, ni tierras, ni tierras, ni dinero. Sencillamente, son pobres.

El desalojo aún se practica en Cuba. Ahora lo llaman extracción. Los extraídos de hoy tienen la misma categoría social que los desalojados de ayer.

En el país, los problemas relacionados con la vivienda aumentan por día. Originan "ilegalidades" que tienen por denominador común la necesidad y dan lugar a conflictos de convivencia que muchas veces desencadenan en tragedias familiares.

Según los medios de prensa nacionales miles de personas han construido, ampliado o remodelado el inmueble donde residen desobedeciendo la legislación que controla esa actividad. Señalan, además, que muchas de esas personas no pueden justificar legalmente la compra de los materiales, y que en lo que respecta a la adquisición de casas y terrenos hay muchas irregularidades.

También admiten los periodistas gubernamentales que la corrupción de algunos funcionarios ha jugado un papel importante en el incremento de los delitos relacionados con la vivienda.

En algunos casos los violadores serán sancionados con multas. En otros, las obras serán confiscadas o demolidas. De cualquier modo, nuevas familias serán desalojadas.

Si la construcción o remodelación del inmueble fue realizada con financiamiento de un ciudadano extranjero, que desea tener una casa en el Caribe, el daño será menor y lo resuelve si invierte más dólares y hace negocio en una de las inmobiliarias que da servicios a los foráneos.

Si de cubanos se trata...

Las autoridades de la legislación que regula la construcción, ampliación o remodelación de viviendas con esfuerzo propio, pero no cuentan con asignación de materiales para venderlos a la población. Por otra parte, los trámites para obtener el permiso que ampara estas labores pueden demorar años.

Mientras tanto, derrumbes, desalojos, hacinamiento, conforman el paisaje cotidiano de la realidad cubana. Son factores traumáticos, sobre todo cuando afectan a familias donde hay ancianos o niños pequeños, pues los problemas de vivienda demoran años en ser solucionados, si es que tienen solución.

Ana Rosa Abar Bueno fue desalojada a finales de 1998 del apartamento donde vivía con sus dos hijos. Aún ella y su hijo de cinco años duermen en el suelo, y tuvieron suerte que una persona caritativa les dio asilo bajo su humilde techo.

A la señora Abar le asignaron una casa inhabitable y le dieron un tiempo limitado para repararla, pero está a punto de perderla porque no cuenta con recursos económicos para emprender la obra.

Personas jóvenes que carecen de vivienda son aceptados por ancianos que viven solos, de esta manera se complementan porque unos resuelven su necesidad de vivienda y los otros su necesidad de compañía y amparo económico.

Recientemente, los vecinos de la calle D entre 10 y 11 en el reparto Lawton, en el municipio habanero Diez de Octubre, fueron testigos de la extracción de Sonia Méndez Sainz y sus dos hijas menores de edad del apartamento donde residió nueve años con una anciana. Al fallecer ésta, la Dirección Municipal de la Vivienda declaró ilegal a Méndez y su familia.

Nesleysis Delgado, que siempre residió con sus abuelos en el pueblo cautivo "Briones Montoto", en la provincia Pinar del Río, tuvo que abandonar ese sitio con una niña de quince meses de edad.

Los abuelos de la joven emigraron a Estados Unidos y ella quedó en la casa con una tía cuyo permiso de salida del país estaba condicionado a la entrega de la vivienda.

Hasta en el cautiverio persigue el desalojo a estas familias, ya que los llamados pueblos cautivos son hijos del desahucio masivo por el cual arrancaron de sus casas y sus tierras a miles de familias de las montañas del Escambray. Desde entonces viven como condenados al desarraigo.

"Con la ley nos dan en la cabeza", dice un joven que está a punto de ser extraído de la vivienda que fabricó su abuelo y donde vive hace más de dos años con una prima que emigrará del país y cuyo permiso de salida está condicionado a la entrega del inmueble.

"¿Habrá que quitarle la venda de los ojos a la Justicia para que vea bien lo que pasamos aquí?", concluyó el muchacho.


Esta información ha sido transmitida por teléfono, ya que el gobierno de Cuba no permite al ciudadano cubano acceso privado a Internet.
CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores, y autoriza la reproducción de este material, siempre que se le reconozca como fuente.


[ TITULARES ] [ CENTRO ]

La Tienda - Libros y accesorios de CubaNet
Visite La Tienda
LIBROS y accesorios

In Association with Amazon.com

Busque:


BUSQUEDA

Busque en Noticias de julio

Búsqueda avanzada


SECCIONES

NOTICIAS
Prensa Independiente
Prensa Internacional
Prensa Gubernamental

OTROS IDIOMAS
Inglés
Aemán
Francés

SOCIEDAD CIVIL
Introducción
Cooperativas Agrícolas
Movimiento Sindical
Bibliotecas
MCL
Fraternidad de Ciegos
Seguidores de Cristo
Estudios Sociales
Ayuno

DEL LECTOR
Cartas
Debate
Opinión

BUSQUEDAS
Archivos
Búsquedas
Documentos
Enlaces

CULTURA
Artes Plásticas
Fotos de Cuba
Anillas de Tabaco

CUBANET
Semanario
Quiénes Somos
Informe 1998
Correo Electrónico


CubaNet News, Inc.
145 Madeira Ave, Suite 207
Coral Gables, FL 33134
(305) 774-1887