Dieciocho años
de embarazo
Lázaro Raúl González, CPI
PINAR DEL RIO, enero - Por fin parió Catana, no Catana la del viejo
cuento, sino la Catana que es el aparato económico cubano. Al fin, tras
18 años de espera, gastos, despilfarros y bastante traqueteo propagandístico,
fue terminada la presa del río San Juan, enclavado unos 25 kilómetros
al oeste de la Ciudad de Pinar del Río.
Según cifras dadas a conocer a la opinión pública, la
obra entregada el 28 de diciembre tuvo un costo de 10 millones y medio de pesos,
lo cual ha despertado suspicacia respecto a la eficiencia de sus ejecutores
debido a la relativa simplicidad del proyecto inicial: unir, mediante la
construcción de un dique, dos laderas situadas a ambos lados del cauce
del río.
Aunque la presa podría almacenar 16 millones de metros cúbicos
de agua, en realidad su designio no es el de un embalse tradicional. Se supone
que su toma se mantendrá siempre abierta, drenando. Su primigenio
objetivo es el de proteger las famosas vegas tabacaleras de San Juan y Martínez,
y al propio pueblo, en tiempo de lluvias intensas, cuando puede bajar de la
montaña un torrente de hasta mil 400 metros cúbicos de agua, ¡por
segundo!
Aunque el pueblo de San Juan había sufrido inundaciones históricas,
no fue hasta junio de 1982 que las más altas autoridades del país
se dieron por enteradas y determinaron que la solución del problema podía
ser erigir un muro de contención en las faldas de la cordillera, tres kilómetros
al norte de la cabecera municipal. Pero a pesar del dramático recuerdo
dejado por el ciclón Alberto aquel 2 de junio de 1982, que ocasionó
9 muertes y la creciente llegó al centro del pueblo, el proyecto de la
presa cayó en el olvido durante casi un decenio no obstante haber estado
el país entonces en tiempo de "vacas gordas".
En el año 91 se dieron los primeros pasos rumbo a la obra, se
trazaron los viales que conducirían al sitio, pero... llegó el período
especial y el proyecto fue nuevamente engavetado. Sólo seis años
después se reiniciaron los trabajos que ahora finalmente terminaron, con
un costo añadido no por la calidad, sino por el tiempo de manoseo.
La ejecución de la presa del río de San Juan no sólo
tipifica el calamitoso modus operandi de la economía cubana, sino también
el de su congénere la prensa oficialista. Durante los dieciocho años
que duró el desastre ésta se mantuvo reportándolo como
actos gloriosos de un episodio intergaláctico, preñado de tanta
luz que...
Menos mal, tras un período de dieciocho y medio años de
embarazo, hay que reconocer que cosmológicamente es un tiempo bastante
breve, finalmente parió la Catana.
Esta información ha sido transmitida por teléfono,
ya que el gobierno de Cuba no permite al ciudadano cubano acceso privado a
Internet. CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores, y autoriza
la reproducción de este material, siempre que se le reconozca como
fuente.
|