ETECSA:
reina de las deficiencias
Claudia Márquez Linares, Grupo Decoro
LA HABANA, agosto - A pesar de algunos avances cuantitativos de los últimos
años, la telefonía en Cuba no ha superado su mala calidad. La
Empresa de Telecomunicaciones de Cuba S.A. (ETECSA), asociación mixta
entre el régimen de Fidel Castro e inversionistas italianos, que vende de
manera exclusiva los servicios telefónicos a los residentes de la isla,
es criticada por la mayoría de sus clientes.
Las ineficiencias de la ETECSA son múltiples. En las principales
ciudades del país, principalmente en la capital, aumentó el número
de teléfonos públicos y privados. En los públicos, por
ejemplo, es casi imposible encontrar cuya pequeña pantalla no presente el
siguiente mensaje: "Sólo puede efectuar llamadas de emergencia",
lo que significa que la caja recaudadora está llena de monedas o que
simplemente el aparato está defectuoso. Reiteradamente los funcionarios
de ETECSA han planteado que se superará esta situación pero en la
práctica todo sigue igual.
He escuchado comentarios de ciudadanos que, haciendo gala del choteo, se
burlan del servicio de llamadas internacionales al expresar: "Más
bien se trata de un servicio de música clásica". Se refieren
al fondo musical que el cliente escucha por el auricular durante las largas
esperas que caracterizan ese tipo de servicio.
Sucede que como a los cubanos se les prohibe comunicarse directamente con el
exterior del país por teléfono, deben hacerlo a través de
las operadoras de ETECSA (personal "confiable" puesto por el
gobierno), es así como éstas, luego de informarle a los usuarios
que esperan en línea le conectan una grabación musical.
Recientemente, una vecina mía tuvo que esperar media hora para que le
pusieran la llamada que solicitó. ¡Puede considerarse afortunada!
Otro de los males es la interferencia en las líneas. Frecuentemente,
cuando se descuelga el teléfono se escucha en el auricular a cualquiera
de las emisoras de radio de Ciudad de La Habana, principalmente Radio Reloj,
estación informativa que da a conocer la hora a todas horas. También
se oyen conversaciones mientras se habla por teléfono.
Hace algunos días, me sorprendió un fenómeno increíble:
al prender el pequeño radio portátil de casa de mis tías,
escuché íntegramente lo que hablaba por teléfono el vecino
de al lado. No miento, la conversación se oía con más
calidad que las emisoras de radio nacionales.
Al contar sobre este fenómeno a cierto amigo, me explicó que
tiene una vecina que siempre le avisa cuando oye en su viejo televisor marca
Caribe las comunicaciones telefónicas que él realiza.
Por otro lado, hace meses comenzó la venta de tarjetas prepagadas
para el servicio en moneda nacional. No obstante, casi son inexistentes los
aparatos que funcionan con ese tipo de tarjetas.
En las cabinas climatizadas que ETECSA ha ubicado en lugares céntricos
de la capital, solamente uno de los cinco teléfonos que tienen instalados
opera en moneda nacional y casi siempre del mismo cuelga un letrero que informa:
"Roto".
Un dato curioso: en las dos cabinas ubicadas en el llamado casco histórico
de la ciudad la ETECSA desconectó y retiró del sitio los teléfonos
que operan en pesos. Hay que llamar con dólares, o no llamar.
Pudieran tratarse otros aspectos relacionados con el tema de la
italo-gubernamental ETECSA, pero de seguro bastará lo escrito para
esbozar la situación de crisis, de incomunicación, que padecen los
cubanos.
La vida real desmiente el eslogan del Ministerio de Comunicación: "En
la guerra como en la paz, mantendremos las comunicaciones". Es más
realista que adopten este otro: "Con nosotros los cubanos nunca tendrán
comunicaciones eficientes y de calidad".
En esta crisis, ETECSA es la reina de las deficiencias.
Esta información ha sido transmitida por teléfono,
ya que el gobierno de Cuba no permite al ciudadano cubano acceso privado a
Internet.
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