Laberinto burocrático para empleo, frustrante para ex-reclusos
Reinaldo Cosano Alén
LA HABANA, mayo - Todo ex-recluso que haya obtenido la libertad por extinción de la sanción o que esté en libertad condicional, está obligado a obtener empleo en muy breve tiempo; si no, puede ser recluido de nuevo. Comienza para ellos un penoso laberinto burocrático
por la cantidad de trámites exigidos que tienen que cumplimentar.
Para ellos, lo más difícil será hallar algún centro laboral que tenga plaza disponible, ya que se conoce la alta tasa de desempleo y sub empleo que hay en nuestro país.
Lo otro es que aún existiendo vacante, el administrador o gerente esté dispuesto a echarse encima ese "muerto" (ex-convicto), pues existe demostrada repugnancia a contratar a ex-reclusos.
Pero aún presumiendo la buena intención del empleador, que siempre tendrá que ser una entidad estatal, entre los requisitos para obtener empleo (aunque sea provisional), está la exigencia de presentar la documentación oficial del Registro de Antecedentes
Penales, que de aparecer registrado hecho delictivo, anula automáticamente al candidato laboral.
Otros documentos que es obligatorio presentar son:
- Chequeo médico. No estar saludable, anula.
- Carta de recomendación del último centro laboral.
- Carta del Comité Militar (Está en edad militar, desde los 16 a 50 años)
- Certificación de escolaridad. Si no tiene el nivel exigido, será descalificado. Hasta para mozo de limpieza con 100 pesos mensuales de salario (5 dólares) se requiere no menos de 9no grado aprobado.
- Tres cartas avales de tres militantes del Partido Comunista de su barrio o cuadra, si la plaza que se pretende obtener está entre las consideradas de confianza, como serenos, custodios o sector turístico.
En el caso de ex-recluso con régimen de libertad condicional, se mantienen varias medidas discriminatorias adicionales. Una de ellas es que se le habilita un carné de identidad especial, diferente al del resto de sus conciudadanos, en el que además de los datos generales
del individuo, la fecha de caducidad coincide con la expiación de la sanción. Pero además con estas otras advertencias: "Libertad condicional. No cambiar de dirección sin la autorización del tribunal y de la Policía Nacional Revolucionaria".
Por supuesto, con tantas restricciones, es suficientemente obvio cuán fastidioso es obtener el empleo que le exigen a todo convicto.
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