Siguen las multas
LA HABANA, 24 de marzo (Reynaldo Cosano Alén) - No recuerda qué cantidad de infructuosos intentos y gestiones ha hecho Jorge Luis Rojas Peña, vecino de Campo Florido, Habana del Este, para obtener una licencia para el llenado de fosforeras de gas.
Por querer realizar tan útil labor sin el permiso que le niegan, el 12 de febrero, policías lo detuvieron. Al registrarle la mochila y descubrir los pequeños instrumentos de trabajo, fue públicamente vejado. Esposado lo montaron en el caro patrullero y lo condujeron a
la estación de policía de Guanabo, donde le aplicaron el Decreto-Ley 174, Artículo 3, Inciso 2: operar sin licencia comercial, aunque él no estaba llenando fosforeras en ese momento.
Con una multa impuesta de 300 pesos Jorge Luis Rojas Peña debió regresar a su casa, para a los pocos días, el 23 de febrero ver en propia carne repetida la historia.
Ese día, Rodolfo Falcón, también de Campo Florido y quien sí posee licencia, le pidió que se quedara en su puesto de trabajo mientras iba a la barbería. Esta vez los dos fueron detenidos y conducidos a Guanabo en un patrullero. De nuevo Rojas Peña
resultó multado con otros 300 pesos.
Mientras pasan los días, crece la inquietud en este joven desocupado que no tiene el dinero para pagar la multa y vencido el plazo el pago será entonces no de 600 pesos sino de 600 días de cárcel.
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