LA HABANA. Agencias. ABC. Junio 30, 2000
Elián González, el niño balsero, pasó ayer la primera noche en su nueva mansión de La Habana tras permanecer siete meses en Estados Unidos. El Gobierno cubano ha advertido que su regreso sólo es «el primer capítulo de la larga lucha».
Elián, de seis años, su padre y familia más directa, algunos compañeros de clase y sus maestros, fueron instalados en una mansión del residencial barrio habanero de Miramar que permanece vigilada por policías de uniforme y de paisano.
La casa de dos pisos, situada al borde del mar, es un moderno chalé que dispone de piscina, zona de juegos y en ella se ha habilitado un aula para que Elián y sus compañeros reciban clases. Al menos en dos ocasiones, Fidel Castro ha visitado esta casa para supervisar
personalmente las obras de acondicionamiento.
En una nota oficial, el Gobierno cubano dijo que «de inmediato y sin tregua proseguirá sin un minuto de descanso la batalla contra la asesina Ley de Ajuste Cubano y el cruel y criminal bloqueo (económico) de Estados Unidos».
El diario «Granma», órgano oficial del Partido Comunista, en un amplio despliegue informativo saludaba al niño en su portada de ayer con un «¡Al fin en la Patria!» y destacaba que Elián había llegado «con un sol bueno y un arco iris
resplandeciendo en el horizonte».
Sin embargo, el Gobierno de Fidel Castro se ha mostrado moderado en los últimos días con el asunto «Eliancito». Ningún miembro del Gobierno asistió a la bienvenida en el aeropuerto José Martí a excepción de Ricardo Alarcón,
presidente del Parlamento, que lo hizo en calidad de «asesor» de Juan Miguel González, el padre de Elián. «No habrá recibimiento oficial ni movilización popular alguna», habían advertido las autoridades en un comunicado, y el propio Castro
prometió no utilizar al niño en actos propagandísticos.
REACCIÓN DE RENO
La fiscal general (ministra de Justicia) estadounidense, Janet Reno, afirmó ayer que ella habría preferido ver al pequeño cubano Elián González quedarse a «vivir con su padre en un país libre», pero que, no obstante «es maravilloso que
puedan rehacer ahora el curso de sus vidas» Reno confirmó a la Prensa que al padre de Elián se le había ofrecido la posibilidad de permanecer en Estados Unidos, pero que no lo aceptó.
Por su parte, el presidente norteamericano, Bill Clinton, se felicitó por el desenlace del caso, aunque manifestó sonriendo que no le hubiera disgustado si el padre de Elián hubiese decidido quedarse con su familia en Estados Unidos. Sin embargo, el candidato republicano a
la Presidencia, George W. Bush, expresó su pesar por el retorno del niño balsero a Cuba. «Me entristece que esta tierra de hombres libres envíe de vuelta a un niño a la comunista Cuba», dijo.
Mientras, la prensa de Miami reflejaba ayer la «profunda tristeza, desencanto, cólera, rabia y frustración» del exilio cubano por lo que considera otra batalla perdida frente a la dictadura de Fidel Castro. |