MADRID. Manuel Frías. ABC, jueves 17 de agosto de 2000
Gómez-Angulo y Guillermo Jiménez, de espaldas en primer plano, no pudieron convencer a la delegación cubana. Miguel Berrocal
Definitivamente, Niurka Montalvo no representará a España en los Juegos Olímpicos de Sidney, salvo que se produzca «un gesto magnánimo y generoso de Cuba», única esperanza a la que se agarra ahora el secretario de Estado para el Deporte, Juan Antonio
Gómez-Angulo, después de la reunión privada que mantuvo ayer con el ministro cubano del deporte, Umberto Rodríguez.
En el primer contacto se reunieron en el aeropuerto de Barajas el director general de Deportes del CSD, Guillermo Jiménez, con la totalidad de la delegación cubana, formada por su ministro de Deportes, Umberto Rodríguez, el presidente de la Federación de Atletismo,
Alberto Juantorena, y la embajadora en España -también estuvo el alcalde de Guadalajara, José María Bris Gallego-. Una vez que los cubanos ratificaron su postura llegó a la cita Gómez-Angulo y pidió reunirse a solas con el ministro cubano, quien volvió
a ratificarle el veto.
NO HABRÁ MEDIDAS POLÍTICAS
«Hemos hecho todas las gestiones deportivas que estaban en nuestra mano y no cabe ninguna otra intervención posible», apuntó el secretario de Estado para el Deporte, quien señaló que había mantenido al tanto en todo momento a la ministra, Pilar del
Castillo, y que ésta había informado de todo, igualmente, al ministro de Asuntos Exteriores. Sin embargo, no se va a adoptar ninguna iniciativa diplomática «porque la decisión de Cuba está amparada por la Carta Olímpica y el Gobierno español no
puede acogerse a ninguna normativa». En este sentido, Gómez-Angulo apuntó que «si me pidiesen mi opinión sobre entrar en la vía política mi respuesta sería no». En el mismo sentido se manifestó el martes en ABC el presidente del Comité
Olímpico Español, Alfredo Goyeneche.
Gómez-Angulo recordó que desde que se conoció la noticia del veto el CSD ha mantenido reuniones a todos los niveles posibles y que, incluso, el pasado viernes estuvo con el presidente del Comité Olímpico Internacional, Juan Antonio Samaranch, quien ya le dijo
que muy poco se podía hacer en este caso después de hablar él mismo con el presidente del Comité Olímpico Cubano.
El secretario de Estado para el Deporte varió el discurso que había dado en un primer momento cuando se le preguntó por las posibles represalias. «En principio dije que no era partidario de tomar ninguna represalia porque no me gusta tomar medidas contra los deportistas
ni posturas ajenas al deporte. Pero ahora creo que, después de los Juegos de Sidney, habrá que considerar muchas cosas en los convenios que firmemos con los distintos países y, cuando se trate de temas relacionados con Cuba, habrá que estudiar el caso detenidamente».
LOS ESPAÑOLES, EN CONTRA
Gómez-Angulo apuntó que «una vez que he visto la postura inflexible de Umberto Rodríguez, el ministro cubano, le he hecho ver que esta medida no va a encontrar ningún apoyo en la opinión pública española, a diferencia de otras medidas
adoptadas con anterioridad por su Gobierno, aun reconociendo que tienen de su parte el amparo legal, por la excepcionalidad que supone el caso de Niurka Montalvo, que coloca su caso al margen de otros. Finalmente le he dicho que si la postura del Gobierno cubano es inamovible, que se respeten las
figuras humanas de Niurka Montalvo e Iván Pérez».
Precisamente para ellos el secretario de Estado tuvo al final palabras de apoyo y les deseó «un futuro brillante, a pesar del paréntesis que tendrán en Sidney».
© 2000 Prensa Española S.A. Reservados todos los derechos. |