A principios de este mes de septiembre, la compañía de telecomunicaciones O3b Networks, anunció que su constelación de ocho satélites, cuatro de los cuales fueron puestos en órbita el mes pasado, ya se encuentra en funcionamiento.
El nombre de la compañía O3b proviene de las iniciales en inglés de la frase “Other 3 Billion” y se refiere a los 3 mil millones de personas sin acceso a Internet que aún existen en el mundo. La compañía es capaz de ofrecer Internet por satélite de alta velocidad a lugares aislados donde es difícil, o demasiado caro, construir una infraestructura de fibra óptica. El área de cobertura incluye a Latinoamérica y el Caribe, África, el Medio Oriente, Asia y Australia.
Aunque el internet por satélite no es nuevo, la principal ventaja de los satélites de orbitas bajas de O3b es que permiten proveer Internet de alta velocidad y baja latencia (el tiempo que tarda la señal en viajar) de manera comparable a la ofrecida por conexiones de fibra óptica, pero a un precio mucho menor.
La mayoría de los satélites de otros proveedores de internet y datos funcionan en órbitas geoestacionarias – a un poco más de 22.000 kilómetros sobre la superficie de la Tierra. Debido a la gran distancia aumenta el tiempo que tardan las señales de datos en llegar a su destino. Los Satélites de O3b, sin embargo, funcionan en orbitas de baja altura, a sólo unos 8.000 kilómetros por encima de la superficie de la Tierra. Esta cercanía disminuye la latencia y hace que pueda competir con los servicios de fibra óptica.
Hasta el momento han contratado los servicios de O3b las Islas Cook, Pakistan y Nigeria. La compañía informa que muchos de sus clientes son ahora capaces de proporcionar servicios de datos a sus clientes cuando antes sólo eran capaces de ofrecer servicios de voz. Su servicio de datos es capaz de proporcionar un ancho de banda de 1.2 Gbps con una latencia de menos de 150 milisegundos.
“La parte emocionante de nuestro reto ahora es mantener el ritmo con la demanda”, dijo el CEO de O3b Steve Collar en un comunicado. “Tenemos 28 clientes que están esperando con impaciencia la activación del servicio y todos han escuchado la reacción positiva de los clientes que ya están en servicio firmado.”
La isla de Cuba se encuentra dentro del área de cobertura y es uno de los mercados del tercer mundo en la mira de O3b. Las ventajas para los cubanos serían muchas:
- Internet de banda ancha y baja latencia en cualquier lugar del país sin necesidad de invertir en costosa infraestructura de fibra óptica.
- Posibilidad de ofrecer servicios de Internet de alta velocidad para móviles como 3G, 4G, WiMAX y LTE.
- Posibilidad de ofrecer servicios de voz alta calidad (sin demoras por latencia o “delay”) y a bajos precios, lo cual abarataría el alto costo de las llamadas telefónicas internacionales que tanto malestar causan a las familias cubanas.
La excusa de siempre, El Embargo
O3b Networks no es una compañía norteamericana y por lo tanto no estaría sujeta a las sanciones del Embargo norteamericano a Cuba. Las oficinas operacionales de O3b se encuentran en la Isla de Jersey, una democracia parlamentaria bajo la monarquía constitucional del Reino Unido. Aunque algunos de sus inversores principales son norteamericanos, como por ejemplo, Google Inc, en 2009 la administración Obama incluyó enmiendas al embargo que eximen de sanciones a los norteamericanos que deseen ofrecer servicios de telecomunicaciones a la isla e incluso permite pagos directos por estos servicios.
Cuba necesita, hoy, más que nunca, de las nuevas tecnologías. Las universidades, los hospitales, los centros de investigación, los pequeños negocios, los profesionales cubanos, etc., necesitan urgentemente de acceso asequible al internet de banda ancha para no quedarse rezagados respecto al resto del mundo.
Esta nueva oportunidad, literalmente “llegada del cielo”, permitiría mejorar el acceso al internet en la Isla y también abaratar el costo de las comunicaciones telefónicas entre los cubanos dispersos por el mundo y sus familiares.