Qué hablaron Yeltsin y Clinton de Cuba y de la deuda de La Habana con Moscú


MIAMI, Estados Unidos.- La Biblioteca Presidencial del ex mandatario demócrata Bill Clinton en Little Rock, Arkansas, desclasificó y presentó un nuevo paquete de documentos donde se revelan detalles de las conversaciones entre el entonces presidente estadounidense y su homólogo ruso Boris Yeltsin, donde trataron el tema de armas a Cuba y la deuda de La Habana con Moscú, publicó el diario Martí Noticias.
Entre las carpetas desclasificadas del período de la administración de Clinton aparecen las transcripciones de conversaciones entre los entonces presidentes, y además fueron incluidas cientos de páginas de memorandos y otros documentos publicados en forma digital.
Las casi 1.000 páginas de documentos desclasificados van de 1993 a 1999, un período en el que ambos presidentes ganaron la reelección en el mismo año, 1996.
El primer encuentro cumbre entre los presidentes Bill Clinton y Boris Yeltsin tuvo lugar en el Hotel Pan Pacific de Vancouver, Canadá, los días 3 y 4 de abril de 1993, y uno de los temas principales para los dos presidentes fue el de la venta de armas y tecnología militar con la que la URSS se había comprometido, y que Rusia, como heredera, iba a asumir.
Yeltsin fue enfático en delinear los países a los que ya la Federación de Rusia no estaba exportando armas y dijo a Clinton: “Volviendo a la exportación de armas, sugiero que estén de acuerdo en que las empresas deben poder competir directamente en condiciones de mercado, determinando la calidad y el precio (…) No estamos vendiendo a ciertas naciones como Cuba, Iraq, Yugoslavia y, en un sentido limitado, a Taiwán. Pero estamos vendiendo aviones de combate a China. Yo digo que dejemos que las empresas compitan para tener acceso a los mercados. Sólo que no en los artículos prohibidos como las armas nucleares y sus vehículos de lanzamiento”.
En ese mismo encuentro, Yeltsin le expuso a Clinton que estaban cortando todos los contactos con los palestinos y sirios. Entonces Siria estaba bajo el régimen de Hazef al Assad, padre del actual gobernante Bashar al Assad. Pero Damasco le debía mucho dinero a Moscú.
“Hemos recortado nuestros contactos con los palestinos. Eso fue durante el período soviético – el Comité Central mantuvo contactos. Ahora no tenemos contactos, delegaciones ni nada”, le dice Yeltsin. “Los sirios están tratando de lidiar con los detalles de la situación política, es algo muy difícil de hacer. Nuestra cooperación con los sirios se ha reducido mucho. Esa es nuestra posición. Ahora, con respecto a la deuda: Siria nos debe mucho, así que necesitamos 120.000 millones de dólares”, declaraba el presidente ruso. Y siguió con el tema de la deuda que La Habana, bajo el régimen de Fidel Castro, tenía ahora con Rusia: “Nos gustaría vender la deuda, pero no podemos hacerlo debido a las sanciones contra Cuba. Shojin bromea diciendo que tal vez ustedes puedan comprar la deuda de Cuba”.
Yeltsin hacía referencia al economista Alexander Shojin, entonces ministro de economía de Rusia y vicepresidente del gobierno ruso; fuerte crítico del despilfarro soviético en los países del campo socialista.
Por la parte rusa en esa reunión participaron, además del canciller Andrei Kozyrev, el ministro de finanzas Boris Fyodorov, el ministro de energía atómica Victor Mijailov, el ex vicepremier Alexander Shojin, y el secretario de prensa Viacheslav Kostikov. Junto a Clinton estuvieron el secretario de Estado Warren Christopher, el de Tesoro, Lloyd Bentsen, el embajador extraordinario y asesor del secretario de Estado Strobe Talbott; Anthony Lake, asesor de seguridad nacional, y el portavoz de la Casa Blanca George Stephanopolous.
Por otro lado, durante la cumbre efectuada entre los dos mandatarios en Helsinki, Finlandia, en marzo de 1997, el presidente ruso expresó su molestia por las maniobras que realizaba Estados Unidos en el Mar Negro, y como ejemplo de su disgusto le preguntó sobre el sentir de la Casa Blanca si Rusia hiciera maniobras de entrenamiento en Cuba: “Está llevando a cabo maniobras navales cerca de Crimea. Es como si estuviéramos entrenando gente en Cuba. ¿Cómo se sentiría? Es inaceptable para nosotros”, le dijo Yeltsin a Clinton entonces.
En ese encuentro, junto a Clinton estuvieron la secretaria de Estado, Madelein Albright, el asesor de seguridad nacional Sandy Berger y el subsecretario de Estado, Strobe Talbott. Por la parte rusa, además de Yeltsin, el canciller y exjefe del espionaje ruso, Yevgeny Primakov, el asesor presidencial Dmitri Riurikov y el vicecanciller Yuri Mamedov.
Los documentos desclasificados no proporcionan revelaciones importantes sobre la dinámica de las relaciones entre los dos países después del colapso soviético de 1991, aunque sí muestran la famosa relación de amistad entre los dos personajes históricos que muchos observadores de la época apodaron “Bill y Boris”.
Los memorandos documentan las conversaciones, en persona y por teléfono, utilizando intérpretes, que ambos gobernantes mantuvieron en varios lugares y cubriendo muchos de los temas más molestos de la relación bilateral en ese momento: la guerra en Chechenia, el bombardeo de la OTAN contra Serbia durante la crisis de Kosovo de 1999, la expansión de la OTAN hacia el este y las negociaciones para el control de armas nucleares.